Tropecé en el verso
Los besos que vinieron conmigo
Noches largas en que fui ausencia
Olvidé también mi nombre
Lavo mi alma con las lágrimas
Estuve sucia hasta el papel
Era real, era mi sombra
Manos quebradas retratan la fe
Desconsolado gime mi silencio
No comprende la soledad que me elije
Afligidos pensamientos
La cama vacía, es mi cuerpo joven
Han pasado ya mil muertes
Hasta la penúltima miré atrás
Consumido el encuentro
Sé que me hice sal
El gris de los colores
Veo el sol cuando me quema
Llueve adentro, me resfrío
Aborte una carta
Divago ciudades con mi gobierno estéril
Capturaron mi pluma
Me llamaron perturbada
Condenaron mi verdad, soy el exilio
Mercenario aquel «me gustas»
Sopla como viento en el desierto
Yo quería agua, vi el oasis
Seguí caminando
Soy soldado, a lo lejos me disparan
Nadie pregunta, nada me ama
Mi identidad pertenece a la patria
La patria es ficción injusta
Comentar