Todas las veces que sea necesario hay que volver a destacar que la vida digna y libre de violencias es una premisa fundamental para que las juventudes puedan construir un plan de vida autónomo y emancipado.
En esta Alcaldía, por medio del equipo de la Secretaría de la Juventud, hemos tomado esta premisa como un acuerdo ético para la gestión pública y lo hemos recibido con alegría: queremos ser parte de las causalidades posibles que construyen un tejido diverso para la vida digna.
Por ello, desde el inicio retomamos un llamado expreso del programa de gobierno, hoy Plan de Desarrollo, “Medellín Futuro”: construir un sistema de protección para las juventudes de la ciudad. Son muchas las acciones individuales que se han realizado, pero el día de hoy quisiera destacar tres aspectos fundamentales.
En primer lugar, construimos un Plan de Desarrollo para las juventudes concebido como un sistema de protección para garantizar el ejercicio de las libertades frente a las múltiples vulnerabilidades[1] que pueden afectar la emancipación juvenil y frente a las distintas violencias físicas, discursivas, económicas, ambientales, entre otras. La tradición de salud pública y derechos humanos[2] ha sido nuestro marco hermenéutico.
No es el momento de hablar de forma extensa sobre la importancia de contar con un Plan de Desarrollo que esté expresado a nivel de programas y como sistema. La discusión que suscitó tal situación podría haberse resuelto con la verificación de la literatura académica sobre planeación estratégica y quizá un poco más de asertividad por parte de algunos críticos. La ductilidad en la formulación de proyectos es de gran importancia para la gestión por objetivos, pero, y más importante aún, lo es también para abrir el espacio a los diálogos ciudadanos.
Lo precedente es vital y me permite continuar con el acento en los proyectos relativos a la prevención temprana y urgente y a los mecanismos de protección que provean herramientas para que las juventudes construyan su plan de vida de forma digna y emancipada.
Dentro los proyectos relativos a la prevención y protección quiero destacar tres: (i) SATMED, (ii) Juventudes Tejedoras y la (iii) estrategia de formación de Cultura del Fútbol. Además del aumento presupuestal, sobre el cual me referiré más adelante, quiero destacar, con el fin de propiciar la reflexión y el diálogo, el acento que le hemos dado a cada uno de estos proyectos.
- SATMED: el año anterior se expidió el acuerdo municipal núm. 114 de 2019 mediante el cual se creó el Sistema de Alertas Tempranas de Medellín. Este sistema procura identificar los riesgos (alertas) sobre vulneraciones en la primera infancia, infancia, adolescencia, juventud y sus familias, desde una visión preventiva y de protección de derechos. En su momento, no se dispusieron recursos ni se incluyó el SATMED dentro de los instrumentos de planeación municipal.
Este año, al ser incluido como Proyecto dentro del programa #JuventudQueTejeVida, esta administración se propuso fortalecer la capacidad de gestión de alertas[3] y, por tanto, la perspectiva preventiva y no reactiva. Asumir la protección y garantía de derechos de las juventudes desde una visión de seguridad humana es el objetivo; nuestro propósito es hacer de Medellín una ciudad del cuidado de la vida.
- Juventudes Tejedoras: este proyecto es la apuesta para la gestión del riesgo o vulnerabilidad juvenil[4]. El proyecto Juventudes Tejedoras tiene una larga tradición en la Secretaría y los avances que ha tenido son importantes, sin embargo, no hemos tenido la oportunidad, como ciudad, de medir su impacto. Hoy la ciudad no sabe el total de jóvenes que se encuentra en riesgo social. Por ello, además del aumento presupuestal, es importante destacar el propósito de dejar una evaluación de impacto de la metodología propuesta por la presente administración.
Sobre la metodología, quisiera destacar la impronta familiar y comunitaria que se le ha agregado al proyecto. Es con las familias y las comunidades con quienes podremos sumar esfuerzos para lograr que Medellín sea una ciudad para el cuidado de la vida.
- Cultura del Fútbol: finalmente, sobre la estrategia de formación de cultura del fútbol, también quiero destacar el aumento presupuestal y hacer énfasis en tres acentos que hemos propuesto: la territorialización de la seguridad humana construida en el estadio, la democratización del liderazgo y la perspectiva de género como impronta metodológica.
