La política colombiana este año se ha movido en pro de rifirrafes sobre la elección del presidente, pero, sesgada en una ilusión de cambiar una sola persona, no todo un esquema Estatal, el Estado colombiano no es solo el ejecutivo, es también el congreso, lo judicial, y los entes de control, necesitamos como sociedad colombiana entender que este 29 de mayo es el último día del año para lo cual necesitamos ser conscientes de preguntarnos mientras marcamos esas X qué significan para nosotros y los siguientes 4 años.
Para esto también hay que informarse, o sea tomar partes para poder tener conocimientos, estas elecciones tienen la posibilidad de cambiar la historia, haciendo apología a que tenemos herramientas tecnológicas, y el acceso para conocer a cerca de las personas y sus propuestas.
Fajardo, Petro y Federico son las personas que importan en todo esto, porque en el fondo son los “elegibles” por la mayoría, el problema se basa en que la construcción política de este país, resolverá o no de fondo la situación de pobreza extrema, grupos al margen de la ley y la desigualdad social que azota el país en toda su estructura.
Por eso los invito a que hagan veeduría, fomenten el debate, no se excluya de opinar, solo porque alguien no le vaya a cambiar de parecer, sino porque eso involucra que podemos ser abiertos a discutir de fondo y con argumentos, algo que en nuestro país hace años no lo hemos podido visibilizar por culpa del populismo, la demagogia y la desinformación. Ábrase a dejarse hablar como alguna vez dijo el filósofo Gadamer sobre la hermenéutica, y comprenda desde la búsqueda de la verdad, no por simplemente generar más eufemismos en el país.
Comentar