“DISIDENCIAS JUVENILES, REIVINDICANDO REALIDADES, DE-CONSTRUYENDO IDENTIDADES”

“Ya paren de hacer maldad por ser la autoridad
nos quieren controlar con su abuso de poder somos la juventud
no somos como tú siempre la multitud del pueblo” Abuso de Poder: Gabilonya

¡En Medellín, lo juvenil está de moda, la incidencia y la participación se venden como pan caliente en la puerta de la coyuntura político electoral que se avecina!, durante los últimos días se han dado situaciones en la ciudad que dan visos de que lo joven se puso de moda, en el marco de la “vos de incidencia” en el marco de las futuras elecciones, donde como la historia lo ha demostrado somos determinantes como población joven para legitimar los falsos programas de gobierno que se subastan en el afán de ostentar el poder político-administrativo de las ciudades y el país.

El 20 de julio celebrando una guerra que se apoda independencia; se gritó independencia, en el País, en la Capital, en Medellín, en medio de los gritos, de los llantos y de la actual coyuntura de violencia y conflicto que se padece en todo el territorio nacional, en lo rural y en lo urbano, en medio de las desconfianzas y las cortinas de humo que se extienden en el afán de ocultar y negar la realidad, paradójicamente se celebran 203 años de “independencia” donde el país, donde nuestros territorios y quienes los habitamos seguimos siendo esclavos de múltiples formas y dimensiones creadas y recreadas en la época de la “esclavitud” y el sometimiento del cual fuimos víctimas a manos del reino español y el solapamiento dado por la iglesia católica que para 1942 “descubren” nuestro continente y con ello nos someten a los intereses de ser sujetos y sujetas que alimentan, y sustentan la acumulación de las riquezas tanto naturales, como culturales, ancestrales y económicas a favor de unos pocos. Me cuestiono cuando este país, cuando esta sociedad se atreve a autoproclamarse independiente, cuando seguimos siendo esclavos del modelo económico neoliberal, de las políticas de guerra de los Estados Unidos, de las políticas de Desarrollo de las grandes potencias mundiales económicas y políticas, la ciudad ha sido epicentro de múltiples escenarios de celebración y apología a la falsa “independencia”, escenarios y eventos, en los cuales se hace alarde de lo militar y de la militarización, donde se le rinde culto a la necesidad de mantenernos en guerra y en la lógica de amigo-enemigo, ¡esa es la independencia que celebramos y evocamos!, la independencia que nos empobrece día a día, la que hace de nuestros campos, ciudades, de nuestros barrios, de nuestras periferias campos de guerra donde ¡50 contra 50 practican el deporte de brutos!. Es triste pensar que seguimos creyendo en el espejismo de ser “Independientes” cuando son otros y otras quienes deciden y condicionan nuestras dinámicas de vida, donde la independencia que se profesa esta soportada y sustentada en la muerte y la miseria.

Seguido a esta farsa en la ciudad se vienen propiciando debates, reflexiones, escenarios de una supuesta e intencionada concertación e interlocución desde la institucionalidad (alcaldía) con las comunidades, sectores sociales, organizaciones comunitarias y territorios, esto con relación a lo juvenil, para la muestra de ello quiero enfatizar en las ultimas y actuales coyunturas alrededor de lo joven, las políticas públicas y las dinámicas mismas de las organizaciones y los procesos sociales que van en cara de figuras significativas y/o lideres juveniles, a la par de esto se han dado situaciones puntuales y concretas de las cuales ya he hecho referencia en escritos anteriores como las “Jornadas de Vida” y la formulación y revisión del “Plan De Desarrollo de La Ciudad” del señor alcalde, donde a los jóvenes nos dieron la voz y nos negaron la decisión; nombro estas situaciones como antecedentes fuertes que generan y marcan un alto nivel de desconfianza de las juventudes hacia la “gobernabilidad-oferta institucional”.

