A veces pensar que el planeta tierra pudiese ser mejor sin nosotros en el, es una idea que aunque cruel, real.
Muchos atreves de los años nos preguntamos si el destino es fortuito o si realmente nosotros lo forjamos a nuestra imagen y semejanza. Los humanos tendemos a cuestionar el significar de las cosas, tendemos a buscar culpables por nuestras desgracias y queremos siempre justificar nuestros actos por el miedo a enfrentar la realidad de que somos humanos, de que a veces hacemos mal las cosas y que no somos seres perfectos como muchos tratan de demostrarlo. La naturaleza por el contrario se acepta y desarrolla tal como es, no se contraataca, ni niega que un ser más allá que una célula o un hombre los creo.
La naturaleza es perfecta, hermosa, tiene tanta diversidad pero a la vez tanto en común, que a pesar de ser tan distintos coexisten unos con otros. A veces pensar que el planeta tierra pudiese ser mejor sin nosotros en el, es una idea que aunque cruel, real. A lo largo de la historia la raza humana trata de ser la mejor, de imponerse como dueño y señor de todo sin importar pasar por encima de quien pasemos o si el medio ambiente se deteriora, el hombre quiere siempre tener el control y cuando no lo tiene culpa al destino, la creación, a este mundo, a los demás y a Dios pero nunca a el mismo. Ningún ser humano gira alrededor de sí mismo, las decisiones que cada uno toma son autónomas y cada uno decide bien o mal lo que quiere hacer. La gente no sufre, no muere a espada y muere de hambre porque si, las casualidades nunca han existido y jamás existirán, así como un carpintero moldea sus figuras, los seres humanos decidimos que hacer con nuestra vida, de qué manera moldearla y de qué manera ser.
jamás la suerte o el destino toman decisiones por nosotros. Sin duda alguna los seres humanos decidimos creer en cuanta cosa nos pasa por la cabeza y los ojos pues así estamos controlando la situación, así asemejamos el mundo al antojo de nuestro egoísmo. El miedo a no tener la razón forja ese amarre a tener que usar la violencia como medio de conquista y crear más dioses fuera de nuestro creador para sentirnos augustos
Si bien tenemos consecuencias, estas no subsisten por capricho o suerte, habitan en nosotros por que nosotros con nuestras malas decisiones las provocamos, existen por la toma de malos caminos, caminos que conllevan a hacer las cosas mal, dominar bajo cualquier costo, ya sea matando, robando, o pasando por encima de cualquiera con tal de obtener lo que quiere. El gran problema de la naturaleza humana es que siempre quiere tener la razón y acomodar la verdad a su manera, siempre las diferencias rozan en las personas y es normal que todos seamos diferentes, pues un mundo uniforme no tendría magia, sentido y curiosidad. Las diferencias han existido y existirán por siempre, pero mas allá de lo que nos separa es que también hay cosas que nos unen. El gran problema de control que hay en cada ser humano es que cada uno quiere ser el más poderoso o el más sabio y ante cualquier diferencias recurrimos a la ofensa o como anteriormente hacían a la muerte. Las diferencias nos hacen mejores, nos enseñan a aprender de los demás o enseñarle a los demás, jamás se podrá acabar las diferencias ni con armas o palabras, siempre existirán. La decisión que optan los grandes gobiernos ante una amenaza opositora es arrasarla, ¿Por qué? ¿Porque somos tan estúpidos de creer que si alguien es diferente a mi es porque es peor que yo? Acaso no todos somos iguales y valemos lo mismo, las diferencias simplemente nos hacen más originales, pero como todo defecto existe lo importante que son las cosas buenas las que nos hace valiosos, si nadie fallara, el mundo fuese perfecto pero desafortunadamente no lo es.
Hay cosas más buenas que malas y hay más cosas que nos unen que la que nos separa, porque siempre nuestras decisiones nos llevan a tomar las peores decisiones y a renegar de las consecuencias y que estas las justifiquemos como errores de otros o castigó divino por capricho de Dios. Las decisiones deben tener algo primordial y es que deben ser analizadas y meditadas, las decisiones apresuradas y con impulso son las que nos hacen cometer las peores embarradas, como por hay dicen es mejor pensar antes de actuar.
