La sensibilidad de Olga Piedrahita hacia las artes fue notoria durante su infancia, debido al gusto que tenía por el ballet. La diseñadora, nacida en Medellín, consolidó su amor por las artes cuando inició los estudios de Bellas Artes en Estados Unidos en la Nicholls State University de Lousiana.
Al terminar la universidad en l982 regresó a Colombia para junto a su hermana Eulalia Piedrahita, quien había estudiado Tejidos en Florencia (Italia), crear el Taller Barroco en Medellín, donde creaban ensambles altamente llamativos con telas mezcladas con tintura. Esta propuesta marcó un estilo e impactó tanto en Colombia que le permitió a Olga Piedrahita montar otro taller en Bogotá.
Durante toda su carrera, Olga Piedrahita ha tratado de acercar el arte al diseño, mostrándonos una gran cantidad de creaciones que buscan a través de los colores, el teñido y la superposición de telas, entre otros elementos decorativos de cada pieza, la cual es única y cuenta la historia de una mujer, la historia de una Olga Piedrahita en diferentes momentos de su vida.
Ella es una de las diseñadoras colombianas que más conciencia tiene de cómo los factores psicológicos influyen en el artista y su obra. Por ello, sus experiencias personales han marcado las diferentes etapas de su proceso creativo, y cada cambio que presenta en sus creaciones está inspirado en momentos de su cotidiano. Esto ha llevado a que Olga Piedrahita pueda darse cuenta de que el vacío es tan importante como lo lleno, lo que sirvió en su momento para dejar atrás el dramático y excesivo estilo barroco que tanto la caracterizó en sus inicios.
De esta manera, sus líneas de diseño fueron dejando a un lado las creaciones sobrecargadas para apelar al minimalismo. La diseñadora comenzó a asumir el reto de lo vacío, técnicamente tan exigente como lo abarrotado.
Ser una diseñadora consciente del valor del diseño como un arte, ese es el plus de Olga Piedrahita. Tal apuesta quedó consignada en esta frase que dijo a mediados de los años noventa y que hoy sigue tan vigente como en aquella época: «La ropa es para ponérsela, no para colgarla». Para ella la diferencia del diseño con otras artes como la pintura o la escultura, es que el diseño de modas es un arte utilitarista que está relacionado con el mundo cotidiano, en tanto que las prendas se utilizan en el día a día.
Es tal vez que por esta visión del mundo del diseño y de la moda que Olga Piedrahita es, desde hace algunos meses, la nueva creativa de Arkitect, la marca de ropa de bajo costo de hipermercados Éxito. En este nuevo reto la diseñadora tendrá que mostrar lo aprendido durante las últimas décadas y diseñar para mujeres que se acogen a la filosofía de la moda incluyente.
El mantra de “veo ahora y compro ahora”, será el nuevo que afrontará la diseñadora antioqueña. A muchos les causa emoción que Arkitect, una marca de moda masiva, entregue la responsabilidad de su proceso creativo a Olga Piedrahita, que por años ha sido referente de diseños innovadores y auténticos.
Cada pieza de la colección que comenzó a venderse hacia el 26 de octubre del presente año tiene ese carácter diferenciador que toda mujer, amante o no de la moda, desea tener para plasmar su sello personal en el vestuario.
Olga Piedrahita ha logrado impactar al público con cada una de sus colecciones, desde el neorromántico con la exigencia de acabados de alta costura y la utilización de materiales como los chiflones, crepés, tules y organizas, hasta esta nueva colección para el uso masivo que envuelve con sutileza al cuerpo femenino.