Sobre el PDM-Juventud “Medellín Futuro”, es importante destacar el aumento en la participación general en presupuesto total de inversión de la Secretaría de la Juventud[5]. En el 2015 fue del 0.2%, en el 2019 de 0,24% y para el 2020 es de 0,28%.
Sobre los dos proyectos referidos y la estrategia mencionado conviene exaltar el siguiente aumento para el año 2021, respecto al 2020[6]:
FORTALECIMIENTO DEL SISTEMA DE ALERTAS TEMPRANAS – SAT MED | 682% |
PROTECCIÓN DE LAS LIBERTADES JUVENILES- TEJEDORES DE VIDA | 144% |
PROTECCIÓN DE LAS LIBERTADES JUVENILES- CULTURA DEL FUTBOL | 22% |
En segundo lugar, y sobre los marcos hermenéuticos del Plan de Desarrollo para las juventudes, quisiera resaltar que en las distintas etapas de planeación institucional las personas decisoras se mostraron dialogantes, abiertas y decididas a construir un sistema de protección para el ejercicio de las libertades de las juventudes. Este no es un detalle menor pues en nuestra ciudad se ha convertido en tradición la imposición de modelos adultocéntricos dentro de dicha planeación y se ha dado la espalda a los deseos y visiones de las juventudes.
Atendiendo a las necesidades y llamados de las juventudes, el Plan de Desarrollo Municipal de Medellín incluye dos nuevas apuestas para la ciudad; la primera, encaminada al fortalecimiento de los liderazgos juveniles ambientales y, la segunda, enfocada en la garantía de derechos en materia de salud pública juvenil.
Sobre la primera apuesto y a propósito de la importancia de la aprobación del Acuerdo de Escazú, esta administración ha asumido el reto de fortalecer y propiciar que las juventudes vuelvan, en un marco de prevención y protección de las libertades, a proyectar su vida alrededor del agua y el cuidado del ambiente, propiciando así una adaptación, de la mano de las juventudes, a los retos que nos ha traído el cambio climático.
La segunda propuesta tiene que ver con el enfoque de derechos en la salud pública juvenil y la adopción de un camino de mitigación y reducción del riesgo y el daño en materia de consumo de sustancias psicoactivas. Por primera vez un Plan de Desarrollo en Medellín, de manera expresa, promueve una mirada distinta a la criminalización del consumo para poner en el centro el acompañamiento psicosocial, en el marco del respeto de la autonomía de cada joven.
Estos temas fueron propuestos de forma asertiva, firme y decidida por la Asamblea de la Juventudes en el año 2019 y reiterados en la Asamblea de las Juventudes de 2020. Por ello, su adopción dentro del Plan de Desarrollo es muestra del talante ambiental, progresista y liberal de la administración.
Finalmente, y como tercer punto, quiero destacar el rediseño institucional por medio del cual renovamos el objetivo misional y las funciones de la Secretaría de la Juventud. Como fin principal, con miras a la participación juvenil, tendremos un enfoque de protección, prevención y promoción, especialmente, para implementar políticas que ayuden a ser garantes de vida y así prevenir violencias y promover el goce efectivo de derechos civiles y políticos, económicos, sociales y culturales (DESC) y de su hábitat.
Hemos buscado constitucionalizar el objetivo y funciones de la Secretaría de la Juventud.
En definitiva, la ciudad cuenta con una agenda progresista, liberal e igualitaria para las juventudes. Creamos un sistema para propiciar el mayor cambio posible y sostenible para que las juventudes vivan como quieran, vivan bien y vivan sin humillaciones. El compromiso y aliento del Alcalde Daniel Quintero en las anteriores propuestas ha sido decidido y permanente.
[1] Hardgrove, A., Pells, K., Boyden J., & Dornan P. Vulnerabilidades de los jóvenes en las transiciones del curso de vida. UNPD. 2014
[2] Abad G, H. Fundamentos éticos de la salud pública. Universidad de Antioquia-Rectoría. Segunda Edición. 2012
[3] Para el presente año, 2020, se ha aumentado la gestión de alertas en un 410%
[4] Idem
[5] Observatorio de Políticas Públicas del Concejo de Medellín- Centro de Análisis Político Eafit.
[6] Hay que destacar que el POAI 2020, es el resultado de la construcción realizada por la anterior administración en el 2019
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