Si vamos a ganar apelando al clasismo barato no vamos es pa ningún lado.
Fico representa a los peores poderes políticos de Medellín (el uribismo más rastrero) y por eso no merece ni un solo voto, no porque sea una «nea».
Neas son los pelados y las peladas de los barrios populares de Medellín, históricamente negados, históricamente perseguidos, de las barras de fútbol, de las esquinas y el parche, levantados a punta de barrio y sancocho, esos mismos que Fico persiguió hasta el cansancio en su alcaldía.
Las neas son una chimba, tienen unas estéticas propias y se le paran al que sea para defender lo suyo. Ahí, en el barrio, hay una apuesta colectiva que ha crecido con los movimientos sociales, comunitarios y populares en Medellín.
Como en todo, hay contrastes y matices, pero fueron las neas las que salieron a resistir a punta de rap, malabares y graffitis después de la Operación Orión de Álvaro Uribe y el copamiento paramilitar de la ciudad, fueron los primeros que se pararon en la raya y no se dejaron.
Además, son los «barrios de las neas», los barrios más empobrecidos de la ciudad en la Zona Norte, donde las apuestas alternativas han tenido más avances, precisamente porque llevan resistiendo toda la vida y están mamados de ser tratados como nada, como peor que nada, como nadie.
Así que si vamos a ganar en Medellín es de la mano de las neas, de las parceras y los parceros, del parche, del borondo, de la esquina, del parque con los niños y las familias los domingos, de la calle cerrada pa jugar un cotejito y de la olla comunitaria.
Abajo Federico
¡VIVAN LAS NEAS!
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