¿Medellín sin Futuro?

Carlos andres Ríos Puerta

Decepcionante es poco para calificar la gestión con respecto a la primera infancia y niñez en Medellín, ya que, a pocos meses del fin de este gobierno, hay indicadores que escasamente llegan a un 50% de la meta planteada para los 4 años, e incluso, varias metas en 0%.

Por ejemplo, frente a la gestión realizada de niños de 0 a 5 años que han superado condiciones de malnutrición por déficit gracias a la atención de Buen Comienzo, hay un avance de apenas el 20,8%. Es decir que en nuestra ciudad hay una inmensa cantidad de niños que, en su etapa de aprendizaje más vital, se están acostando con hambre, lo que eventualmente tendrá unas consecuencias muy negativas en los niveles educativos y para el resto de su vida académica.

Al respecto hay que decir que, bajo la actual administración, en Medellín se asignaron más recursos para Buen Comienzo, pero inexplicablemente la cobertura ha sido de casi 74 mil menores, cuando en la alcaldía se había fijado una meta de 95 mil niños. Vale anotar que tan solo en los estratos 1, 2 y 3, hay más de 200 mil niños censados en la ciudad ¿Por qué si hay 80 mil millones de pesos más para el programa, no se logró la cobertura esperada del programa?

Tan solo basta mirar el índice global de desnutrición (peso bajo y muy bajo para la edad) en menores de 5 años que asisten al programa de crecimiento de desarrollo con una ejecución cumulada en el cuatrienio del 0% para encender alarmas. De hecho se presenta un retroceso.

Si miramos la meta de mortalidad infantil (menores de 1 año) que se mide en una tasa por 1.000 nacidos vivos; empezamos este cuatrienio con una tasa de 7,1 como línea base y cerramos a junio de 2023 con una tasa de 7,3. Esto es un grave retroceso para nuestra sociedad que se mide literalmente en vidas.

Respecto a la tasa de deserción escolar del sector oficial, básica secundaria y media, la Alcaldía de Medellín presenta un porcentaje de avance del 0% a julio de 2023. Si no avanzamos en metas como que los niños permanezcan escolarizados, es muy probable que esos menores el día de mañana estén haciendo parte de las bandas criminales de la ciudad o que pasen a tener una calidad de vida indigna en la adolescencia y en su vida adulta.

Recordemos que el año pasado, según Medellín Cómo Vamos, nuestra ciudad presentó los niveles de deserción escolar más altos en los últimos 11 años… y cómo vamos, estamos cerca de romper este ignominioso récord una vez más este año. Adicionalmente, este informe también indicó que Medellín es la ciudad principal de Colombia con mayor nivel de estudiantes que pierden el año en todos los niveles.

Por donde se mire, las cifras son escandalosas, como el avance de la ciudadela educativa norte que está en 0%, o los elevados índices de malnutrición infantil, o que el 95% de colegios presenten fallas en su infraestructura. Lo más indignante, es que hayan utilizado las Secretarías como fortines para el enriquecimiento personal. En el cuatrienio que más dinero se ha asignado; la ciudadanía es la gran damnificada y los únicos beneficiados parecieran ser personas cercanas al actual Alcalde, varios de ellos, aspirantes a cargos de elección popular.

Debemos recuperar ya la niñez y sus oportunidades de educación puesto que esta administración no tuvo reparos morales para poner en riesgo la vida, la salud y el porvenir de miles y miles de niños que hoy por hoy no tienen seguridad alimentaria, cobertura institucional, calidad en la educación ni infraestructura escolar. La alcaldía de Daniel Quintero dejó a Medellín sin futuro.


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Carlos Ríos Puerta

Abogado, Magister en Estudios Políticos y candidato a Magister en Seguridad y Defensa Nacional. Empresario, Docente, ex Viceministro de Defensa y Concejal de Medellín.

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