“Las prioridades del PGN radicado, están ajustadas a mantener una responsabilidad fiscal frente a las metas de déficit y deuda pública, seguir con la senda de crecimiento económico con equidad cerrando brechas de desigualdad”
EL PGN 2023 se ha radicado en el Congreso de la República conforme lo establece la ley orgánica en las fechas establecidas por el anterior gobierno el 29 de Julio del presente año. Se espera que el nuevo gobierno, realice una redistribución sectorial según las prioridades de gasto, conforme a las políticas y programas que quiera desarrollar para el próximo año.
La primera discusión que se tiene que realizar es sobre el monto, y en la primera sesión de las comisiones conjuntas económicas el gobierno ha manifestado que tiene pensado subirlo a un máximo de 14 billones de pesos adicionales, gracias al mayor recaudo tributario en lo corrido del año y a la buena reactivación económica del país en palabras del ministro de Hacienda y a las necesidades de una política social más expansiva. Este monto debe ser aprobado antes del 15 de septiembre y pasar a la discusión de la distribución por sectores que se presente por parte del Ministerio de Hacienda y Crédito Público. Este monto fue aprobado por el congreso el pasado martes por un total de 405.629 billones de pesos.
Las prioridades del PGN radicado, están ajustadas a mantener una responsabilidad fiscal frente a las metas de déficit y deuda pública, seguir con la senda de crecimiento económico con equidad (cerrando brechas de desigualdad y reducir indicadores de pobreza). Esperaremos que se mantengan en la distribución sectorial que presentarán en las próximas semanas. El plazo para su aprobación en primer debate es hasta el 25 de septiembre y en las plenarias será hasta el 20 de octubre.
Sobre esto dejaremos la primera reflexión: alternamente se está discutiendo una reforma tributaria en las comisiones terceras, y un aspecto importante para analizar es que el nuevo gobierno no tiene claro en que va a gastar los recursos del PGN 2023, ni cómo los va a gastar; para mayor transparencia de esta discusión esto debe ser primero, para después preguntarle a los colombianos para que necesita los 25 billones de pesos que le está pidiendo con una reforma tributaria, cuanto de esto irá para gasto público y cuanto para el ajuste fiscal. Cabe hacer la siguiente pregunta si este presupuesto se encontrara desfinanciado ¿La reforma tributaria no tendría que hacerse a través de una ley de financiamiento?
Segunda reflexión: según las prioridades de gasto que tenga el nuevo gobierno y estas se vean reflejadas en lo sectorial, podremos saber cuánto se requiere recaudar en una nueva reforma tributaria para la destinación que así lo requiera el nuevo gobierno y pueda ir articulada con la formulación del PGN 2023.
Ante el debate que ha suscitado los recursos de ingreso solidario, estos se encuentran en el Ministerio de Hacienda; a falta del respaldo legal, por cuanto por disposición normativa están hasta diciembre del 2022 y se requiere darle su continuación a través de la ley del presupuesto o de una nueva ley para poder ejecutarlos para el próximo año diferente a los demás programas sociales que tienen asegurada su financiación.
Y por último, seguiremos hablando en estas discusiones sobre la eficiencia presupuestal, las inflexibilidades del presupuesto y la necesidad de la oficina asesora para el presupuesto que estamos en mora de implementarla. Esperamos que en las próximas semanas el Gobierno Nacional nos pueda dar más luces sobre la destinación de los recursos y la articulación con la reforma tributaria según las prioridades de gasto.
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