Educación y Formación Profesional: Claves para el Progreso en Medellín

«La tentación del dinero rápido puede oscurecer el horizonte de la educación y la formación profesional, desviando a los jóvenes de su verdadero potencial y propósito en la vida».


En la búsqueda constante de progreso y desarrollo social, la educación juega un papel fundamental. Como menciona Carolina Álvarez Marcos en el diario El País, «Si existe un signo inequívoco de progreso en una sociedad, ese es la buena educación». Pero, ¿qué significa realmente tener una buena educación? Más allá de los títulos y diplomas, se trata de cultivar valores humanos que se reflejan en nuestras acciones cotidianas: desde ayudar a alguien en la calle hasta mostrar empatía hacia nuestros compañeros de trabajo. Son estos gestos los que realmente enriquecen nuestra sociedad y la hacen más humana.

En Medellín, la educación es un pilar fundamental, con programas como la matrícula cero en las universidades públicas que buscan garantizar el acceso a la educación superior para todos. Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, aún enfrentamos el desafío de la deserción universitaria. ¿Cuál es la causa de esta problemática?

Una de las razones que he observado es el fenómeno de la búsqueda de dinero rápido, que lleva a muchos jóvenes a abandonar sus estudios universitarios en busca de alternativas aparentemente más lucrativas, como puede ser el trabajo como modelos webcam, expendedores de drogas u otras actividades que alejan a los jóvenes de sus sueños y proyectos. En esta búsqueda de éxito y riqueza inmediata, se está vendiendo una idea errada de lo que realmente significa tener éxito en la vida. El dinero y el éxito no son sinónimos, y es crucial que nuestra juventud comprenda esta diferencia.

Es necesario que como sociedad promovamos una cultura que valore la educación y la formación profesional como herramientas para el verdadero progreso. Debemos trabajar en conjunto para ofrecer a nuestros jóvenes oportunidades reales de crecimiento y desarrollo, brindándoles orientación y apoyo para que puedan alcanzar sus metas a largo plazo.

Además, es fundamental que como ciudadanos estemos alerta ante las influencias negativas que puedan desviar a nuestros jóvenes del camino de la educación. Debemos fomentar un ambiente en el que se promueva el respeto por el conocimiento y se reconozca el valor del esfuerzo y la dedicación.

En resumen, la educación y la formación profesional son pilares indispensables para el progreso de Medellín y de cualquier sociedad. Debemos trabajar juntos para fortalecer estos pilares y brindar a nuestros jóvenes las herramientas y el apoyo que necesitan para construir un futuro brillante y lleno de oportunidades. ¡El verdadero éxito se encuentra en el conocimiento y en la capacidad de contribuir positivamente al mundo que nos rodea!.


Todas las columnas de la autora en este enlace: https://alponiente.com/author/anaquintero/

 

Ana Milena Quintero

Abogada, especializada en derecho administrativo. Con trayectoria de 7 años en el sector inmobiliario y experiencia en la prestación de servicios a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). Centrada en la defensa y asesoramiento de las víctimas del conflicto armado colombiano.

Comentar

Clic aquí para comentar

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.