Depresión y enfermedad cardíaca: ¿cómo se relacionan?

Autor: Lic. Lizzie Mungarro Maldonado 

Las personas con enfermedades cardíacas tienen más probabilidad de sufrir depresión que las personas sanas. La angina de pecho y los infartos están estrechamente relacionados con la depresión. Los científicos no saben exactamente por qué ocurre esto, pero sí saben que ciertos síntomas de la depresión pueden reducir la salud física y aumentar el riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca o empeorarla. Además, si alguien está deprimido, también tiene un mayor riesgo de morir de un ataque al corazón.

Debido a esto, siempre se recomienda consultar a un médico especialista para llevar un tratamiento que ayude a la persona con depresión y así evitar complicaciones más graves.

¿Cómo tratar la depresión en personas con enfermedades cardíacas?

 El tratamiento de la depresión endógena puede ayudar a controlar la enfermedad cardíaca y a mejorar la salud en general. En la actualidad, existen diferentes tipos de tratamientos farmacológicos que pueden ayudar con la depresión, los antidepresivos.

¡Ojo! No todos los pacientes responden a estos tratamientos de la misma manera. Los medicamentos pueden tardar varias semanas en hacer efecto y puede ser necesario combinarlos con sesiones de psicoterapia. Los especialistas en el tema deben evaluar cuál es la mejor opción de tratamiento.

Ahora bien, tratar la depresión puede facilitar a que el paciente siga un programa médico para mitigar la enfermedad cardíaca y realice los cambios necesarios en su estilo de vida para controlarla. Algunas de las recomendaciones más comunes son:

  • Comer alimentos más saludables
  • Hacer ejercicio con regularidad
  • Beber menos (o nada) de alcohol
  • Dejar de fumar.

El ejercicio regular no sólo protege contra las enfermedades del corazón, sino que también puede ayudar a reducir la depresión.

¿Qué se debe tomar en cuenta?

Además de la intervención médica y los cambios en los hábitos de la persona, ha sido comprobado que un tratamiento psicológico suman en la recuperación del estado físico de la persona. Para poder ayudar al paciente a obtener un bienestar y mejorar su calidad de vida es imprescindible evaluar su personalidad, sus experiencias de vida e identificar en su entorno los problemas que contribuyen a su depresión.

La psicoterapia debe estar enfocada en:

  • Cambiar tus ideas, creencias, comportamientos y actitudes negativas
  • Restaurar tu autoestima
  • Mejorar tu comunicación interpersonal
  • Incrementar tus intereses sociales
  • Sumar experiencias gratificantes
  • Fortalecer tu capacidad para afrontar los problemas.

No debemos olvidar que es fundamental para los pacientes contar con el apoyo y comprensión de sus seres queridos en esta enfermedad o cualquiera que se llegue a presentar. Para que un tratamiento para la depresión funcione de mejor forma, es necesario sentirse apoyado y acompañado.

Agradecemos la colaboración de la Mtra. Lizzie Mungarro Maldonado, especialista en psicología, quien compartió y verificó la información para el desarrollo de este contenido. Concluyó con éxito su Maestría en Psicoterapia en el Centro Universitario Emmanuel Kant, además obtuvo un título como Licenciada en Psicología otorgado por la Universidad del Valle de México. Cuenta con más de 15 años de experiencia como psicoterapeuta y es experta en temas de psicopedagogía, evaluaciones psicológicas y orientación vocacional.


Referencias:

  1. http://www.nimh.nih.gov
  2. Pérez Esparza, Rodrigo. (2017). Tratamiento farmacológico de la depresión: actualidades y futuras direcciones. Revista de la Facultad de Medicina (México), 60(5), 7-16. Recuperado en 19 de julio de 2021, de http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0026-17422017000500007&lng=es&tlng=es.