Durante los últimos días en la ciudad se viene reuniendo un grupo casi que “selecto” el cual se ha denominado “Comité De Impulso de Ruta Para La Modificación de La Política Publica Juvenil de La Ciudad” –cuando plateo que es casi “selecto”- lo manifiesto atendiendo a que seguimos siendo los mismos y las mismas jóvenes que durante los últimos años hemos generado procesos sociales, debates públicos, reflexiones y cuestionamientos políticos en desde nuestras formas y organizaciones, y que además hemos venido impulsando prácticas y lógicas reivindicativas en el marco de Los Derechos Humanos, este proceso aunque en su intencionalidad se torna y se nombra incluyente y participativo, no lo veo ni lo siento coherente, pues las discusiones se mantienen en espacios centralizados, negándose la posibilidad de que este espacio se desarrolle en los territorios y las comunas, y que así se posibilite el escuchar las múltiples y diversas voces que hacen referencia a las dinámicas, a las formas y estilos de lo juvenil dentro de un marco pluricultural, como el que se ha venido arraigando en nuestro hacer y en nuestras cotidianidades, a la par de ello se pretende mantener y evocar de manera directa e indirecta las “representatividades” juveniles enmarcadas en las falacias de los discursos de la mal llamada “Democracia”, en este caso “La Democracia Representativa” con la cuales no se hace más que perpetuar las lógicas de la jerarquización y verticalidad en los escenarios de debate, reflexión, organización y acción-movilización juvenil no solo en la ciudad si no en todas las formas de estado que apelan a la falsa “democracia”, con ello perpetuando en los imaginarios, discursos y lógicas organizacionales que es una “Elite Juvenil” la que está negociando con la institucionalidad (Alcaldía) lo joven, las realidades que construimos y nos habitan día a día a los hombres y mujeres de esta ¡Tasita De…!. Si bien es cierto que este espacio denominado comité de impulso, es un es escenario abierto y diverso, el cual en palabras de quienes lo impulsaron –mantiene le esencia y los principios de la construcción desde la diferencia-, queda claro que es dicotómico plantear o pensar que este posibilitara un acuerdo claro y tangible entre la institucionalidad y los sectores, procesos, organizaciones sociales, juveniles comunitarias de base, sin dejar a un lado que no es solo con los actores previamente nombrados los únicos que tengan la palabra, pues hemos venido perdiendo de vista las otras voces y formas de hacer juvenil las cuales no están sujetas a ninguna forma de organización. Se ha venido planteando en la ciudad la necesidad de reconfigurar o fortalecer al “Movimiento Juvenil” ya que a partir de la interpretación que algunos amigos técnicos de la alcaldía han hecho; no hay un movimiento claro y fuerte en la ciudad, ¡No nos quedara más que ponerle personería jurídica al Movimiento Juvenil! A ver si a si nos dan la legitimidad que nos robaron y usurparon en el furor de las Políticas Públicas de Juventud. Yo por el contrario considero que urge la necesidad de que el movimiento existente y al cual se le ha desfigurado el rostro, de una mirada atrás, a esa historia que nos ha hecho y deshecho en aras de darle lugar a las voces y prácticas que hemos obviado en el afán de politizarnos unos pocos y unas pocas, incluso esto gracias a él falaz discurso de la “democracia representativa”, esa que nos ha llevado a idealizar y creer que el rol del liderazgo pasa por ser “sacro-santo”, me llama la atención ver como las diferentes representaciones de lo juvenil exigen respeto por los aportes que sus procesos hacen a los escenarios de debate, decisión y concertación; en una sola vos y en una sola subjetividad, lógica e ideología, cuando no han mostrado más que el pleno interés por desestabilizar los pocos diálogos de concertación que se tratan de reconstruir en este momento entre las estructuras que detentan el poder y las bases que han sido sometidas a ellas. Es importante nombrar además que los sectores y organizaciones juveniles hoy siguen en el sesgado pensar de querer ser la “salvación” asumiendo discursos y practicas totalmente mesiánicas, lo cual es tan peligroso como ¡La Cumbre Paraca Que Tuvo Como Sede a Medellín, Donde Se Firmo El Pacto del Fusil!  –y eso, eso ya es mucho decir- y esto termina siendo servil a las lógicas institucionales y estatales, es necesario pensarse en todo la complejidad de lo político y la política todas las dimensiones y planos de lo que enmarca a lo juvenil y a su sentir, hacer, decir, pensar y hacer.

Reto al alcalde, al concejo, a las instituciones, a la sociedad y a la ciudad a que nos permita a los y las jóvenes decir, DECIDIR y construir la ciudad que queremos y soñamos para las juventudes. Que se nos permita no solo idealizar si no también realizar y accionar. Creo que si bien este momento para unos y unas sea estratégico en la intención de construir colectivamente se debe tener la claridad de no seguir bajo el cliché de “Construir desde Las Diferencias” pues siendo objetivos, en últimas son las diferencias las que no permiten una construcción clara y concreta, Propongo que se Evoque y se Construya desde las afinidades y lo que realmente nos junta para soñarnos una ciudad justa, equitativa, desmilitarizada donde la vida valga por lo que es, VIDA.

Quienes hoy se están y nos estamos pensando el tema de la modificación de las políticas públicas de juventud tenemos como reto avanzar en temas y acuerdos claros, que colectivicen y den  plena legitimidad y lugar a las realidades y dinámicas juveniles que día a día son criminalizadas y asesinas por esta ¡la ciudad de la eterna balacera!, tendremos que pensarnos a demás principios y criterios como el de la “Seguridad Humana” haciendo referencia a que esta es una construcción de las comunidades para las comunidades donde el belicismo y la guerra no tienen cabida, tendremos que reflexionar sobre la forma en la que algunos y algunas hoy dicen ser la “Representación de lo Juvenil”, creo también a la par de ello que este espacio en el momento de tomar las decisiones concretas tendrá que estar integrado por todas las partes involucradas tanto garantes de ellas como quienes en ultimas en los territorios legitimaremos o desobedeceremos a dichos acuerdos

No se pueden seguir pensando las transformaciones sociales desde los escritorios, los ipods, las tablet, etc. Es hora de trascender la acción y la palabra juvenil, sin representatividades y sin burocracias. Con realidades, argumentos, movilización y acción llegara la transformación de las actuales condiciones de miseria y indignidad en las que nos entramos inmersos e inmersas haciéndole juego a la innovadora ciudad que ve como matan a los que hablan, piensan y hacen memoria. Es el momento de que nuestras realidades sean la base y sean la estructura de las transformaciones y cambios tanto sociales, culturales, económicas y políticas, nuestras identidades juveniles hoy claman por un lugar en la historia de esta ciudad que nos negó la posibilidad de reivindicar nuestra disidencia y nuestros inconformismos a los acomodamientos y facilismos políticos es hora de que sean las diversas expresiones de lo juvenil las que tengan no solo vos, si no también poder decisión en lo que a nostras las juventudes concierne.

“Incomodando el acomodamiento político e institucional, reivindicando realidades, deconstruyendo hegemonías”