Muchas personas, me preguntan con curiosidad ¿Qué va a pasar con el dólar?, otras con preocupación me manifiestan, Damián ¿volverá a bajar el dólar?, otros aún incrédulos y sin muchos argumentos activan la cámara trasera para encontrar culpables diferentes al gobierno que tenemos en frente.
El viernes, antes de cerrar el mercado, el dólar se cotizó a su máximo histórico 4.707 pesos, una fuerte barrera psicológica la cual esperaban los especuladores se rompiera esta semana. Pero ¿por qué se dio esto? ¿Serán ciertas las afirmaciones del presidente Gustavo Petro acerca de que el dólar bajará de nuevo? O ¿hasta dónde llegará la devaluación de la divisa?
A la hora de llevar esta cifra al tablero, no solo debemos considerar los factores internos, situaciones externas como el costo de vida en Estados Unidos, la probabilidad de una nueva subida de tasas de referencia en Estados Unidos y la caída en los precios del petróleo hacen que se den estas alzas en el par de divisas.
Sin embargo, el peso Colombiano desde la elección de Gustavo Petro, es la divisa más devaluada del mundo, con una pérdida de más del 20% de su valor, lo que definitivamente hace que estemos hoy más pobres que antes de la elección del actual presidente, los mismos pesos que perdió la divisa en los 4 años de presidente Iván Duque los pierde ya la divisa con dos meses de gobierno de Gustavo Petro, lo que ha llevado a muchos a decir que es peor la presidencia de Gustavo Petro para la economía que una pandemia global.
Pero, ¿tiene en verdad que ver en algo Gustavo Petro con la actual situación del peso colombiano?, claro que sí, los anuncios de recesión por parte del presidente, el ataque al sector minero energético en reformas y declaraciones, los cuestionamientos a las políticas de tasas de interés del banco de la república, los mensajes mal enviados acerca del crecimiento económico esperado y el temor frente a un salario mínimo por fuera de proporciones con una alta inflación, hacen que el riesgo país de Colombia aumente para los inversionistas que ya no quieren traer sus recursos a Colombia, por el contrario quieren llevarlos a Estados Unidos un país que de acuerdo a las situaciones económicas actuales permite unas muy buenas tasas de retorno a la inversión con un bajo riesgo.
Dolarizar no es una alternativa puesto que se pierde la independencia económica, reemplazar la actividad legal (explotación petrolera) por una ilegal (cultivo y procesamiento de marihuana y cocaína) no es una alternativa puesto que vendrán bloqueos económicos al país, lo mejor para lograr que verdaderamente el par de divisas vuelva a caer es que el presidente reaccione y mande mensajes de calma al mercado, reactive la intención de explotación petrolera, respete la independencia del banco de la república y atraiga el capital extranjero, depender solo de las divisas que envíen nuestros migrantes ocasionará simplemente en el corto tiempo un dólar en 5.000 pesos.
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