En una entrevista rendida a BBC Mundo, el comandante de las FARC, Iván Márquez, habló sobre la crisis del proceso de paz, el futuro de la organización y si él estaría dispuesto a ir a la cárcel.
Para Márquez fue sorpresivo el triunfo del NO en el plebiscito que buscaba dar legitimidad a los acuerdos entre el Gobierno y las FARC. Sin embargo, destaca que en una semana pasaron cosas extraordinarias puesto que, al rechazo por parte de los colombianos del proceso, se le sumó el recibimiento por parte del presidente Juan Manuel Santos del Nobel de la Paz, el Senador Álvaro Uribe entró a hacer parte de las conversaciones; y las marchas y manifestaciones a favor del proceso empezaron a pulular por todo el país.
Asimismo, destacó la posición del grupo guerrillero y en especial de su máximo jefe, Rodrigo Londoño, luego de conocerse los resultados del plebiscito; ya que, cabe recordar, anunció que la búsqueda de la paz continuaba. Desde ese momento, resalta, han estado en contacto con los negociadores y esperan desde La Habana las propuestas que les deben pasar as tres mesas en las que los delegados del No trabajan junto con representantes del Gobierno Santos.
Según Márquez, desde la organización se ha trabajado de manera distendida y sin problemas se ha entendido la situación presentada; para él ha habido un empate técnico entre el Si y el No en el plebiscito, y aunque el No no tiene una mayoría absoluta, el talón de Aquiles de este es haberse construido sobre la base de mentira; lo que deja en una posición muy débil a uno de los sectores del No, en especial, el del Senador Uribe. Para éste, el No es muy variado puesto que destaca que no todos los seis millones del No son del sector de Uribe.
Respecto a los puntos del acuerdo que Márquez considera no negociables es abierto y señala que aunque para la organización no existen puntos no negociables, cuentan con la satisfacción de un acuerdo qu contiene elementos suficientes para dar inicio a una construcción de paz estable y duradera en Colombia. Finalmente, destaca en este punto que el logro de la paz y de la reconciliación es lo que más les interesa.
Adicionalmente, Márquez señala que no cabe la pregunta de estar o no dispuesto a ir a la cárcel ¡, ya que, existe un compromiso de aportar verdad y la cárcel hasta el momento se contempla para aquellos que no aporte dicho compromiso de verdad. Así, quienes se nieguen a ir a los tribunales de paz, tendrán que pagar una sanción punitiva y deberán ir a la cárcel. Las novedades de la jurisdicción especial para la paz, desde su punto de vista, son que se va a aportar verdad para sanar las heridas, se asumirán responsabilidad y; en caso de que la actuación este enarcada dentro de las no indultables, no habrá impunidad sino que se dará un tratamiento acorde con la justicia restaurativa.
