Un excelente actor se reconoce por hacer apasionar al público, interpretar tan bien a un personaje de ficción consiguiendo el odio o el amor del espectador. En el caso de Alberto León Jaramillo se destaca su personaje en “Yo soy Betty la Fea”, un villano con gestos cómicos y desagradables, que en aquel entonces hizo vibrar a los televidentes.
Y su frase inolvidable en spanglish: “señorita, la espero en my office right now”
Nació en Buenos Aires en 1960, a los dos meses de su nacimiento sus padres volvieron a Colombia, creció en Medellín.
Los primeros años de su infancia fueron muy tranquilos. La relación de Alberto con su madre fue difícil hasta que se dio cuenta de la importancia de tenerla.
Con el tiempo el actor fue teniendo independencia, aunque era muy difícil conseguir trabajo en Bogotá, descubrió que el teatro era lo suyo.
Gracias a su buen talento y dedicación, Alberto ha estado en grandes producciones como, Los Reyes, Romeo y Julieta, Café con Aroma de Mujer, Los pecados de Inés de Hinojosa, Dos rostros y una vida entre muchas más.
Estudió actuación y arte dramático y lo que pocos saben es que es un gran payaso callejero.
Le encanta el tango desde pequeño, lo escuchaba y recuerda la radiola de su padre.
En Al Poniente lo entrevistamos y descubrimos que es un hombre tranquilo, de excelente dicción, palabras sabias y respuestas cortas:
¿Dónde y con quién vive actualmente?
En l actualidad vivo en Chía, la ciudad de la luna, con mi esposa quien es mi claridad meridiana, si ella es Meridiana Sandoval. Ella ha sido muy importante para mí, hemos estado casados durante 26 años, en una unión maravillosa y tenemos un maravillosos hijo llamado Lucas.
Y ella lo es todo para mí lo es todo, vibramos al unísono, porque tenemos muchos gustos en común y nos amamos.
¿Qué proyectos está desarrollando este 2023?
Este año estamos desarrollando una película y desarrollaremos dos obras de teatro.
¿Lleva a cuenta de los papeles que ha interpretado?
No tengo una lista de los personajes que he hecho, pero todos, que han sido muchos, me han dejado una enseñanza, un mensaje muy importante para mi vida.
Hace unos meses lo vimos con el cabello largo ¿Qué pasó?, ¿por qué se lo cortó?
Me corté el cabello porque después de cuatro años de llevarlo diario, quise cambiar simplemente por ese gusto de los diferente de lo nuevo.
¿Qué papel considera ha sido muy significativo para su carrera? y ¿la escena más difícil?
Mi papel más importante sin duda Saúl Gutiérrez, en Betty la Fea, el jefe del personal de ECOMODA.
La escena más difícil fue donde un grupo de mujeres ataca a los ejecutivos de ECOMODA, les quitan todo y los dejan en ropa interior.
Yo quedé atado a la cabecera de la cama, esposado. Todo lo que fue, escaparnos, escurrirnos y llegar hasta donde nuestra esposa fue divertido y muy fuerte.
¿Cómo cree que este papel sería tomado en esta época de lo políticamente correcto?
Creo que daría mucho de qué hablar, sobretodo por su trato a los subalternos.
¿Siente que el personaje de Betty la Fea lo encasillo?
No creo que me haya encasillado, más bien creo que demostré que los villanos cómicos me van muy bien.
¿Cuál ha sido la mejor época de su carrera? y ¿Qué época que ha sido la más difícil en su carrera?
Tuvimos un momento muy difícil después de las grabaciones de Betty en los años 2002, 2003. Puede sonar un poco contradictorio, pero así fue.
Y nuestro mejor momento se ha ido desarrollando desde 2010, aún no ha terminado, y no lo hará.
Como un excelente docente de la actuación, ¿Cuál es el consejo que no puede faltar para sus estudiantes?
El consejo que puedo dar a mis alumnos es que así estén en un ejercicio escénico, en casting, presentando una obra de teatro o en un estudio de grabación. Hagan lo que hagan, deben disfrutarlo al máximo y con toda sinceridad.
Durante una entrevista en el programa Bravísimo, junto con su esposa Meridiana, hablaron de su relación, que es un “Amor de Feria”, pues se conocieron en una Feria del Libro y ella contó que la chispa fue inmediata:
“Asistimos a una fiesta de despedida de la Feria del Libro y a los 8 días estábamos viviendo juntos, a los dos meses esperamos a nuestro hijo, ósea que nosotros nos conocimos durante la gestación.
Pero hay un detalle muy importante, mi sensación era que lo conocía de toda la vida. Era como que nos conocíamos de toda la vida y nos teníamos que encontrar”.
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