Otros por su parte actúan disque por un ´´llamado de Dios´´ cuando no es así, pues ponen su fe y su inteligencia es a favor de sus conveniencias. Las decisiones desde los inicios de la raza humana se han tomado, por ambición, venganza, traición pero muy pocas con amor, pasión y humildad. Lo más triste de todo es que a veces las decisiones que tomamos no son autónomas si no que son influenciadas por otros, porque no somos capaces de pensar, actuar y hacer las cosas nosotros.
Ponemos diariamente tantos peros, tantas murallas y obstáculos. Dimensionamos las diferencias y defectos de una manera gigantesca, cuando realmente no es así. Creo firmemente que la ciencia y Dios van muy de la mano, Dios creó la ciencia, la ciencia es de Dios pero la ciencia ataca a Dios y la religión a la ciencia, creando una barrera inmensa que desde la antigüedad a dejado tantos muertos y pérdidas inimaginables. Porque no somos capaces de dejar nuestras diferencias a un lado y buscar lo que nos comunica y luchar por lo que nos interesa, por progresar juntos.
El ámbito de la crítica es una acción necesaria para generar cambios y progresar, esta es una buena forma de solucionar las desigualdades, por ahí dicen que quienes arreglan sus diferencias a golpes son unos cobardes pues no son capaces de soportar el sacrificio de esperar a resolver sus conflictos. Seguiremos creyendo realmente que somos víctimas de un plan malévolo en nuestra contra. Tenemos que empezar a pensar que en esta vida estamos y aquí decidimos como estamos y como queremos estar. Debemos reflexionar sin duda como podemos mejorar, pues si seguimos así las consecuencias se seguirán acrecentando cada vez más, el destino no juega a la ruleta con nosotros, nosotros jugamos a la ruleta con el destino que es muy diferente. Debemos cambiar, debemos mejorar, debemos entender de una vez por todas que todos somos distintos, que tenemos diferencias que no somos iguales pero que todos por igual valemos.
Debemos entender de una vez que un corazón limpio, sumiso, humillado, y entregado a Dios es propenso a tomar buenas decisiones, que la educación es vital para el desarrollo de la conciencia y que el perdón y el olvido se vuelve ficha clave en el desarrollo de una sociedad.
Las diferencias se arreglan en el dialogo no en la guerra, la guerra solo trae más guerra, odio y muchos sentimientos negativos. Esta vida es muy bella y hermosa para desgastarla en momentos negativos.
Vivir la vida se vuelve cada vez más difícil, todo lo complicamos y nos volvemos tan exigentes que si no tenemos ciertas cosas no somos realmente felices, hay que aprender a aceptar que no todo es perfecto y que la vida simple es hermosa, que no se necesitan de lujos para tener felicidad, que se necesita obligatoriamente la toma de buenas decisiones.
Este mundo necesita personas maduras que entiendan lo importante que es la toma de decisiones, que entiendan que todas ellas traen innumerables consecuencias ya sean positivas o negativas, que todas ellas repercuten en nuestro presente y futuro y que cada uno se puede evitar si somos inteligentes, con conciencia, moral y que tiene a un Dios en el corazón. Démonos cuenta que poco a poco uno puede ir mejorando, que siempre tengamos en cuenta que Dios siempre esta hay y que él es más importante, el que nos dio la vida y la existencia y el que nos permite subsistir en este cosmos hermoso, el siempre nos escucha y siempre está atento a nuestro llamado, con él a nuestro lado las decisiones serán tomadas de la mejor manera.
Aunque somos el efecto de las consecuencias y todas situaciones, podemos hacer cambiar las consecuencias hasta el sol de hoy que nos han dejado huellas imborrables, pero que de ellas debemos aprender para causar un nuevo efecto positivo en la sociedad y así obtener una consecuencia positiva para nosotros y nuestros hijos. Desde la antigüedad no progresamos porque siempre tomamos las decisiones a nuestra imagen y semejanza y no a la solidaridad y mejoramiento para todos, si todos cambiamos nuestras perspectivas y empezamos a tomar mejores decisiones tendremos un mundo más libre y lleno de vida, un mundo en donde opinar no sea solo una opción si no un deber de todos, para que todos pongamos un granito de arena a este mundo que tanto lo necesita.
! Si algún día nos damos cuenta de esta realidad, ese día podremos no solo darnos calidad de vida a nosotros si no también a nuestros hijos a todo un país y al mundo entero!
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