Quintero Calle, el lunar en las eliminatorias a Qatar 2022

El alcalde de Medellín se fue para Barranquilla a ver el partido de la selección Colombia con recursos públicos, pidiendo un adelanto en viáticos por más de 3 millones de pesos.


Siempre que juega y gana la selección Colombia, el país amanece con un ambiente esperanzador y de unidad. Esta semana, en el juego contra Argentina, a pesar de que el combinado nacional no ganó y con sufrimiento logró arañar un empate en los minutos finales, se sintió como una victoria por remontar dos goles y terminar esta fecha clasificatoria al Mundial Qatar 2022 en posición de repechaje (para los que no conocen de fútbol, significa que si las eliminatorias terminaran en este momento, Colombia debería jugar un último partido contra una selección de Oceanía, Centroamérica o Asia y si gana, tendría su boleto para el mundial del próximo año).

Es un avance, antes del inicio de estas nuevas fechas mundialistas, Colombia estaba fuera del Mundial, jugando mal y sin carácter, lo que ocasionó el despido del técnico portugués Carlos Queiroz, que a mi juicio nunca debió dirigir a la selección. El luso dirigió equipos de renombre como el Real Madrid y la selección de Portugal, pero nunca ha ganado nada. Siempre ha salido por la puerta de atrás.

A Queiroz lo reemplazó Reinaldo Rueda que debutó desde la semana pasada con un balance notable, victoria ante Perú en Lima por goleada y empate ante la Argentina de Messi 2 – 2, después de ir perdiendo por dos goles. La cereza del pastel es que Colombia se vuelve a meter en la pelea por ir al mundial por tercera vez consecutiva.

A Rueda, como a casi todos los técnicos no le sobran los críticos y, sobre todo, después de toro pasado cuando es más fácil hacer los análisis. Antes de empezar estas fechas eliminatorias, fue cuestionado por dejar fuera de la convocatoria a Falcao y James; y en el partido contra Argentina por su mal planteamiento en el primer tiempo que luego rectificó. Incluso analistas como Luis Arturo Henao afirman que Rueda es un buen técnico, pero no uno top para la selección. Estos dos resultados le dan crédito para continuar haciendo su trabajo y moldeando el equipo a su visión. Contrario a lo que piensa Henao, sí considero al técnico vallecaucano como un técnico top y con credenciales, ganó la Libertadores con Nacional y dirigió a equipos de la talla de Flamengo y la selección de Chile. De todos modos, el fútbol es una montaña rusa y su permanencia en la selección la dictará la clasificación a Qatar 2022 que para un país lleno de polarización sería la mejor noticia. Nada ha demostrado ser más eficiente para la unidad y esperanza del país -así sea por un breve lapso- que ver a la selección de fútbol ganar. Se demostró con la disminución de actos vandálicos en los días que jugó la selección en medio de la protesta social.

De otro lado y como lunar en esta jornada futbolística, queda la incoherencia de mandatarios locales como Daniel Quintero Calle, el 21 de mayo dijo en un tuit que:

… para sorpresa de la ciudadanía, esta semana se fue para Barranquilla con su esposa, a ver el partido de la selección Colombia, en medio de la pandemia y cuando las UCIS en Medellín están al 90% de su capacidad. Como si fuera poco, se fue con recursos públicos, pidiendo un adelanto en viáticos por más de 3 millones de pesos, con la excusa de “asistir a misión oficial con el objetivo de sostener agenda con diferentes mandatarios locales del país”  como denunciaron los concejales Alfredo Ramos (ver) y Daniel Duque (ver).   

 


Ante estas denuncias, a Quintero no le quedó de otra que reconocer a regañadientes su error y decir que iba a asumir con su propio bolsillo los costos del desplazamiento a Barranquilla (ver).

El alcalde de Medellín es la fiel representación del que predica y no aplica. Lo mínimo que debe hacer un líder es dar ejemplo y ser coherente con sus mensajes. Desde que en nuestra cultura sigamos creyendo que las normas las deben cumplir los otros y no cada uno, será difícil avanzar como sociedad.

José María Dávila Román

Comunicador Social - Periodista de la UPB con Maestría en Gerencia para la Innovación Social y el Desarrollo Local de la Universidad Eafit. Creo que para dejar huella hay que tener pasión por lo que se hace y un propósito claro de por qué y para qué, hacemos lo que hacemos. Mi propósito es hacer historia desde donde esté, para construir un mundo mejor y dejar un legado de esperanza y optimismo para los que vienen detrás. Soy orgullosamente jericoano.

Nota al pie: El columnista tiene o ha tenido vinculación laboral con la minera AngloGold Ashanti. 

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