HOY, domingo 22 de octubre, se dará inicio formal a la nueva batalla electoral entre Nicolás Maduro y la “oposición venezolana”, cuando sea elegido el candidato vencedor de las Elecciones Primarias.
Nueve (9) meses han pasado desde que la Comisión Nacional de Primaria (CNPrimaria) anunciara la fecha. Desde entonces, los integrantes partidistas han mantenido sus conflictos personales: las discusiones sobre sí permitían la asistencia técnica del Consejo Nacional Electoral (CNE) –controlado por el madurismo– y sobre cómo afrontar la inhabilitación política de algunos candidatos por parte de la Contraloría General de la República Bolivariana de Venezuela (CGR), organismo que también responde a los intereses oficialistas.
Aun así, las Primarias se realizarán en la fecha acordada, sin la participación del CNE y con la logística de la CNPrimaria, integrada por voluntarios de los partidos de oposición: quienes tienen un alcance más reducido debido a sus escasos recursos económicos, pero que garantizan más de tres mil (3.000) centros de votación en los 335 municipios del país. En el exterior, dispondrán de 87 centros en 80 ciudades de 30 países, un derecho para los venezolanos en el extranjero que ha sido históricamente vulnerado y normalizado por el chavismo; Colombia, Chile, España y los Estados Unidos serán las representaciones con mayor número de votantes.
Encuestas y candidatos
Es imposible hablar de estas Elecciones Primarias sin mencionar a María Corina Machado, la candidata favorita que encabeza las encuestas desde junio de este año cuando anunció su participación, a pesar de estar inhabilitada por la CGR oficialista.
El último estudio de la firma Delphos revela que 48,7 % de quienes han manifestado su interés en participar en las Primarias, escogerían a María Corina Machado, mientras que el 8 % a Henrique Capriles, igualmente inhabilitado por la CGR y que renunció a su candidatura hace pocos días. Capriles fue candidato presidencial en dos (2) oportunidades, derrotado por Hugo Chávez en 2012 y por Nicolás Maduro en 2013, esta última de manera muy polémica. El resto de los candidatos que sí están habilitados tienen una intención de voto que se diluye entre un porcentaje menor al 5 %.
Las preguntas que María Corina Machado y la “oposición” no responderán
Primera:
¿Cómo se inscribirá en el CNE para ser candidata presidencial en 2024 estando inhabilitada? Entendiendo que el primer error, en una serie de errores, es querer jugar a la democracia contra un régimen narcoterrorista, genocida y dictatorial, el cual, necesita con urgencia una legitimidad internacional verdadera que solo unas “elecciones” le podrían dar.
Segunda:
Suponiendo que un régimen socialista de naturaleza criminal –como el de Maduro– la dejara participar en las Presidenciales de 2024, ¿Cómo pretende ganar unas elecciones con el Consejo Nacional Electoral presidido por Elvis Amoroso? Amoroso es un veterano militante del chavismo, exdiputado e integrante de la junta directiva del Partido Socialista de Venezuela (PSUV), quien es el actual Contralor General y que en su gestión ha inhabilitado políticamente 150 ciudadanos venezolanos, ratificando, asimismo, la inhabilitación a María Corina Machado por 15 años.
Tercera:
En el hipotético escenario que Amoroso decida no manipular los resultados electorales para favorecer a Maduro en 2024 y logre ganar la candidata Machado: ¿Cómo esta gobernaría un país en el que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) acata órdenes de Maduro, donde 256 de los 277 Diputados de la Asamblea Nacional (AN) son del PSUV, y los Magistrados del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) fueron escogidos y ratificados solo por Diputados chavistas, considerando, entre otros, que 20 de los 23 Estados del país son gobernados por maduristas y 205 de las 355 alcaldías son serviles al régimen?
Quizás, el verdadero plan de Machado es cambiar completamente la dirigencia de la actual Plataforma Unitaria y esté preparándose para liderar la oposición en los próximos seis (6) años, aprovechándose del descontento de los venezolanos con los partidos políticos tradicionales y las negociaciones con el Gobierno de Maduro en los últimos años, que no han logrado otra cosa más que afianzar al régimen en el poder.
La realidad geopolítica que mantendrá a maduro apoderado de Venezuela
Primero
El Presidente de China, Xi Jinping, se reunió el pasado mes de septiembre con Nicolás Maduro en Pekín para anunciar que elevará las relaciones internacionales con Venezuela a una “Asociación Estratégica Integral”, el nivel más alto de la diplomacia china. Solamente Pakistán, Rusia y Bielorrusia ostentan este trato diplomático con el gigante asiático.
