¡Lo admito! Fui de los muchos que se interesaron en asistir a la instauración del nuevo partido LAIN, en razón de vislumbrar en él una nueva alternativa con la que en un futuro escenario, aproximarme a la política local. Sin embargo conforme avanzaban los días me fui percatando de su verdadera naturaleza y no puedo negarlo, me molesté mucho al llegar el día del evento y decidirme no ir por sentirme algo engañado. “Oh grave error” me dije a mi mismo cuando a eso de las 7:30 pm, me fue picando la curiosidad de ver realmente que se tenía preparado para esa calurosa noche del lunes 16. Quedé completamente enganchado cuando uno a uno se leían los escritos de los candidatos del partido Epifanio Mejía, Tomas Carrasquilla, Gabriel García Márquez y el anfitrión Fernando González, para luego revelarse el rostro de un nuevo aspirante con la misma altura y elegancia que el anterior. No he sido fanático de la poesía, sin embargo la potencia del mensaje dado por cada uno de los candidatos, sin esforzarme lo entendí y lo comprendí.
El partido LAIN nos recordó en unos sesenta minutos, el castigo que recibe quien tolera los actos del déspota, ahora convertidos en decretos y como nuestra casa colombiana se cae a pedazos. Este movimiento el cual desde el principio buscaba reunir a las nuevas juventudes políticas para trasmitirles el mensaje crítico de sus predecesores “viviendo a la enemiga” , aunque no significó la materialización de un sueño político para muchos, si supuso un enriquecimiento incuantificable en cuanto a los interrogantes incontestables con los que todo ser humano y su inherencia política deben andar, con miras a evitar el avenimiento de dogmas, conformismos, prisión que como dijo el candidato Efe Gómez nos merece vivir encadenados y sin honra.
Para terminar no quiero tirar por la borda mi interpretación de lo que se dijo como cierre del evento, “quien vino aquí con intenciones políticas, adelante, el partido queda en sus manos” . LAIN no existe, pero si existe su semilla que fue plantada por los versos de los aspirantes a alcaldía y gobernación, las nuevas juventudes políticas tienen entonces la tarea de no esperar a un aventurado y poco a poco unírsele a su lucha, sino que toda ella en su conjunto, retomando las visiones de lo que ese lunes se dijo, han de abonar la semilla y hacer germinar el “Fernandito”, quien supondrá el surgir de la verdadera alternativa política en nuestro país.
[author] [author_image timthumb=’on’]https://alponiente.com/wp-content/uploads/2014/12/alejandro.jpg[/author_image] [author_info]Alejandro Rodríguez Gonzalez Estudiante de Derecho y miembro del semillero sobre Derecho Internacional público en la Universidad Eafit. Interesado en temas internacionales y estudio de conflictos. Lector apasionado de la historia mundial y nacional. [/author_info] [/author]
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