“El problema en el país, es que, a pesar de la existencia de herramientas jurídicas para propender por la participación en el medio ambiente, hoy somos por vergüenza el país con más líderes ambientales asesinados”
Esta es una pregunta que sin dura deberíamos hacernos todos los colombianos, porque, es quizás un tema que se pone de moda en las discusiones y debates, pero terminan siendo propuestas que poco se materializan y por el contrario se siguen afectando los recursos ambientales.
Analizando un poco el panorama, recuerdo que en el año 2016 se le otorgaron derechos al río Atrato decisión que aplaudo y me parece que está bien, pero lo importante de ese fallo es que creo un precedente jurisprudencial y por ende después de ese, varios ríos han tenido esas declaratorias de ser sujetos de derechos como el Magdalena, Cauca, Pance, Quindio, Coello, Cobeima y Cocora.
Ahora como si declarar sujetos de derechos a los ríos no fuera poco, se han declarado también como tal, a ecosistemas la amazonia es uno de ellos; pero al punto que voy, es que desde luego está bien, que se ordenen desde los estrados judiciales la protección y restauración de estos ecosistemas; repito es una idea que comparto, pero lo que me preocupa, es que si me pongo en los zapatos del juez que tomó esa decisión, debo hacer un examen riguroso del caso, antes de declarar una cosa, como sujeto de derechos, ya que en principio solo los humanos tenemos derechos, lo que me hace pensar que esos ríos y ecosistemas que han sido hasta ahora declarados sujetos de derechos, no es por entrar a la moda; sino que en verdad se encontraban en un estado tan crítico de vulnerabilidad, contaminación y deterioro, que la única forma de protegerlos es por medio de una vía judicial con una orden, que garantice su restauración.
Sin embargo, y a modo de paréntesis dejo en claro que mientras escribía estas líneas, indague sobre que avances ha habido respecto a la materialización de estas medidas de protección y restauración del ambiente y es lamentable encontrar que es muy poco lo que se ha realizado al respecto.
Por otro lado, tenemos el artículo 79 de la Constitución Política, que ordena “Todas las personas tienen derecho a gozar de un ambiente sano. La ley garantizará la participación de la comunidad en las decisiones que puedan afectarlo. Es deber del Estado proteger la diversidad e integridad del ambiente, conservar las áreas de especial importancia ecológica y fomentar la educación para el logro de estos fines”.
Como Abogado que soy, me gusta analizar frase a frase una norma, y hablar de derecho ambiental es fundamental estudiar ese artículo 79 de la carta, por eso basado en esa norma respondo a la pregunta, ¿Y qué hay del medio ambiente en Colombia?
Desde luego no hay objeción en que se tenga como derecho el ambiente sano, incluso la Corte Constitucional, ha resaltado su importancia, debido a la conexidad que tiene con otros derechos.
Respecto a la participación de la comunidad en las decisiones ambientales, esta se encuentra regulada mediante varios mecanismos de participación tales como las audiencias públicas establecidas en la ley 99 de 1993, la consulta previa establecida en la ley 21 de 1991, se tiene también las veedurías ciudadanas que habla la ley 850 de 2003, y esa participación se puede exigir por medio de acciones constitucionales como el derecho de petición, la tutelas, acciones populares, de grupo y de cumplimiento.
El problema en el país, es que a pesar de la existencia de herramientas jurídicas para propender por la participación en el medio ambiente, hoy somos por vergüenza el país con más lideres ambientales asesinados, por lo que no cabe duda en que acá al que participa en esa toma de decisiones y no está de acuerdo con ellas, lo van asesinando para que no interfiera, dije anteriormente que “por vergüenza” porque no hay carta de presentación en que valga más algún proyecto de explotación o cultivos ilícitos, que la misma vida de un ser humano
La parte interesante de ese artículo 79 de la Constitución Política viene cuando habla de los deberes del estado con el medio ambiente y acá cabe el interrogante para que cada quien se responda ¿será que el gobierno, si está protegiendo al segundo país más biodiverso del mundo?, en mi opinión personal debo decir que nuestra riqueza ambiental es envidiable para cualquier estado, y nunca voy a entender cómo el gobierno piensa en destruirla, impulsando proyectos de Fracking y/o megaminería, si se aplicara solamente esa pequeña frase de la Constitución “Es deber del Estado proteger la diversidad e integridad del ambiente” sería suficiente para que no se adelantaran esas actividades en nuestro territorio, vale aclarar que no estoy en contra del empleo, el desarrollo o el uso de los recursos naturales, solo pienso que este se debe realizar de las maneras en que haya un menor daño ambiental, y se ha acreditado que tanto el fracking como la minería a gran escala, hacen daños irreversibles.
Respecto a la conservación de las áreas de importancia ecológica tengo que decir que si aplicáramos esa norma no habría necesidad de estar pensando en realizar actividades mineras y agropecuarias a gran escala, en los páramos colombianos, pero hay que aclarar que hay gente que por milenios ha realizado actividades agropecuarias y mineras de subsistencia, en esos lugares, cuyo impacto ambiental está en un grado mucho menor, sin embargo hay que proteger esos ecosistemas que desde luego son áreas de importancia ecológica al ser las fábricas de agua que abastecen las grandes ciudades además de tener especies endémicas en fauna y flora.
Culmina ese artículo hablando del fomento de la educación, la cual también se puede poner en tela de juicio, porque es curioso encontrar el agua, tierra y aire en estado de contaminación, es decir se puede estar educando pero no aplicando, sin embargo no todo es malo, hay dos cosas grandiosas la primera es que mucha gente se está uniendo para proteger el medio ambiente, han surgido nuevos activistas en estos temas, varios de ellos amigos míos, que me motivaron a escribir estas líneas y que soy consciente que después del dato de la inseguridad que sufren estos líderes, es una tarea muy difícil pero loable porque es un ámbito en el que se trabaja para todos.
La segunda es que lo bonito del medio ambiente es que nos puede unir a todos como país y eso es lo que se está viendo respecto al Páramo de Santurbán en Santander que masivamente la gente ha salido a marchar y a levantar sus voces de protesta por redes sociales, es una cultura que aplaudo y que está empezando a crear una conciencia respecto a la conservación y buen uso de los recursos naturales.
Comentar