He tenido la fortuna de trabajar siempre mirando las montañas, Medellín y Antioquia me han recibido con cariño y he dado lo mejor de mí para poder dejar ese granito de arena en cada uno de los territorios donde he estado: San Cristóbal y San Sebastián de Palmitas con los Centros de Desarrollo Empresarial Zonal y el Suroeste de Antioquia con el Banco de las Oportunidades.
Una labor que si bien se enfoca en lo económico, lleva consigo un componente social, lo cual permite conocer el territorio y sus necesidades, esas que pocos desde su oficina en La Alpujarra logran percibir.
Medellín cuenta con 5 corregimientos (es extraño, pocos lo saben) que suman el 71% del territorio, excluyendo de ellos la población urbana encontramos una Medellín Rural desconocida por el ciudadano de a pie, esa despensa de alimentos que tenemos y que presenta inmensas necesidades: Agua potable y saneamiento básico, salud, vivienda digna y asistencia técnica agropecuaria pertinente.
Si “Medellín cuenta con vos”, espero también que cuente con el campo, sin invisibilizarlo del mapa y reconociéndolo como un territorio con necesidades específicas, diferentes a las de la ciudad. No podemos repetir, ni permitir lo que pasó con la invitación a la construcción del Plan de Desarrollo, en la que por el afán, terminaron metiendo en el mismo saco a todos los territorios, olvidan la construcción desde el -enfoque diferencial-.
Esa labor de dignificación y resignificación de lo rural parte del conocimiento del territorio. Ojalá no se quede en buenas intenciones como se hizo en campaña, que se pase a las acciones para poder decir con orgullo que Medellín es ciudad y campo a la vez.
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