Alemania amenaza al sur de Europa: Grecia no es un problema

A finales de este mes habrá elecciones en Grecia y todo apunta a que ganará Syriza, un partido de izquierdas con lazos con Podemos que aboga por el fin de la austeridad y una quita importante de la deuda. Esto debería hacer temblar a Alemania, pues va en contra de todo lo que se ha impulsado desde allí en los años de la crisis, pero parece que no.

Según las filtraciones que ha hecho el Gobierno de Alemania, ahora ven factible una salida de Grecia del Euro. Es decir, amenazan con expulsar a Grecia del Euro si decide unilateralmente hacer las cosas a su manera. Y esta es una amenaza velada con el resto de países con problemas, como por ejemplo España o Portugal.

Es cierto que bastantes cosas han cambiado en estos años. Primero, la situación del sistema financiero en el sur de Europa ha mejorado. Segundo, gracias al BCE, la prima de riesgo ya no es un problema. Tercero, las perspectivas son favorables, gracias al precio del petróleo y el cambio euro-dólar. Todo esto ayuda a que una salida de Grecia del Euro no sea tan destructivo para el resto de países que lo que hubiera pasado hace unos años. Sin embargo la amenaza sigue ahí, si otro quiere hacer las cosas a su manera será sin la moneda común.

El problema es que estas perspectivas favorables no se aplican a Grecia. La situación allí es un desastre. El PIB ha caído un 30% desde 2009 pero los ingresos un 40%. El paro ha subido a un 26% con un tercio de la población bajo el umbral de la pobreza. Tres millones de personas (de 11 que habitan el país) no tienen cobertura sanitaria regularizada. La deuda pública se ha disparado al 177% del PIB. Es un completo desastre y no parece verse la salida.

El plan de austeridad, reformas y préstamos ventajosos puede que haya funcionado en países como Irlanda y esté funcionando en otros como Portugal y España (con muchos matices), pero en Grecia ha sido un desastre. La deuda es impagable y la situación social insostenible. ¿De verdad tiene que llegar un partido nuevo al poder para poner las cartas sobre la mesa? Grecia necesita otra salida y la UE (y en especial Alemania) no se lo están poniendo fácil.