“50 años usufructuando el espacio público”

Miércoles 13 de mayo: Nos encontramos muy de madrugada para recoger los implementos necesarios. Cuando llegamos a Palacé empezamos a disponer el espacio para nuestra próxima intervención ciudadana: siguiendo la línea de la última acción en el lugar, en la que enterramos la justicia cuando un juez suspendió la construcción de la ciclorruta, esta vez tras los fallos que declararon improcedentes las tutelas de los comerciantes de Palacé, festejaríamos porque “No estaba muerta, estaba de parranda”.

El lugar elegido fue la acera del lado de Hyundai, que descaradamente ha sido marcada con pintura amarilla, con celdas de parqueo donde los clientes y empleados de esta empresa parquean sus motos y carros. Entonces allí aparece el señor Jorge Pérez, uno de los empleados de Hyundai que ofuscado porque estábamos ocupando “sus” parqueaderos empieza a alegar: primero ordenó a algunos trabajadores que parquearan sus motos encima de las instalaciones que nosotros habíamos dispuesto, luego parqueó su nuevo modelo #eonatrapa allí; nos acusó de querer dejar sin trabajo a las más de 3.000 personas que emplean los concesionarios de carros de Palacé; dijo que ellos tenían derecho a parquear sus carros y motos ahí, en la acera, porque pagan impuestos; y el colmo de los colmos fue cuando mencionó que hay empresas que han permanecido por más de 50 años en Palacé, siempre han usado esos sitios como parqueaderos, y por eso tienen derecho a ocuparlos.

Pero la verdad señor Jorge Pérez, es que nosotros no estamos en contra del comercio en Palacé: en ningún momento y bajo ninguna circunstancia nos oponemos a que los concesionarios de carros que existen allí sigan desarrollando su actividad económica; sólo exigimos, con toda la pertinencia del caso, que el espacio público no siga convertido en su parqueadero, queremos que respeten el espacio que es para los peatones y que construyan sus propios parqueaderos; agrego que muchas ciclorrutas construidas en zonas comerciales de varios lugares del mundo, lejos de acabar con el comercio, han contribuido al aumento de las ventas. La verdad es que yo, mi familia, y mis amigos también pagamos impuestos, pero cuando atravesamos Palacé como peatones, tenemos que arriesgar nuestras vidas caminando en la calle porque en la acera no hay espacio para nosotros. Por más de 50 años ustedes se han usufructuado ilegalmente de un espacio que nos pertenece a todos, como si tuvieran derecho a apropiarse de los bienes públicos pasando por encima de lo que es más beneficioso para la mayoría.

La verdad es que nosotros como ciudadanos, tenemos derecho a estar ahí en nuestras aceras bailando, jugando, conversando, disfrutando del espacio que es para la gente, no para los carros, y respetando también el espacio les pertenece a ustedes los comerciantes. Durante muchísimos años hemos permitido que las élites económicas de la ciudad en complicidad con el gobierno local y los medios de comunicación se apropien de los espacios que son de todos; pero definitivamente no estamos dispuestos a que sigan existiendo ciudadanos de primera clase, que tienen todos los espacios de calidad de la ciudad a su disposición, y de segunda clase, que se quedan con los residuos de estos.

La verdad es que queremos un #PalaceParaTodos: para ustedes los comerciantes, para los usuarios del carro particular y el transporte público, pero también para los ciclistas y peatones que durante más de 50 años han transitado este lugar sin la posibilidad de disfrutar de equipamientos de calidad que protejan su vida y su integridad física.

Señor Jorge Pérez, lo invito a que construyamos juntos #PalaceParaTodos.

Aprovecho también para felicitar a los ciudadanos que ganaron la convocatoria ciudadana para intervenir Palacé; pueden conocerlos aquí.