De viaje

…a grandes rasgos asistir o no a una capacitación en San Andrés depende de qué tan cerca estés del jefe de turno.

Tal como lo hiciera Duque con el viaje fuera del país de sus escoltas[1] ante su inminente salida de la presidencia, el gobierno local del centro democrático en Bello ha aprovechado su llegada al poder para realizar una serie de visitas a numerosos destinos turísticos bajo explicaciones variopintas.

Entre 2020 y 2022, la administración de Oscar Andrés Pérez aprobó viáticos y tiquetes de avión por un valor de ciento cuarenta y nueve millones de pesos (149.000.000) a favor de altos funcionarios de la administración municipal. Lo que sería una cifra de por sí alta, toma aún más relevancia si se tiene en cuenta que el monto aprobado es un millón de pesos menor a los recursos dispuestos para todxs lxs jóvenes del municipio de Bello en el cuatrienio, mientras uno busca que los funcionarios viajen el otro rubro intenta fortalecer la participación, el uso del tiempo libre mediante la recreación, el deporte y la cultura, así como generar las condiciones sociales para proteger la vida.

Si bien el destino predilecto fue la ciudad capital de Bogotá, resalta que el uso de los recursos pasó por flamantes y “necesarias” capacitaciones en Barranquilla, Armenia y reuniones en Cartagena. En febrero de 2021 cinco altos funcionarios del despacho Uribista (entre ellos Francisco Echeverry, Carlos pinto y Andrea Martínez) dejaron las carteras de Hacienda, Planeación y Cultura para disfrutar un par de días de sol y estudio en la arenosa[2], destino al que ya había ido el alcalde Oscar Andres[3] a una curiosa reunión en temporada alta programada justamente para un 28 de diciembre del año inmediatamente anterior.

Con la misma intención de visitar parajes turísticos en pro de “estudiar” la Secretaría de Hacienda, justamente la encargada de manejar el presupuesto municipal , aprobó a cuatro de sus funcionarios una necesaria capacitación de cuatro días para el buen manejo de los recursos públicos en San Andrés[4], siendo estos dos ejemplos de los múltiples viajes aprobados a altos funcionarios que también incluyen a Cartagena, Armenia y México.

Ante la alta inversión destinada en pro de viajes, se les exigió una respuesta que aclarara la destinación de los recursos, a lo cual la entidad respondió “La administración municipal no cuenta con una política en la cual se tenga un criterio para aprobar o negar permisos de viaje”[i] a grandes rasgos asistir o no a una capacitación en San Andrés depende de qué tan cerca estés del jefe de turno. Al ser cuestionados por las constancias que acrediten que los funcionarios si estaban en los espacios para los que se aprobaron los recursos, la respuesta inicial de la administración fue negar la información argumentando que “la mayoría era privada”[5], manifestando así una paradoja particular, el público paga el viaje, pero la información sobre la misma es privada.

Un último detalle no menor resalta en las constancias de viaje, el Secretario de movilidad Rigoberto Arroyave y su equipo de trabajo fueron invitados a México por una empresa privada[6], con el fin de conocer estrategias para implementar las zonas de estacionamiento regulado (Parquimetros y similares), acompañado de lo paradójico que resulta que el Secretarío esté buscando como cobrar por parquear en calles llenas de huecos como las de Bello, preocupa que la visita se da a un país en el que se viene denunciando que 2 de cada 3 pesos que se cobran por parquímetros se quedan en manos de privados[7], ¿significa esto que Bello está ante una privatización de su espacio público sin precedentes? Y de ser así ¿estaban las grandes empresas privadas de transporte haciendo lobby para manejar el negocio en Bello?

A la pregunta recurrente en las calles del municipio de Bello sobre donde está la alcaldía cuando es momento de resolver los problemas del municipio, sería pertinente responderles que quizás en un viaje de cuenta nuestra.