Hoy deseo presentarme, pero, antes de revelar mi nombre, quiero que conozcas mi historia desde que formo parte de la humanidad misma. Hasta la fecha, me han atribuido la culpa de todas las desgracias que afectan al hombre, por lo cual, este es el momento en el que deseo defenderme ante tantas acusaciones, así como expresar mi gratitud a aquellos valientes individuos que aún pronuncian mi nombre en defensa de la libertad.
Me han señalado por desencadenar guerras, mas no soy el culpable: son los Gobernantes y sus intereses los que han provocado estos conflictos. Me han señalado como el responsable de la contaminación, aunque, nuevamente, no soy yo: son los seres humanos y su consumismo irracional quienes deben asumir la responsabilidad de sus propios actos. También se me culpa de la pobreza, pero antes de mi existencia, la humanidad se limitaba al trueque o al saqueo como sus únicos medios de supervivencia; desde que los seres humanos comenzaron a utilizar mi sistema, he logrado sacar de la pobreza a más del 80% de la población mundial, que antes no tenía acceso a necesidades básicas como agua potable, un techo donde dormir o una canasta básica de alimentos.
Hoy en día, gracias a mi presencia, cada vez más personas tienen la oportunidad de forjar su propio camino sin importar su origen étnico, social, racial, religioso u otros factores que puedan considerarse “diferentes” de los demás. No discrimino en función de estos factores, y si puedes producir y contribuir, puedes triunfar en mi sistema.
Sin embargo, un grupo de “iluminados” considera que su consumismo desenfrenado y falta de responsabilidad en su entorno recaen sobre mí. Cuando se ven atrapados en la vorágine de estos, culpan a mi nombre: capitalismo. Sí, este es mi nombre, el que muchos han odiado sin conocer, ¡hoy me presento ante ti! Este odio hacía mi se ha convertido en un pretexto perfecto para promover ideas que amenazan la libertad de elección, como el estatismo, que es la principal herramienta de mi némesis: el socialismo, para imponerse en la sociedad.
A pesar de los vastos ejemplos de países en los que los sistemas de economía planificada –como el socialismo– no han funcionado, algunos siguen creyendo que la culpa de los monopolios, los oligopolios y el mercantilismo son gracias a mí, cuando en realidad, para que yo pueda existir, debe haber un libre mercado, competencia justa y, sobre todo, respeto irrestricto por la propiedad privada, cosas sumamente limitadas en los sistemas con Gobiernos colectivistas. Como prueba, pueden leer el Manifiesto comunista, en donde uno de sus puntos propone “abolir la propiedad privada”.
Es importante aclarar que aquellos que otorgan privilegios y beneficios a unos pocos sobre los demás, son los que tienen el poder para conceder permisos y licencias empresariales en países con Gobiernos intervencionistas, como es el caso de México o Colombia. Es por ello que el Gobierno negocia a quienes otorgará beneficios a cambio de algún tipo de favor para el mandatario de turno.
Ahora que sabes que soy yo, capitalismo, quien te está hablando, te ruego que ayudes a abrir los ojos de más personas que buscan una vida mejor sin sacrificar la libertad de los demás; ejemplo de ello, son los millones de inmigrantes que han tenido que dejar sus países en busca de mejores oportunidades en otros con economías más abiertas y con menos intervención estatal. Ayúdame a que en tu propio país creamos en una sociedad más libre, donde todos tengan la oportunidad de alcanzar sus sueños y tomen decisiones por sí mismos. No te dejes engañar por las retóricas de igualdad: la igualdad no es deseable, ya que todos los seres humanos son diversos y buscan mejorar constantemente; siempre habrá alguien por encima o por debajo de ti, porque es parte del estar vivo, pero lo crucial es que tengas la libertad de decidir hasta dónde quieres llegar.
Recuerda que mi objetivo es combatir la pobreza y, cuanto más me lo permitan, más personas podrán disfrutar de un sistema que hasta ahora ha sido el mejor medio de intercambio pacífico de bienes y servicios. No afirmo ser perfecto, mas no he causado las enormes cifras de muertes que el socialismo ha dejado en su estela con sus diversas dictaduras. Pese a esto, soy a quien más temen aquellos que aún no me conocen verdaderamente. Por tanto, te insto a que busques datos y evidencias de los índices de libertad económica a nivel mundial, y descubrirás que los países con economías más libres son los que presentan menos pobreza y mayores oportunidades.
