Ya en América solo queda una dictadura, Cuba y una o dos democracias dictatoriales, usted sabrá cuales. En Europa solo está de momento Bielorrusia y por supuesto el Estado Vaticano, que cuentan como no democracias electivas, la una por comunista y la otra por la elección vitalicia, aunque a Rusia se le acusa de democracia dictatorial, sin serlo en verdad por lo menos en relación con lo que era. En África incluso, si bien no proliferan las democracias, solo hay una monarquía absoluta en el poder en Suazilandia, y hasta la antes innombrable Suráfrica es el ejemplo de democracia deseada por todo el resto del Continente, junto con Botsuana. Hasta India en Asia es el mejor ejemplo de que se pueden tener democracias donde no hay concepto de igualdad ni riqueza, pues es la democracia más poblada del mundo y pocos piensan que todos somos iguales, todo lo contrario. Y en Asia en general ya casi proliferan democracias hoy donde antes parecía imposible tal cosa, aunque no todas son tan de mostrar como India.
China en cambio, el país que será el más poderoso del mundo en unos veinte años, todavía no es democracia y ya nadie se lo exige, y Vietnam tampoco ni Corea del Norte. Estos comunismos van a ir encontrando formas más democráticas de gobernar autoritariamente sin decretar la democracia, pero tarde o temprano llegarán a ella. En oriente próximo, sin duda alguna, van a dar ese paso en un par de décadas, a pesar del fracaso de las primaveras árabes, la crisis turca y la terrible guerra siria, o justamente por esos sacrificios y otros que padecieron. Hasta las ricas naciones petroleras donde no hay inconformidad por la opulencia, sabrán estratégicamente adaptarse a occidente en política como lo hicieron en tecnología y forma de vida. Y así sucesivamente.
Tal vez no lo vivamos quienes con medio siglo en el planeta vimos pelechar las aparentemente imposibles democracias del sur de Europa, América Latina y Europa del Este. Pero seguramente sí seremos testigos de parte de ese proceso y también de algunos ocasionales retrocesos. Creo que en el 2050 habrá que enseñarles a los niños de todo el mundo que hubo un tiempo en el cual las democracias eran la excepción y nos preguntarán que de qué estamos hablando, como cuando uno les pide a sus hijos adolescentes que por favor le pasen un casete de Mecano y el mayor pregunta que es Mecano y el menor que es casete. Algunos de esos jóvenes de entonces dirán: Sí, yo lo vi en una película, pero pensé que era ficción. Eso sucederá, exactamente como cuando hace unos años que les explicamos a los jóvenes adolescentes que la película los Juegos del Hambre era una ficción basada en una realidad que casi se cumple: el triunfo del nazismo a nivel mundial. Y hagan la prueba y verán que algunos piensan que es un chiste. Así pasará en un futuro mediano cuando la democracia sea casi universal.
Via: El Mundo.
