No miremos más hacia arriba con el dedo tembloroso. Miremos hacia adentro. Porque el corrupto ya no es solo el político, ni el contratista, ni el que firma decretos en...
No miremos más hacia arriba con el dedo tembloroso. Miremos hacia adentro. Porque el corrupto ya no es solo el político, ni el contratista, ni el que firma decretos en...