Medellín es una ciudad que ha votado libre en los últimos 20 años porque en nuestra sociedad existen muchos grupos sociales críticos, jóvenes activos en política y una clase media educada que no se deja influenciar por encuestas, si no que vota a voluntad y con libertad.
En esta campaña de 2023 a la alcaldía de Medellín sólo hemos visto candidatos impuestos a la fuerza por los grupos poderosos económicos o por medios de comunicación o peor aún por la misma alcaldía. Estos grupos de poder han hecho todo lo posible por invisibilizar a los demás candidatos con el fin de retomar de nuevo el poder (FICO) o de continuar con él (QUINTERO).
Sin embargo, debo recordarles que Medellín es plural, democrática, con gran sentido de su propia opinión y que no todo el mundo está filado en una polarización que diciéndolo sinceramente ha sido creada por los medios de comunicación de Fico y los medios de comunicación de Quintero.
No es cierto que Medellín está al borde del abismo. Ni que antes en la alcaldía de Fico Medellín estuviera mejor. Los grandes problemas de Medellín están ahí latiéndonos por todo lado, pero, estos grupos polarizantes quieren simplificar la complejidad de nuestra ciudad echándose la culpa uno al otro.
Este próximo domingo los ciudadanos y ciudadanas de Medellín podemos votar libremente por el candidato o candidata que más nos guste porque el voto es como el amor uno se queda con lo que más se parezca y compagine y no con quien le imponen o señalan otros.
La ridícula estrategia de antipetrismo y antiuribismo nos hace pequeños como sociedad y simples como ciudadanos. No nos dejemos meter en ese reduccionismo de la política, que para decirlo sinceramente sólo les conviene a ellos. Existen candidatos competentes que quieren trabajar por la ciudad sin esas pretensiones nacionales de convertirse en salvadores. El médico Luis Bernardo Vélez del movimiento Cuidemos Medellín es una excelente opción en la baraja de candidatos. Yo personalmente voy a votar por él por su liderazgo, transparencia y experiencia en lo público.
Yo los invito y las invito para que este domingo 29 de octubre demos un golpe de opinión a Fico y a Quintero votando por un alcalde que no represente esa polaridad y violencia simbólica que nos quieren obligar a vivir de nuevo cuatro años más.
En las urnas no hay encuestas y chats ni propaganda que nos diga por quién votar. Votar es un acto individual, autónomo y libre. Ejerzamos nuestra responsabilidad de votar según nuestro deseo personal y hagámoslo valer.
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