El astuto Mal

¿será que el intelecto en proporciones desmedidas y no sujetas a una relación y temor de Dios, hacen al hombre un ser arrogante y egoísta con inclinaciones al engaño y a la maldad?


Todos hemos escuchado en algún momento de nuestra vida la historia bíblica de la serpiente que engañó a Eva en el paraíso Edénico en el principio de la creación; sea que la hayas conocido con base en una religión o sencillamente por cultura general, o quizás por una película de semana santa donde es muy común que emitan este tipo de historias, sabemos casi de memoria colectiva lo que sucedió, sin embargo es muy común en la sociedad,  el pasar por alto asuntos coyunturales mucho más profundos que se dan en este evento, como el hecho de: ¿Por qué la audacia se da, como una característica de la serpiente que engañó a Eva? Si buscamos el concepto hoy en día, La audacia tiene una relación con el intelecto, con información más amplia sobre algo que proporciona una ventaja, la pregunta que me surge luego de haber leído una y otra vez esta parte de la historia es: ¿será que el intelecto en proporciones desmedidas y no sujetas a una relación y temor de Dios, hacen al hombre un ser arrogante y egoísta con inclinaciones al engaño y a la maldad?

Esto me recuerda que en el año de 1945 luego de la victoria obtenida por los ejércitos aliados contra la Alemania nazi, comenzó a escucharse de manera muy relevante el nombre del científico Albert Einstein , quien de por sí , ya era un hombre muy conocido por sus investigaciones y aportes a la ciencia, y que en los meses posteriores al final de la caída de Hitler él proporcionó la información de la energía atómica como finalidad para el desarrollo económico y de la ciencia, ya que consideraba que el mundo podía resurgir luego de tantos años de guerra, pero lo que no se esperaba es que, por esos días el señor  Robert Oppenheimer construyó con esa información la bomba atómica que proveyó la aniquilación de 246.000 (doscientos cuarenta y seis mil muertes) y años seguidos por envenenamiento de radiación se sumaron otros miles.

(Sería bueno resaltar antes de continuar que La primera analogía que Dios hace en referencia al pecado, es la del comportamiento de una fiera que está lista para atrapar a su presa, que anda al acecho sobre los que hacen lo malo. Una especie de león hambriento o animal carnívoro)

Generalmente en las películas y series de televisión, los villanos y antagonistas siempre los relacionan con personalidades intelectualmente superiores, como científicos o estrategas habilidosos.

¿de dónde nace esta conclusión hollywoodense, ¿no será que esta personificación nace de la serpiente astuta en la primera historia dramática del ser humano narrada en el libro de más influencia en toda la historia humana?

Yo concluiría que este árbol del conocimiento del bien y del mal que se relaciona directamente con esta serpiente astuta y  que proporcionó la fruta que dio paso a la caída del ser humano nos da a entender que;  Cuando adquieres el conocimiento del bien y del mal, sabes que eres vulnerable (se abren tus ojos), que es exactamente lo que la serpiente afirmó a Eva en su elocuente forma de influenciarla, y al saber una persona que es vulnerable; también sabe por deducción lo que hace vulnerable a otros y adquiere la capacidad potencial de hacer daño a otros (este es el conocimiento del mal)

Por otro lado, el conocimiento del bien, es el desconocimiento del mal, (como un niño que es superior en su estado de consciencia por su inocencia) a diferencia del hombre que por experiencia y conocimiento es inclinado hacia el mal y solo la renovación de la mente y la ley del espíritu le puede permitir regenerarse no del todo, pero por lo menos en gran medida a su estado original hasta que vuelva al paraíso del cual fue expulsado.

 

 

 

Alvaro Jorge Acosta Peña

Comentar

Clic aquí para comentar

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.