Me dispuse a escribir esta columna en el campus Palogrande de la Universidad Nacional de Colombia de la ciudad de Manizales, donde cada semestre soy invitado a dictar mi curso de Gerencia estratégica de marketing en el programa de Especialización en Alta Gerencia.
En la última jornada de mis cursos siempre hablo de Gerencia Universitaria, tema obligado ahora que escasean los recursos para la financiación de las universidades públicas en Colombia, y particularmente en la Universidad Nacional, el buque insignia de la educación superior en nuestra nación.
Desde que Peter Drucker “inventó” el concepto de gerencia, el mundo organizacional entendió que la dirección de una gran corporación debe estar a cargo de “el mejor” prospecto que se encuentre en el medio.
Durante el presente mes de marzo la UN va a elegir su rector para el período 2018-2021 y uno de los pasos es elegir cinco candidatos de una lista de nueve inscritos, a través de una consulta entre estudiantes, profesores y egresados.
Me tomé el trabajo de describir diez consideraciones para elegir el rector de la UN, que quiero compartir con los lectores y, particularmente, con la comunidad académica de la Universidad Nacional de Colombia.
Primera consideración.
La UN se define como la universidad investigadora por excelencia en Colombia y así es reconocida por la comunidad académica internacional, según los indicadores más reconocidos. Por tanto es ideal que el rector de la UN pertenezca a un grupo de investigación categoría “A” de Colciencias.
Segunda consideración.
La UN tiene como decisión corporativa que cualquier nuevo docente deba tener titulo doctoral. En consecuencia, sería deseable que el nuevo rector tenga un título doctoral vigente al momento de su elección, como un mensaje de coherencia con sus políticas de vinculación de profesores.
Tercera consideración.
La UN es la fuente de formación doctoral en Colombia, y en la actualidad forma el 40% de los doctores en Colombia. Esto sugiere que el nuevo rector, idealmente, debería estar en capacidad de certificar la dirección de tesis doctorales en el área de su especialidad.
Cuarta consideración.
La UN le apunta al reconocimiento internacional en un mundo globalizado, donde se rompen las fronteras. Esto implica que el rector debería manejar con fluidez dos o más lenguas diferentes al idioma nativo, (en este caso el español).
Quinta consideración.
La UN es el Alma Mater de los colombianos y, por ende, es un espacio abierto a todos los campos del conocimiento. Dentro de este panorama el rector debería tener una formación multidisciplinaria, lo cual le daría un panorama más amplio para actuar con la diversidad de pensamientos que implica la institución.
Sexta consideración.
La UN es una institución de alta complejidad, según muchos puntos de vista: desde lo social, lo académico, lo geográfico, lo cultural, lo étnico, lo político, lo diverso y lo técnico. En consecuencia, el rector debe idealmente haber pasado por cargos administrativos en un Departamento, en la decanatura en una Facultad, en un cargo de nivel nacional, y ojalá en organismos externos, lo cual le daría un soporte importante para actuar desde el primer momento de su mandato.
Séptima consideración.
La UN es un espacio donde se acepta el debate y se vive la cultura de la contradicción. Esto implica que el rector debería ser una persona con apertura mental para escuchar y con habilidades de negociación.
Octava consideración.
La UN debe ser reconocida en todos los ámbitos de la sociedad, lo cual sugiere que el rector debe tener una amplia capacidad de relacionamiento con los sectores público y privado, así como con organismos internacionales.
Novena consideración.
La UN está al servicio de la comunidad y como tal le presta servicios de extensión a la misma y particularmente en la formulación de políticas públicas. Sería muy bueno que el rector hubiera navegado por estas aguas.
Décima consideración.
La UN está entre las 400 mejores universidades del mundo. Esto implica que el rector debe tener una visión internacional cada vez más marcada.
Al revisar los nueve candidatos a la rectoría de la Universidad Nacional, para el período 2018-2021, encuentro que solo hay uno que cumple con las diez consideraciones que acabo de detallar: Jorge Iván Bula Escobar.
Invito a la comunidad universitaria, que es analítica y tiene criterio para evaluar los argumentos, a que estudie las hojas de vida de los insignes candidatos y confirme si mis afirmaciones son ciertas.
Presento las evidencias de mis afirmaciones:
- Jorge Bula pertenece al grupo de investigación categoría “A” en Colciencias, en Economía, políticas públicas y ciudadanía.
No todos los candidatos cumplen con esta consideración.
- Jorge Bula tiene título doctoral en Sociología en la Universidad católica de Lovaina, en 1994.
No todos los candidatos tienen título doctoral vigente a la fecha de la elección.
- Jorge Bula ha dirigido nueve tesis de doctorado.
No todos los candidatos pueden certificar dirección de tesis doctorales.
- Jorge Bula habla fluidamente inglés y francés, y está tomando clases de mandarín.
Es el único candidato que habla más de un idioma extranjero.
- Jorge Bula tiene pregrado en Economía y una maestría en Desarrollo económico, como formación técnica; y una maestría y un doctorado en Sociología, como formación humanística.
El profesor Bula es el único candidato que tiene formación técnica y humanística.
- Jorge Bula ha desempeñado los siguientes cargos: coordinador del doctorado en Ciencias económicas, vidececano académico de la Facultad de Ciencias Económicas, decano de la Facultad, director nacional de Planeación UN, vicerrector general UN y gerente del Fondo de desarrollo económico del gobierno nacional.
Es uno de los candidatos con mayor experiencia administrativa.
- Jorge Bula es reconocido en la comunidad universitaria por su capacidad de negociación con las organizaciones sindicales. Quien lo reemplazó en la vicerrectoría general de la UN puso como condición que no participaba en el ejercicio democrático de negociar institucionalmente con los sindicatos.
Pocos candidatos tienen este nivel de experiencia.
- Jorge Bula también es reconocido por su capacidad de interactuar con actores externos de los sectores público y privado.
No todos los candidatos pueden certificar experiencia en estos asuntos.
- Jorge Bula ha participado en varios proyectos de extensión, a nombre del CID de la Facultad de Ciencias Económicas.
No todos los candidatos tienen experiencia en extensión.
- Jorge Bula: maestría en Mánchester, Inglaterra; una maestría y un doctorado en Lovaina, Bélgica, y estudios posdoctorales en Taiwan.
Es el único candidato que ha estudiado en tres continentes, (América, Europa y Asia).
Invito a los lectores a que tomen las hojas de vida de los nueve candidatos y los analicen bajo los anteriores criterios, (consideraciones). Les sugiero que le den un puntaje a cada una de las variables y las califiquen en una escala de uno a diez, y a que luego calculen un puntaje global de cada uno de ellos. Tengo la certeza de que el mayor puntaje será para Jorge Iván Bula Escobar.
Por eso invito a que la comunidad elija al rector que más méritos tiene, como lo sugería Peter Drucker el padre de la administración.
Le recuerdo a los lectores mi definición sobre Jorge Iván Bula Escobar:
Técnico, humanista y sensible.