Citando a Ayn Rand:
“El capitalismo ha sido el único sistema de la historia en el cual la riqueza no se ha adquirido mediante el saqueo, sino mediante la producción; no por la fuerza, sino mediante el comercio. Es el único sistema que ha defendido el derecho de los hombres a sus mentes, a su trabajo, a sus vidas y a sí mismos”.
Así que, te invito a reflexionar sobre estas palabras y a investigar por ti mismo. El capitalismo no es la causa de todos los problemas, sino una oportunidad para un mejor futuro basado en la libertad y la elección personal.
Today I wish to introduce myself, but before revealing my name, I want you to know my story since I was part of humanity itself. Till the date, I have been unfairly blamed for all the misfortunes that afflict the people, whereby, this is the moment I choose to defend myself against these numerous accusations, as well as to express my gratitude to those courageous individuals who still invoke my name in defense of freedom.
I have been accused of triggering wars, but I am not the perpetrator: it is the rulers and their interests that have incited these conflicts. I have been identified as the culprit for pollution, although, again, it is not me: it is humans and their irrational consumerism who must shoulder the responsibility for their own actions. I am also wrongly accused of causing poverty, but before my existence, humanity was restricted to barter or plunder as their only means of survival; since humans began adopting my system, I have succeeded in lifting over 80% of the global population out of poverty, granting them access to necessities like clean water, a roof over their heads, or a basic food supply.
Today, thanks to my presence, more and more people can forge their own path, regardless of their ethnic, social, racial, religious, or other factors that may be considered “different” from others. I do not discriminate based on these factors, and if you can produce and contribute, you can thrive within my system.
Nevertheless, a group of people wrongly attributes their unrestrained consumerism and lack of responsibility to me. When ensnared in the whirlwind of these, they blame my name: capitalism. Yes, this is my name, the one that many have reviled without truly understanding, ¡today I stand before you! This hatred toward me has become a perfect pretext for promoting ideas that threaten freedom of choice, such as statism, the primary tool of my nemesis: socialism, to establish dominance in society.
Despite the vast examples of countries in which planned economy systems –such as socialism– have not worked, some continue to believe that the fault of monopolies, oligopolies, and mercantilism are due to me, when, for me to exist, there must be a free market, fair competition and, above all, unrestricted respect for private property, things that are extremely limited in systems with collectivist governments. As proof, you can read The Communist Manifesto, where one of its points proposes “abolishing private property.”
It is crucial to clarify that those who grant privileges and benefits to a select few over others are the ones with the power to bestow permits and business licenses in countries with interventionist governments, as is the case in Mexico or Colombia. That is why the government negotiates whom they will grant benefits to in exchange for favor to the current leader.
Now that you know that it is I, capitalism, who is speaking to you, I implore you to help open the eyes of more people who seek a better life without sacrificing the freedom of others; an example of this are the millions of immigrants who have had to leave their countries in pursuit of better opportunities in places with more open economies and less government intervention. Help me so that in your own country we create a free society, where everyone has the chance to pursue their dreams and make decisions for themselves. Do not be deceived by rhetoric of equality: equality is not desirable because all human beings are diverse and constantly seek improvement; there will always be someone above or below you, because it is part of being alive, but what is crucial is that you have the freedom to decide how far you want to go.
Remember that my goal is to fight poverty, and the more I am allowed to do so, the more people will be able to enjoy a system that until now has been the best mean of peaceful exchange of goods and services. I do not claim to be perfect, but I have not caused the immense death tolls left by socialism with its various dictatorships. Despite this, I am the one most feared by those who still do not truly know me. Therefore, I urge you to seek data and evidence of global economic freedom rankings, and you will discover that countries with more free economies have less poverty and more opportunities.
Quoting Ayn Rand:
“Capitalism has been the only system in history in which wealth was not acquired by looting, but by production: not by force, but by trade. It is the only system that has defended the right of men to their minds, their work, their lives, and themselves”.
So, I invite you to reflect on these words and to investigate for yourself. Capitalism is not the cause of all problems, but an opportunity for a better future based on freedom and personal choice.
Notas/Notes:
- SOBRE LA OBRA EN EL COLLAGE DE LA IMAGEN DESTACADA: Warren, J. (2021). La libertad vive [Óleo sobre lienzo]. Catálogo de Bellas Artes. https://jimwarren.com/portfolio/liberty-lives/. | ABOUT THE WORK IN THE COLLAGE OF THE FEATURED IMAGE: Warren, J. (2021). Liberty Lives [Oil on canvas]. Fine Art Catalog. https://jimwarren.com/portfolio/liberty-lives/.
- Este ensayo apareció por primera vez en nuestro medio aliado El Bastión. | This essay appeared for first time in our ally media El Bastión.
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