Con el apoyo de Rocío Arango Giraldo, avanzamos en el piloto para diseñar un dispositivo para personas con movilidad reducida
Rocío Arango Giraldo es una mujer que se autodenomina como intraemprendedora social, y ha trabajado por más de 14 años en ciencia tecnología e innovación.
Desde 2016 es maestra de varios programas de maestría y especialización en cursos sobre innovación y emprendimiento social, en diferentes universidades de Colombia, es Fellow de Acumen (uno de los principales fondos de inversión social de impacto a nivel mundial).
En mayo de 2018 fue reconocida por la Revista Dinero como una de las 40 personas que está cambiando el país antes de los 40 años, por ser la mamá de los emprendedores sociales, es Politóloga, con estudios en Gestión Pública y Gerencia Política, Gestión de Redes Institucionales, y MBA con Especialidad en Dirección de Proyectos.
Rocío es una ciudadana comprometida con el cambio social y hoy se vincula con el convenio del Área Metropolitana del Valle de Aburrá y la Corporación Ruta N, que busca aunar esfuerzos para identificar emprendedores que desarrollen dispositivos, y/o soluciones para personas con discapacidad, movilidad reducida o adultos mayores que serán evaluados por un grupo de expertos que identificará características de funcionalidad, ergonomía y adaptabilidad a personas con afectación de movilidad en miembros inferiores y seleccionarán dos soluciones para ponerlas a prueba.
Estos dispositivos harán parte de un piloto y podrían ser vinculados a nuestro sistema de bicicletas públicas, si cumplen con los criterios de uso y adaptabilidad; de esta manera estamos avanzando en la democratización del uso de EnCicla y la inclusión de una población, que tiene que sortear cada día las dificultades que presenta el territorio en temas de movilidad.
Hoy hemos avanzado en iniciativas y soluciones en nuestro Valle de Aburrá que facilitan la libre circulación de las personas con discapacidad y movilidad reducida, un ejemplo es el sistema de transporte masivo el cual cuenta en su totalidad, con acceso para esta población, además, el 45% del trasporte público metropolitano y las rutas integradas cuentan con ascensores para el acceso de los ciudadanos que necesitan movilizarse.
Los senderos de ciclocaminabilidad que hacen parte de las obras metropolitanas, ofrecen alternativas de conexión intermodal que facilitan los desplazamientos por el territorio y fueron diseñados con infraestructuras amigables con las personas que son usuarias de sillas de ruedas, otras ayudas para la movilidad o tienen alguna discapacidad.
De esta manera seguimos avanzando en la inclusión de las personas con discapacidad en los diferentes escenarios y espacios metropolitanos, un territorio que cada día se transforma para ser más equitativo, incluyente y sostenible, el cual se adapta a las particularidades de las personas con discapacidad desde la promoción de procesos de inclusión y enfoque diferencial.
Estas historias revelan las acciones lideradas en la línea de la política nacional de discapacidad e inclusión social, donde su objetivo es asegurar el goce pleno de los derechos y el cumplimiento de los deberes de las personas con discapacidad, sus familias y cuidadores.
Los derechos de las personas con discapacidad deben ser garantizados partiendo de la diversidad del territorio con sus características físicas, económicas culturales y políticas.
Por esta razón se hace necesario desarrollar políticas públicas que se adapten a las particularidades del territorio, con el fin de garantizar que los ciudadanos desde su diversidad, habiten, y transiten por la misma vía para logar la inclusión de las personas con discapacidad.
Rocío se despide de nosotros con una gran sonrisa y con su particular sentido del humor, seguirá apostándole a la equidad, a la diversidad y la inclusión, a la inversión sostenible y la innovación social.
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