Mi historia, tu historia

Enfrentar la ansiedad ha sido un desafío personal, pero también un viaje de autodescubrimiento y crecimiento


Hace algún tiempo, mi vida parecía transcurrir sin mayores sobresaltos. Era un joven aparentemente normal, disfrutando de los días sin preocupaciones. Sin embargo, poco a poco, empecé a experimentar un cambio inesperado. La ansiedad comenzó a apoderarse de mí, convirtiéndose en una constante en mi día a día. En esta columna, quiero compartir mi experiencia y animar a todos aquellos que se sientan identificados a que busquen ayuda y comprendan la importancia de la salud mental.

El inicio de una montaña rusa emocional

La ansiedad irrumpió en mi vida sin previo aviso. Sentía un nudo en el estómago, dificultad para respirar y pensamientos acelerados que no me dejaban descansar. Mis preocupaciones se magnificaban y me costaba controlar mis emociones. Cada día se volvía una montaña rusa emocional, sin saber cuándo vendría el próximo bajón o subida.

La ansiedad me llevó a un laberinto del cual parecía no haber salida. Por momentos, sentía que todo volvía a la normalidad, pero de repente, un nuevo golpe de ansiedad me sumergía en la incertidumbre y el miedo. Era como si estuviera girando en un carrusel sin control, atrapado en una espiral de pensamientos y emociones que parecían dominar mi vida.

La importancia de buscar ayuda profesional

En mi camino de enfrentar la ansiedad, comprendí la importancia de buscar ayuda profesional. Hoy siento no estar solo en esta batalla, contar con el apoyo de un terapeuta brinda herramientas para comprender y manejar mis emociones. La terapia me ha permitido explorar las raíces de mi ansiedad y desarrollar estrategias para afrontarla de manera más saludable.

Es crucial comprender los factores que contribuyen al crecimiento de la ansiedad en nuestra sociedad. Vivimos en un mundo acelerado, lleno de presiones y expectativas. El estrés laboral, la sobreexposición a las redes sociales, la falta de tiempo para el autocuidado y la desconexión emocional son solo algunos de los factores que pueden desencadenar o empeorar la ansiedad.

No estás solo

Si estás luchando contra la ansiedad, quiero decirte que no estás solo. Muchas personas atraviesan situaciones similares y entienden el tormento que puedes estar experimentando. No te avergüences de buscar ayuda y apoyo. Comparte tu historia con personas de confianza y busca recursos profesionales que te brinden las herramientas necesarias para superar esta compleja situación.

La ansiedad y otros trastornos mentales no deben ser ignorados ni minimizados. La salud mental es tan importante como la salud física y requiere atención y cuidado. Debemos desterrar el estigma que rodea a las enfermedades mentales y promover una sociedad que valore y priorice el bienestar emocional de sus miembros.

Enfrentar la ansiedad ha sido un desafío personal, pero también un viaje de autodescubrimiento y crecimiento. A través de la búsqueda de ayuda profesional y el apoyo de seres queridos, he aprendido a manejar mi ansiedad y a no permitir que me defina. Si estás pasando por una situación similar, recuerda que tienes el poder de cambiar tu historia. No te rindas, busca ayuda y trabaja en tu bienestar emocional. Juntos, podemos crear una sociedad que valore y cuide la salud mental de todos sus miembros.


Todas las columnas del autor en este enlace: https://alponiente.com/author/fmartinezp/

Felipe Martinez Plaza

Consejero de Juventudes Cartagena de Indias, Activista, Líder estudiantil, Estudiante de Derecho y Ciencias Políticas Universidad de Cartagena, Miembro Fundador de Movimiento Sinergia.

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