La fuerza de la nueva presidenta de México

«Sheinbaum tiene dos desafíos importantes: Implementar un estilo de gobierno con ideas propias pero al mismo tiempo, continuar con el legado de Andrés Manuel López Obrador”.


Claudia Sheinbaum, la presidenta electa de México, ha marcado un nuevo panorama histórico en el país. Por un lado será la primera mujer en ocupar ese cargo y por otro, la aceptación que tiene de la sociedad, es algo inusual en los políticos mexicanos.

Tras tres semanas de haber ganado las elecciones con más de 35 millones de votos (5 millones por encima de AMLO, el actual presidente, siendo la candidata más votada de la historia de México) y con una aceptación social muy alta, que ha generado esperanza y optimismo entre las personas, ya ha comenzado a tomar decisiones importantes en su posición de presidenta electa.

Parece que  Sheinbaum, una científica de formación con un doctorado en cuestiones energéticas, tiene dos desafíos importantes: Implementar un estilo de gobierno con ideas propias pero al mismo tiempo, continuar con el legado de Andrés Manuel López Obrador.

Para sus críticos, tener un estilo propio sería casi imposible y entonces tendrá que cargar con la sombra de AMLO (enorme y pesadísima) durante todo su sexenio. Incluso pronostican que solo ejecutará las órdenes que le dé López Obrador desde lejos.

En cambio, los seguidores más fieles a la 4T (así denomina AMLO a su gobierno y a su movimiento político) aseguran que será una presidenta independiente, con ideas y decisiones propias, pero siempre respetando y engrandeciendo el legado de su antecesor.

La tarea no es fácil. Pero si bien su triunfo era predecible, no así que Morena (el partido oficial) se llevará el carro completo y alcanzara la mayoría en las Cámaras.

Esto le da la oportunidad a AMLO, de aprobar leyes muy polémicas (como reformar el poder judicial) con lo que terminaría su mandato de la mejor manera y ampliando su legado político.

Este escenario puso muy nerviosos a los mercados, que de inmediato reaccionaron con una devaluación del peso frente al dólar. Luego de ser la moneda más fuerte durante muchos meses, el peso mexicano resintió los embates y cedió ante las dudas e incertidumbres políticas.

Cuando la caída del peso parecía incontrolable, salió Claudia Sheinbaum con su primer anuncio importante: Rogelio Ramírez de la O, actual secretario de Hacienda, continuará en su puesto para el nuevo gobierno.

Esto calmó un poco la turbulencia cambiara, pero no fue suficiente. Entonce la presidenta electa hizo un segundo movimiento: Anunció a seis de sus nuevos secretarios que formarán parte de su gobierno.

Marcelo Ebrard, en la Secretaría de Economía; Alicia Bárcena en la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y Juan Ramón de la Fuente en Relaciones Exteriores.

Además de Ernestina Godoy en la Consejería Jurídica de la Presidencia; Julio Berdegué en Agricultura y Desarrollo Rural; y Rosaura Ruiz en el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt).

Esta fue la primera parte de su gabinete, que resulta equilibrado en cuestiones de género, con mucha experiencia en sus áreas respectivas y con perfiles muy preparados; pero sobre todo, encargados de las negociaciones comerciales con Estados Unidos y demás socios comerciales.

Esta decisión también tuvo un impacto positivo en el mercado y de inmediato, el peso recuperó parte de lo perdido aunque no ha regresado a sus mejores niveles.

Pero si algo faltaba para corroborar la buena aceptación que tiene la próxima presidenta de México entre los grupos poderosos, era el apoyo público de los grandes empresarios y esto ya lo logró.

El Consejo Coordinador Empresarial (CCE), el grupo que aglutina a las grandes grupos empresariales e industriales de México, señaló en un evento con Claudia Sheinbaum y aseguraron que tienen listas inversiones millonarias para impulsar el crecimiento económico del país.

Así poco a poco, Shienbaum comienza a mostrar que puede tener un estilo mucho más equilibrado para gobernar, sin tanta polémica ni polarización, pero falta todavía ver qué decisiones va a tomar en los temas más importantes para el país, como la estrategia de seguridad para combatir la violencia que se vive actualmente.

En este escenario, la presidenta electa de México comienza a ejercer su poder.


Todas las columnas del autor en este enlace: Daniel Higa Alquicira


Daniel Higa Alquicira

Nací en México y estudié periodismo en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); me encanta el fútbol, la música, el cine, la literatura y los viajes. Además de un buen café, la cerveza, tequila y mezcal (puro sabor mexicano). También me encanta platicar con las personas y descubrir lo que piensan y lo que sienten. Soy un enamorado (y lo digo con todo el romanticismo posible) del poder que tienen los individuos para cambiar su entorno a través de acciones simples y que la mayoría de las veces, pasan desapercibidas. La tarea que me he propuesto es encontrarlas y hacerlas visibles.

Comentar

Clic aquí para comentar

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.