“Este gobierno y sus funcionarios parecen más unos activistas tuiteros, destructores, y una profunda ignorancia a ser lo que son o se supone que deberían ser: Servidores públicos.”
Con la llegada del nuevo gobierno el 7 de agosto, también llegaron las invasiones a las tierras consideradas “improductivas”. La primera invitación a estas invasiones llegó nada más y nada menos que desde la presidencia y en específico de la ministra de agricultura Cecilia López.
Este jueves 22 de septiembre, la Defensoría del Pueblo de Colombia informó que ha logrado identificar 108 casos de invasiones ilegales en el país, de los cuales 13 estarían vinculados a grupos armados ilegales que buscan el control territorial y de las economías ilícitas en los territorios.
Así lo anunció el defensor del Pueblo, Carlos Camargo, durante su intervención en Encuentro Internacional para la Prevención y Transformación de la Conflictividad Social en el que aseguró que el 36 % de estos casos se estarían registrando en el departamento del Cauca; sin embargo, solicitó especial atención en Antioquia, Atlántico, Cauca, Cesar, Chocó, Guainía, Huila, Magdalena, Valle del Cauca y Vichada.
Todo esto se dio porque (parafraseando el discurso de Gustavo Petro) “la tierra no es de quien la posee, sino de aquel que la necesita”. Todo un discurso de un comunista redomado y un marxista palpante que, a como dé lugar, le está pagando el los votos a los cientos de miles de indígenas hambrientos de poder y de comunidades “oprimidas y olvidadas” que se le acercaron a su campaña y su postura ante la tierra.
Y aunque los focos se han encendido en el norte del Cauca, donde actualmente se vive una álgida confrontación entre indígenas invasores y comunidades afro descendientes que defienden su territorio, lo cierto es que este fenómeno de invasiones se ha replicado en varias zonas de Colombia perdiendo el derecho constitucional a la propiedad privada consagrada en la constitución de 1991, de la cual Petro se jacta de ser el “constituyente”, como si no bastará las mentiras constantes de su vida.
Mientras estos y más procesos de invasiones continúan, el Consejo Regional Indígena del Cauca (Cric) hizo pública una carta en respuesta a la solicitud del gobierno nacional de desalojar predios privados ocupados de forma violenta. La organización indígena no solo desacató el plazo de 48 horas para abandonarlos, sino que advirtió que seguirá ocupando nuevas tierras.
Mientras esto pasa, el Ministro de Defensa, Velásquez (que por cierto ha sido lo más nefasto que le ha podido pasar a las Fuerzas Militares y Policía en toda la historia republicana de Colombia) aseguro que solo la intervención por la fuerza se hará solo “después de agotar todo dialogo”. Nada más populista y claudicador, que eso.
Mientras tanto el Director de la Agencia Nacional de Tierras, ex guerrillero por cierto, en una entrevista con la FM, de manera directa estuvo justificando la invasión de predios privados debido a la reforma agraria que se está llevando a cabo. Asimismo, el director de la Agencia Nacional de Tierras destacó que con este gobierno Petro se estará realizando una reforma rural para que se pueda resolver el problema de las invasiones en diferentes territorios del país. «El gobierno está abordando de manera definitiva el tema, para eso se necesita una reforma rural». Solo traduce que es mediante una política de “Justicia Social”. O Justicia Social Injusta, como diría Antonella Marty, querer quitarle la propiedad a la gente que la ha laborado toda su vida y dársela a miserables amigos del régimen Petro y asegurar sus política mediante la coerción.
Un hombre que ha estado en defensa de la propiedad de los ganaderos y personas que trabajan la tierra, ha sido Jose Felix Lafaurie, director Ejecutivo de Fedegan. Ha sido un crítico en el tema de invasiones de tierra en Colombia, resaltando su contra postura a la petición de algunos pueblos indígenas, quienes señalan que existen tierras que les pertenece, pero son habitadas por terratenientes. En las últimas horas, el ex viceministro de Agricultura del país hizo una publicación en la que da entender que detrás de las invasiones de tierras se encuentran grupos armados.
La comunidad indígena y afro no son los únicos que se encuentran involucrados en la petición de predios rurales, de hecho el Ministro de Defensa y la de Agricultura junto con el Fiscal General han resaltado que existe evidencia de grupos criminales que se encuentran implicados en algunas de las invasiones que se han presentado en los diferentes departamentos del país.
Eso, solo en las zonas rurales, pero por lo visto, los invasores no solo se quedarán en esas zonas, sino también buscan expandirse en las zonas urbanas, lo cual sería lo más preocupante, porque como lo han mencionado, esto ha sido el inicio de un desgobierno que abandono a media Colombia por cumplirle a 11 millones de Colombianos. Este gobierno y sus funcionarios parecen más unos activistas y tuiteros, destructores, y una profunda ignorancia a ser lo que son o se supone que deberían ser: Servidores públicos.
Lo que espero, es que esto se resuelva al corto plazo, porque debido a la inacción del estado para garantizar la vida y la propiedad de los colombianos, regresen los años oscuros y tétricos de los años 70, 80, 90 y hasta inicios del 2000, en los cuales los colombianos, si no los defendían, tomaban la defensa en sus propias manos. Porque la propiedad privada se la defiende, hasta con la vida.
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