Sobre EPM

Para nadie es un secreto que EPM es una de las empresas más amadas por los colombianos, todos hemos sido participe de su desarrollo en cualquier modo ya sea como usuarios, empleados o accionistas, claramente es una empresa que nos duele a todos.

Es muy lamentable ver la crisis en la que se encuentra y más lamentable ser apenas un observador de la ineficiencia con la que actúan el mandatario Daniel Quintero, soy un eterno convencido que los políticos deben estar lo más distante posible de las empresas y es que la organización corporativa es la única que tiene la respuesta a sus propias necesidades no los conflictos políticos, el problema de EPM no es un problema de derecha, ni de izquierda ni de Quintero ni del GEA como él mismo lo afirma.

El problema de EPM es que no tiene un líder como tampoco lo tiene Medellín, ninguna organización sobrevive sin un líder por muy grande que sea, fallas como los sobrecostos de hidroituango de 4.8 billones, los atrasos y el lucro cesante de 5.4 billones y todas las noticias diarias negativas de la organización como tener varios gerentes en un año son el resultado de esa falta liderazgo.

Algunos estudiosos del tema recomiendan convertir a EPM de una empresa industrial y comercial del estado a una sociedad de acciones y esto para mí y desde mi postura como administrador es lo correcto, este es el camino más viable y más eficiente por que le permitiría a la empresa:

– Tener autonomía organizacional y no depender su liderazgo del alcalde de turno

– Despolitizarla

– Nombrar a los gerentes la junta

– Nombrar a la junta los socios

– Desarrollar normas para la protección de accionistas minoritarios

– Mayor estabilidad en los cargos y no tener constante rotación de personal con cada nuevo alcalde

– Recuperar la acreditación perdida ante las centrales de riesgo y la credibilidad de los usuarios.

Invito a Quintero a que deje su orgullo a un lado, a que tenga una visión más de estrategia administrativa y si poco entiende sobre ello a que busque asesoría en la gran cantidad de profesionales y administradores experimentados con los que cuenta la ciudad.

Medellín si nos pertenece, nos pertenece a todos los que la amamos.