¿Qué pasa con los vigilantes en Itagüí?

La empresa de seguridad privada que presta sus servicios para la alcaldía de Itagüí responde al nombre de SEGURIDAD RAM, se creó en Bogotá en 1999 y opera en Itagüí desde el 2020. Anteriormente, operaban SEGURCOL y EXPERTOS.

Sobre RAM ya había escuchado varios rumores sobre presuntas ventas de certificados de cursos de entrenamiento y reentrenamiento de los vigilantes sin hacer el curso; es decir, que estarían pagando por unas capacitaciones que, al parecer, nunca hacían, lo cual es bastante delicado, pero no le presté suficiente atención a eso porque en época de elecciones los rumores para atacar a unos y proteger a otros, suelen ser muchos. Sin embargo, por esos días, una amiga contratista de la alcaldía de Itagüí me preguntó por mi madre y le comenté que estaba desempleada. Me dijo que hace unos días le había dicho que le facilitara la hoja de vida para ayudarla en servicios de vigilancia, a lo que le respondí que ella no sabía nada de esas labores. Para mi sorpresa, me dijo, entre risas, que “compra ese certificado que vale como 300.000 y ya (…). Así hacen todos”. Curioso.

Días después me contactó una fuente que trabajó como vigilante en el municipio y me dijo la misma información: que los cursos de vigilancia los compran sin necesidad de hacerlos. Por esos mismos días también me llegaron otras 3 fuentes que decían que sí, que se pueden comprar los certificados de entrenamiento y reentrenamiento sin hacer los cursos.

Todo indica entonces que no serían rumores de pasillo aquello de la compra de certificados de vigilancia sin hacer el curso que faculta a los guardas para ejercer.

Una de las fuentes me dijo que les cobran por el reentrenamiento y les dan “un certificado chimbo y no entrenan a nadie (…). A mí me lo vendió la jefe Luz Restrepo, que es supervisora allá”. La fuente le había manifestado a su superiora que ya se le estaba venciendo el curso, a lo que ella le dijo que le pagara a ella para luego darle la dirección en donde tendría que hacer el curso, pero nunca le dio nada, sino que “ella me hizo llegar el diploma y ahí dice una entidad que no conozco, dice que tantas horas, y yo nunca hice ese curso. Me cobró 70.000 pesos”. También me dice que no hay una cuenta bancaria específica para consignar esos dineros, ni un valor exacto, sino que todo se paga en las oficinas de ellos mismos y los valores variarían dependiendo de los afectos entre superior y guarda de seguridad.

Otra fuente me aseguró que cuando trabajaba con SEGURCOL debía ir 15 días hasta la academia a hacer el curso de 7:00 a.m. a 5:00 p.m. “¿Usted se imagina qué conocimiento va a tener un vigilante si le entregaron un maric4 cartón [sin hacer el curso]?” dice refiriéndose a la nueva dinámica de la seguridad privada en la actual administración municipal. Esta fuente, que sigue trabajando en el municipio, pero ya con RAM, se refiere al curso de vigilancia antes de operar en campo, mientras que el curso de reentrenamiento dura solo tres días para actualizarlos en su labor, el cual, además, no debería cobrárseles porque es deber de la empresa reentrenar a los vigilantes para que cumplan adecuadamente su labor.

RAM, entonces, también estaría cobrando, a parte del curso de reentrenamiento que oscilaría entre los 60.000 y los 80.000, el curso de entrenamiento para los nuevos, que costaría entre 300.000 y 320.000 para recibir el certificado en donde consta que se hizo el curso, aunque en realidad este no tenga lugar.  El certificado no es falso, pues es emitido por la autoridad correspondiente, pero lo cuestionable es que quien lo compra no se estaría capacitando realmente.

En un audio de Contrapoder Itagüí se evidencia cómo esta última fuente conversa con otros dos vigilantes activos del municipio. Allí se explica cómo y dónde se consigue el certificado de reentrenamiento, y cuánto costaría. Una de las personas dice lo siguiente: “no, mi parcero, usted le dice que se le va a vencer el curso y cuándo se le vence, y ella ahí mismo se lo saca… 80 pesos y se lo manda”. También le pregunta al otro colega lo mismo y dice que “usted tiene que pagar a la empresa los 80 mil pesos…  da los 80 mil y le llega el diploma al puesto, pero supuestamente la empresa lo llama a uno y le dice ‘vea, ya se le venció el curso, venga pague los 80 mil’” (escuchar audios). Por su parte, el alcalde José Fernando Escobar me comentó que pedirá una auditoría.

Esa misma fuente de los audios comenta que hace unas semanas despidieron a 18 vigilantes porque presuntamente les habrían entregado planillas para que llenaran con datos de posibles votantes por Carlos Andrés Trujillo y Daniel Restrepo, ambos candidatos al Congreso. Como esos vigilantes presuntamente no cumplieron con esas planillas, los habrían despedido. “Yo soy uno de los que me veo involucrado en esta hijueputa politiquería de Itagüí porque llevo mucho trabajando aquí y nunca había visto tanta hijueputa cochinada en esto”, dice con rabia. No sería raro, en tanto a los mismos vigilantes se les ha visto congregados con el candidato a la cámara, al parecer forzados por autoridades de RAM en el municipio (ver fotos abajo).

Sin embargo, no solo resulta reprochable aquello de los certificados presuntamente entregados irregularmente, ni el constreñimiento político sobre los vigilantes, sino también el hecho de que presuntamente algunas liquidaciones de varios guardas aún no se habrían efectuado desde que renunciaron en diciembre del 2021. Respecto a esto, intenté comunicarme con la subgerente de la empresa, Norma Ulloa, mediante su número de celular vía WhatsApp, pero curiosamente me dijeron que ese era un número comercial, pero que trasmitirán “esa información al encargado para que se realicen los pagos que aún se encuentren en trámite si a la fecha alguno aún se encuentra pendiente”. Iba a realizarle otra pregunta, pero “el contacto comercial” me bloqueó  (ver pantallazo abajo).

Finalmente, llama la atención que, en el 2018, la congresista amiga y llave de Carlos Andrés Trujillo, Nidia Marcela Osorio, haya condecorado a RAM por “sus buenas prácticas, generación de empleo y apoyo al desarrollo sostenible en el país”. ¿Por qué justamente a RAM? ¿Por qué RAM vino a parar a Itagüí? ¿Hay favores detrás de ello? (ver condecoración abajo).

 Santiago Molina

[email protected]


Todas las columnas del autor en este enlace: https://alponiente.com/author/segudemo/

Santiago Molina

Licenciado en Humanidades, Lengua Castellana de la Universidad de Antioquia.​

Comentar

Clic aquí para comentar

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.