¿Y la clase media?

Celebro y de qué manera la respuesta de la comunidad en general y de las empresas al llamado del alcalde Daniel Quintero a su “Donatón por Medellín” cuya meta inicial era reunir 100 mil mercados y 10 mil millones de pesos a raíz de la situación generada por la pandemia del COVID-19.

La característica del paisa de manera especial el que habita en Medellín,  es su solidaridad  y respuesta a los llamados de ayuda al prójimo cuando así lo han requerido y quizás lo mismo sea un ejemplo  nacional.

La evidencia más clara de ese gen que lleva el paisa en pensar siempre en los demás lo puede constatar fácilmente la Corporación Antioquia Presente, Organización No Gubernamental especializada en gerencia integral de programas para el restablecimiento de las condiciones de vida de comunidades impactadas por desastres, cambio climático y obras de desarrollo como se puede constatar en su página web.

Antioquia Presente es ejemplo nacional en su misión y objetivo. Lo mismo lo cumple precisamente por la ayuda que recibe de manera especial por la solidaridad de muchas personas, empresas  u organizaciones de nuestra región.

En momentos de la crisis generada por la pandemia mundial,  los ojos  de solidaridad se han volcado a los estratos 1 y 2 y eso está bien y es innegable. El asunto es que existe una clase que como la media,  viene sintiendo y de qué manera la difícil situación por la que estamos atravesando.

Más cuando el Presidente de la República en una clara alocución y partiendo de la  obviedad,  ha manifestado que después del cumplimiento de la cuarentena en nuestro país se deben  tomar las medidas necesarias para evitar el contagio a lo que  ha llamado ‘aislamiento inteligente’.

Esta recomendación no es otra que el de evitar entre otras medidas, asistir a sitios donde concurran un gran número de individuos  a un mismo lugar. Esto nos indica que muchas empresas y personas que basan su sustento de lo masivo,  están pasando o tendrán situaciones críticas para obtener sus ingresos y por lo tal se verán perjudicados quizás de igual manera  a lo que presentan en estos momentos los que se encuentran en estratos 1 y 2 que son los que están recibiendo en este caso  las ayudas por parte de la administración municipal.

¿Y la clase media? ¿Aquellos que por su misma situación y por lo acá planteado se han quedado sin trabajo o sin poder ejercerlo?  Quizás algunos dirán que las entidades financieras, los prestadores de servicios públicos entre otros pocos se han sumado a la causa,   pero de igual manera se debe tener presente que todos nos tenemos que alimentar y las ayudas se están focalizando a un grupo de población  que si bien lo necesitan,  es claro   que personas que no necesariamente pertenecen al estrato donde están llegando las ayudas también  requieren  de este tipo de auxilio.

Bienvenida la solidaridad y que la misma no solo se focalice a  los estratos uno y  dos sino a todo aquel que lo necesite sin importar si es de la clase media.

Mauricio Correa Taborda

Trabajador Social, Comunicador Social Periodista. Especialista en Estudios Políticos. Magíster en Gobierno. Candidato a doctor en Estudios Políticos