Maduro consiguió un nuevo salvavidas económico que incrementa la deuda de Venezuela con China, aunque le brinda un nuevo nivel de padrinazgo y blindaje político internacional.
Segundo
El Centro Internacional de Inversión Productiva (CIIP) de Venezuela y la Fundación Roscongress de Rusia, firmaron el pasado 12 de octubre, en Moscú, un memorándum de entendimiento para “impulsar sectores estratégicos” en el mercado de ambas naciones, con el objetivo de fortalecer el intercambio comercial entre Caracas y Moscú, además de captar nuevas inversiones. Con esto, la narcodictadura de Nicolás Maduro se posiciona como el principal aliado de Rusia en Sudamérica.
Tercero
El Presidente de la República Islámica de Irán, Ebrahim Raisi, visitó a Nicolás Maduro en Caracas el pasado mes de junio. Esto, a fin de anunciar que aumentará el comercio con Venezuela a USD$ 20.000 millones. Ambos países firmaron en 2022 un plan de cooperación de 20 años que incluye la reparación de refinerías venezolanas, y el cual también contempla las áreas de defensa, agricultura, turismo y cultura.
Cuarto
El miércoles 18 de octubre, a cuatro (4) días de las elecciones primarias, la Administración Biden autorizó a la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de su Departamento del Tesoro a levantar las sanciones de petróleo, gas y oro de Venezuela durante los próximos seis (6) meses, quedando libres todas las transacciones relacionadas con el sector petrolero y gasista en Venezuela, incluyendo la autorización de transacciones financieras con algunos bancos venezolanos que se mantuvieron bloqueados los últimos años. Lo anterior, ocurrió luego de los acuerdos parciales firmados entre una delegación de oposición –donde no figura ningún representante de María Corina Machado– y representantes del Gobierno de Nicolás Maduro, este martes 17 de octubre en Barbados.
El premio económico al régimen madurista se otorgó luego de que manifestaran su compromiso de cumplir parcialmente con la Carta Magna venezolana, liberando al exdiputado de la AN Juan Requesens, al periodista Roland Carreño y a otros tres presos políticos como medida de intercambio –nada que envidiarle a unos secuestradores que piden el pago de un rescate–. Entre otros, se comprometieron con no adelantar la fecha de las Elecciones y a realizarlas en el segundo semestre de 2024 como lo estipula la ley venezolana.
Sin embargo, la otra cláusula relevante del acuerdo deja una interpretación de la ley en el aire. Adhiere que se buscarán promover la autorización a todos los candidatos presidenciales y partidos políticos para que puedan participar en las Elecciones Presidenciales de 2024, aunque señalando que eso será “siempre que cumplan con los requisitos establecidos en la ley”. Pregunto: ¿Cuáles requisitos de ley?, ¿los de la Contraloría General madurista de Elvis Amoroso?, o, ¿la ley del TSJ controlado por Magistrados chavistas? Esta aclaratoria no descarta que Maduro mantenga inhabilitada a María Corina Machado, la virtual ganadora de las Elecciones Primarias de hoy 22 de octubre.
Para concluir
En los próximos días, Caracas y Washington D. C. negarán la normalización de sus relaciones diplomáticas por pura estrategia de marketing político. La realidad, es que la Casa Blanca le dio al régimen el oxígeno que necesitaba. Se esperan más liberaciones de presos políticos y ciudadanos estadounidenses, e incluso que la Administración Biden libere al testaferro de Maduro, Alex Saab, acusado en los EE. UU. por lavado de activos, como ocurrió en febrero de este año con los “narco-sobrinos” de la Primera Dama, Cilia Flores, quienes ya estaban sentenciados por la Justicia Norteamericana.
Los venezolanos recibimos un golpe en la cara: tenemos un knock-out técnico antes de iniciar la tan esperada batalla electoral. Y para Latinoamérica, el escenario es igualmente terrible. Maduro, uno de los principales líderes del Foro de São Paulo y el Grupo de Puebla, no solo tiene el control absoluto de Venezuela, sino que cada vez está mejor blindado política y económicamente por las principales potencias terroristas y militares del mundo sin que nadie pueda impedirlo.
Esta columna apareció por primera vez en nuestro medio aliado El Bastión.
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