La política como proyecto de vida

Palabras mínimas para un Pacto por la Vida, palabras mínimas para un acto de amor desde una Ecología para la vida.


  1. De la naturaleza de las cosas

Desde los inicios de la construcción del estado moderno occidental, la política ha tenido como referente estratégico el control sobre la naturaleza. Para lograrlo, constituyó un relato hegemónico en el que separó al hombre de la naturaleza y le ordenó poseerla y explotarla.

La crisis climática y ambiental, que hoy pone en evidencia la posibilidad de la desaparición de la especie humana, denuncia que el cambió de modelo de producción no da espera, e igualmente, que reconocernos como seres que formamos parte integral de naturaleza es una obviedad y una urgencia vital.

¿Qué hacer para sintonizarnos y asumirnos de nuevo como naturaleza-vida?

De múltiples maneras se lo pregunta Leonard Boff, en textos y reflexiones que sustenta parte de la problematización que sobre el cambio climático propone el Papa Francisco en sus dos últimas Encíclicas

El mundo originario andino y el Suma Kawsay, traducido al castellano como Buen VivirVivir con planitud, son parte del camino.

La naturaleza existe sin la necesidad de que existamos los seres humanos: en la interacción, nuestra relación debe ser amorosa y cuidadora. La Naturaleza se transforma en la relación con nuestro ser y hacer. La dialéctica de la Naturaleza nos tiene como protagonistas, aún en espacios artificiales.

Para re-ligarse de nuevo a la naturaleza, es necesario incorporar, muy especialmente en la política, algunos de los atributos manifiestos en los sistemas vivos; y que desde las ciencias de la complejidad se expresan como fluctuación, turbulencia, irregularidad, emergencia y no linealidad.

Es necesario poner en cuestión las lógicas adoptadas por un modelo de ciencia hegemónico, que se reclama como único, sobre el que sustenta el mundo occidental desde lo inicios del siglo XVII y sobre el que se afincó el sistema capitalista, antropocéntrico, imperial, patriarcal, colonial y extractivista.

El mercado neoliberal, como el método científico mecanicista aliena, parametriza y normativiza a la naturaleza y por nuestra especie. Nos ha vuelto un recurso de producción y un factor matemático. Un dato.

Necesitamos, para pensar un nuevo proyecto para el nuevo mundo, una nueva manera de organizarnos, una concepción bio-céntrica del universo y de la realidad que se construye, en contraste con la mirada antropocéntrica, antropológica y antropomórfica.

Disputar con la biopolítica del poder occidental. desde una biopolítica de la vida con nuevos lenguajes, nuevas herramientas de interpretación, nuevos contenidos, nuevas acciones.

2. De la biopolítica.

Lo atributos de la vida, están determinados por el grado de libertad que agencia el sistema vivo; así lo asume la biopolítica desde la complejidad, como lo señala el maestro Carlos Eduardo Maldonado:

A mayor grado de libertad mayor grado de complejidad, y viceversa.

Hay que introducir en nuestro deseo de cambio, un alto grado de libertad. Hay que aplicar a los programas de gobierno, una dosis ilimitada de libertad para que la política se re-cree ella misma, como emergencia ética y estética, que asume la recreación como reino de la libertad.

Creatividad que supone comprender el agua (río), como ordenador de la política y del territorio. Este es el sentido de la disputa de la biopolítica frente al biopoder.

Asumir el río de Heráclito como síntesis de la vida: no podemos bañarnos dos veces en el mismo río, porque el río y los bañistas, no son los mismos; la variable mayor, el tiempo, que es la misma variable vida, los recrea, evoluciona y transforma permanentemente.

Un río y agua que se transforman pedagógicamente porque siempre están aprendiendo. Un río que en su viaje permanente se adapta e irrumpe. El río y el agua son elementos disruptivos. El río y el agua están en revolución permanente.

El río y el agua habilitan que la vida cumpla su misión cósmica: recrear y crear más vida

Y pocas cosas tan creativas como la autoorganización, expresión de un alto grado de emancipación en la vida y en la política.

José Miguel Sánchez Giraldo

Educador popular, profesional en ciencias políticas; magister en estudios latinoamericanos; PhD. en educación y mediación pedagógica por la Universidad de La Salle de Costa Rica.

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  • Qué opina de la interacción con la naturaleza de gente como usted , José, deja escombros tirados en medio de reservas forestales