En 2013, en Estados Unidos, se calculó que para 2023 habría 1 millón 400 mil trabajos en informática sólo en ese país, y sólo unos 400 mil graduados calificados para dichos trabajos. El mismo año, en Colombia, se calculó que sólo había 14 mil graduados con estas características, mientras que la demanda anual era de 45 mil.
Si caemos en la típica -y completamente errónea- definición de que la Ingeniería en Sistemas e Ingeniería de Software se dedican únicamente a la reparación de computadoras o creación de videojuegos, creo que no es muy difícil comprender por qué hay semejante escasez a nivel global. Sin embargo, si más personas conocieran la verdadera trascendencia que tienen estas carreras, su función vital en la evolución del mundo, las cosas cambiarían de manera drástica; las nuevas generaciones se irían interesando más y más por esta materia tan importante. Por eso que consideramos fundamental conocer un poco más del tema, y para ello, nos hemos reunido con quienes lo experimentan desde adentro.
Gino Velásquez, Renzo Rueda, Cristian Percca y David Pineda tienen entre 22 y 24 años, que trabajan en Applying Consulting y aspiran a crear un futuro mejor en base a lo que saben y a lo que están aprendiendo en su carrera. Para ellos, la Ingeniería de Software poco tiene que ver con reparar computadoras. Tampoco nos hablan de complicados algoritmos; por el contrario, nos hablan de la vida cotidiana, de los problemas del usuario común y del empresario. Para ellos, el desarrollo de software trata sobre el día a día; sobre dar soluciones aplicando innovaciones tecnológicas.
Nuestra pregunta base al juntarnos con ellos fue: “¿Por qué aprender a desarrollar software?”
El primero en intervenir, es Cristian, un muchacho de lentes y mirada curiosa: “Lo que me motivó a estudiar Sistemas fue el poder mantenerme a la vanguardia de la tecnología, poder entender el funcionamiento de algunos dispositivos, poder incluso crearlos, y así mejorar o facilitar la vida de las personas”. A esto añade: “lo más interesante de mi carrera es poder realizar la automatización de procesos y así poder reducir costos o aumentar ganancias a una empresa, además de poder brindar soluciones de todo tipo.”
Si tuviese que describir la personalidad de Cristian, le llamaría “el hombre de negocios del equipo”, pues siempre se expresa más como un empresario que como un técnico. Le interesa la tecnología, sí, mucho; siente que el futuro viene por ahí, pero en el fondo lo que más le atrae es el hecho de desarrollar una empresa importante -fuese de lo que fuese-. En la tecnología y su amplio crecimiento, ha encontrado su rubro ideal.
En contraste, Renzo es una suerte de visionario, un soñador futurista, cuyo entusiasmo y creatividad desbordan en cada una de sus palabras. Porque sí, para ser desarrollador de software necesitas mucha creatividad, según nos explica él, porque se trata de crear algo desde cero. “La tecnología avanza muy rápido y se puede aplicar a cualquier entorno con el fin de simplificar las cosas y obtener mayores beneficios. Te da el poder de ser partícipe de la evolución. El internet ha sido uno de los mayores aportes que ha habido. Los lenguajes de programación son otro gran aporte. Con esto se desarrollan los diversos programas de computadora o las páginas web, por mencionar algunos ejemplos.” Aprendiendo el lenguaje de la programación, en otras palabras, uno puede, desde un escritorio, aparecer algo que antes simplemente no existía; eso es algo que Renzo ha aprendido de Mark Zuckerberg, el personaje al que admira y al que recuerda bastante en sus modos de hablar. “Admiro a Zuckerberg porque revolucionó el campo de las comunicaciones, e incluso el de los negocios a través de la informática. Es uno de los mejores ejemplos de creatividad que existen. Si quieres ser ingeniero, definitivamente, tienes que ser creativo.”
“Yo considero que un desarrollador de software también debe ser crítico, detallista, capaz de adaptarse a los cambios y de trabajar en equipo” -interviene Gino. Él parece ser el más minucioso, y nos explica que, en este campo, y más en la actualidad, las tecnologías evolucionan a la velocidad del rayo; por eso es necesario adaptarse y encontrarse en aprendizaje continuo. “No puedes dejar de aprender, ya que las tecnologías avanzan y cambian constantemente. De hecho, para ser un buen desarrollador de software, te tiene que gustar investigar.”
Por su parte, David concuerda con sus compañeros en que, para un buen desarrollo, el ambiente de trabajo es fundamental. Lo que más le gusta de su centro de trabajo, es la libertad que existe para expresar sus ideas y el buen trato que tienen sus jefes para con el equipo. “Ambos están muy preocupados porque nos sintamos cómodos, por explicarnos las cosas que no entendemos, y siempre están dispuestos a escuchar propuestas distintas. Eso es básico. En otros lugares a veces no te dejan brindar la mejor solución porque quieren que hagas las cosas así o asá. Lo interesante de Applying es que nuestros jefes también sienten que pueden aprender de nosotros.” Asimismo, añade que la inspiración de un buen líder influye mucho en la motivación laboral; de hecho, una de las personas que más le motivó a seguir la carrera de ingeniería, fue un profesor de computación que tuvo en la secundaria. “Él abrió una computadora en clase, y yo me quedé sorprendido cómo a partir de esa caja se creaban los programas e incluso los juegos que veíamos en la pantalla”.
Cuando les preguntamos acerca de lo que diferencia a un buen profesional de en materia software de uno malo, sus respuestas son bastante variadas: uno habla del análisis, el otro de la creatividad; no pasan por alto la parte ética -sin embargo-. “Las herramientas que aprendemos a utilizar podrían aplicarse para realizar fraudes informáticos u obtener información ilícita” -señala Gino-. “Pero un buen profesional usa esta serie de herramientas para el bien de la población, ayudando a mejorar la calidad de vida de las personas”. Esta es la parte que nos ha parecido más interesante, ya que nos deja claro que el deber de un Ingeniero en Sistemas, es siempre trabajar por el bien de la humanidad.
Ha sido una tarde bastante provechosa en compañía de estos chicos entusiastas que nos han contado un poco sobre las bases y la importancia de su profesión. Ahora ya sabemos un poco más sobre de qué va el desarrollo de software. ¿Te animas a practicarlo?
[…] https://alponiente.com/por-que-estudiar-desarrollo-de-software/ […]
[…] https://alponiente.com/por-que-estudiar-desarrollo-de-software/ […]