“Solo algunas personas han detenido su mundo para aislarse y tomarse una taza de café o una copa con la soledad”
Si, es la célebre canción de Alci Acosta, que muchas copas ha llenado, e infinidad de brindis a protagonizado, además de ser la villana de muchas más producciones de Hollywood, eso sin contemplar las frases célebres y libros que ha inspirado a realizar, pero que más haya de ser un motivo de miedo en la sociedad, es un espacio el cual debemos de entender y dejar de estigmatizar.
El escritor Friedrich Nietzsche en su libro llamado “Más allá del bien y del mal”, escribió la frase “Cuando miras largo tiempo a un abismo, también éste mira dentro de ti”, que ha causado muchos post en la redes sociales, pero solo algunas personas han detenido su mundo para aislarse y tomarse una taza de café o una copa, con la soledad donde se dialoga y se comparte experiencias, tienen un lazo de cordialidad y entienden que a la soledad no se le debe de tener miedo.
Por las conductas dadas en algunas comunidades, donde dicen que las personas aisladas son malas, que no se saben comportar en sociedad, y son llamadas de forma despectiva como bichos raros, se considera a la soledad como mala consejera, que no trae nada bueno, o que nadie debe estar solo y por eso la despreciamos y evitamos su compañía, hacemos lo posible por no estar en ese mal llamado, lugar oscuro.
Pero hay personas que han logrado y les gusta en ocasiones pasar momentos en compañía de ese silencio, esa tranquilidad, donde las ideas se dispersan y aclaran, donde también hay buenos consejos, donde han tomado la delicadeza de cambiar la decoración del lugar, ponen cuadros, brillan atardeceres, los muebles son del color y de la forma deseada, una amplia variedad en la lista de reproducción, donde escuchas cascadas, pájaros, rock, salsa, jazz, o la que se prefiera, también la carta tiene un menú muy diverso fruta, maní, caramelo, empanada, pan, las posibilidades son infinitas.
Todo es decisión, tener la valentía de afrontar ese momento a solas, poner a disposición todos los sentidos, tener la lucidez para entender, comprender, asimilar realizar una introspección del resultado, de la conversación con esa energía que convive con cada uno de nosotros, que sabe tus mejores pensamientos, tus capacidades, las dificultades, tus más tristes momentos, ha sentido tus momentos de colera, sueña con tus objetivos o metas, las diferentes frustraciones que ocasionan los choques entre tu ser y el llamado correcto modo de la sociedad, es quien más nos conoce y al que menos atención le prestamos cual si fuera pepe grillo de la historia pinocho, es esa vos que debemos de darle protagonismo escuchar lo que tenga que decir, no restarle su naturaleza, recibir empáticamente lo que nos quiera decir el cohabitante de nuestras vidas, las conversaciones no siempre serán amables, ni del todo agresivas, pero todas son necesarias para entender muchas de las cosas que ocurren, que mejor que escuchar a esa parte que tienes por compañía, y que mejor que escuchar, en la soledad en el silencio en ese lugar que adecuaste para tener esa cita con tu contraparte, con tu propio pepe grillo; el mundo tiene mucha contaminación sonora, adicional que siempre nos esta distrayendo con las plataformas y descuidamos esa parte, esa esencia del ser en su forma más pura, más elemental, de conversar tranquilamente con nosotros mismo.
Hay quienes prefieren estar reunidos en discotecas por los altos decibeles de la música, en reunión con muchas personas, en medio del bullicio de la ciudad, siempre escuchando, prestando atención a los ruidos de afuera, esto con el fin de acallar u omitir lo que la voz interna nos quiere decir, por miedo a enfrentarnos a nosotros mismos, porque sabemos lo que nos quiere decir, la cobardía de saber lo que se debe hacer y no hacerlo, es la conciencia es esa voz interna que quiere ayudar a que tu vida, tu energía, fluya de manera diferente, es esa ayuda por la cual muchos pedimos mirando al cielo, pensamos que la respuesta la pueden tener los mil y un videos posteados en las redes sociales, las parejas, en fiestas, escuchando a los amigos o familiares, restándole importancia a pepe grillo.
La soledad no es aburrida, ni da miedo, ni se encuentra en oscuridad, es un espacio, un santuario donde te encuentras con tigo mismo donde debes de tener la mente y el corazón en completa calma y expresarte con total honestidad, con la verdad que reposa en tu interior, esa verdad que has evitado escuchar o que no has tenido la valentía de asumir, por estar distraído escuchando al mundo, dándole atención a todo lo que dicen las voces y el ruido del entorno.
Es un momento un espacio que te mereces, estemos en pareja o se esté solo, estés con tu familia, estés con un trabajo demandante, es un momento que debes de visitar periódicamente, debes de buscar propiciar, para este escritor cada persona en su individualidad debe de tener un espacio, ser receptivo y poder comunicase consigo mismo, decirse las palabras, o recibir el apoyo que las voces del entorno no le permiten discernir, en tu interior están esas palabras que posiblemente añoras y que tu alma talvez cansada, triste merece, requiere, y que cada uno como individuo sabe que son verdad.
El mundo en su afán e inmediatez nos somete y pone a su merced robándonos la sonrisa, esa libertad de pensamiento que en ocasiones nos limita en la individualidad, encaminándonos a funcionar en un estándar gris y sombrío de la sociedad actual, donde estamos faltos de empatía.
Sabemos lo que está mal y que está bien pero el ruido mundano no nos permite distinguir el valor, la moral que tenemos inculcada tatuada en el ser, esa misma que podemos refrescar y recordar, cuando logramos conversar con nuestro interior, prestarle la atención suficiente a pepe grillo, ese personaje que sabe más de nosotros, con su ayuda reestablecemos esa línea de felicidad, ese lineamiento que nos define, esa línea donde podes ser un ser pleno, ese infante que no esperaba la aceptación para realizar eso que lo secaba de la risa.
Visitemos la soledad, ella no hace daño, acallemos el mundo y hablemos periódicamente con pepe grillo, recordemos esa personalidad que nos seca de risa, alimentándolo, alentándolo a madurar, a mejorar mas no a ocultar quien es, en la esencia fundamental que reposa en el ADN, en el alma en el ghost, y que al pasar los años, con el venir de las experiencias vamos olvidando, no podemos permitir que el ruido mundano nos acalle hasta el punto de olvidar quienes somos o sumarnos al montón de personas consumidas por el mundo actual.
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