Esta semana se conocieron los índices de paz y terrorismo en el mundo; el estudio fue publicado por una organización de investigación independiente que analizó los avances y retrocesos mundiales para el bienestar y el progreso de la humanidad, el resultado muestra que en Colombia la situación de paz es crítica y el terrorismo persiste. El Instituto para la Economía y la Paz (IEP) examinó 162 países y cómo estos se ven afectados en los ámbitos sociales y económicos por las actividades terroristas, teniendo como base de estudio las tendencias del 2000 al 2013.
El informe presenta el Índice de Paz Global (donde el puesto No. 1 corresponde al país más pacífico) y muestra que en esta clasificación Colombia se ubicó en el vergonzoso puesto 150. Con lo anterior, nuestro país fue señalado de ser más violento que países como Malí (No. 135), Myanmar (No. 136) y Chad (No. 142); sumado a lo anterior, nos rajamos en la mayoría de indicadores estudiados: homicidio doloso 5/5, criminalidad percibida en la sociedad es 4/5, personas desplazadas 4.5/5, terror político 3.5/5, actividad terrorista 3.5/5, corrupción 3.4/5, y manifestaciones violentas 3/5.
Según el Índice de Terrorismo, también somos la dieciseisava nación con más alto impacto de terrorismo debido a: ataques terroristas realizados en los últimos años, las víctimas mortales causas por los mismos, los lesionados debido a esos ataques y los daños a la propiedad debido a los mismos. Con esto, también Colombia es ubicada a la par con naciones como Bangladesh, Nepal y Rusia. Nuestro país es la cuarta nación con la peor calificación.
La investigación del Centro de Pensamiento señala que iniciados los diálogos con el grupo guerrillero FARC (en Cuba), los actos terroristas han aumentado. El informe demuestra que el número de personas desplazadas que tiene Colombia es una cifra parecida con la que se reconocen a los Estados fallidos en África. De igual manera, de los 11 países suramericanos, Colombia se ubica en la última posición en cuanto a un estado de paz.
Para añadir a todo lo anterior, las FARC secuestraron a 20 personas en el 2012 (según País Libre), y a 18 ciudadanos entre 2013 y 2014 (según cifras del Ministerio de la Defensa). A hoy, 38 colombianos permanecen secuestrados por el grupo terrorista, aun cuando el 26 febrero del 2012 el narco-secretariado anunció que abandonaría esta práctica. Van 828 días en los ciclos de negociaciones y las FARC continúan violando los Derechos Humanos.
Cifras oficiales del Ministerio de Defensa Nacional colombiano registran que entre octubre del 2012 y octubre del 2014 las FARC han cometido 860 actos terroristas (sí, en pleno proceso de ‘paz’); pero en nuestros medios de comunicación reina un acomodado silencio para no mencionar, difundir o denunciar estos crímenes de lesa humanidad.
La anterior es la triste realidad que vive el país. Así al Gobierno le duela que lo digamos: Colombia no va camino a la paz, cada día se aleja debido a la permisividad y al camino de impunidad que buscan otorgarles a los guerrilleros (quienes entre otras, aún no han confesado dónde están los cientos de secuestrados desaparecidos). Los diálogos en Cuba no generan credibilidad y en cambio nos llevan a un limbo donde el mal triunfará sobre el bien.
@CamiloMartinezN
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