Informa Associated Press, editado por Al Poniente.
SAO PAULO (AP) — Los índices de popularidad de las presidentas de Brasil y Chile, que llegaron a subir hasta las nubes, han caído estrepitosamente debido a escándalos de corrupción que han afectado a sus gobiernos de centroizquierda, según dos encuestas difundidas el miércoles.
Apenas el 12% de los brasileños encuestados consideraron que el gobierno de la presidenta Dilma Rousseff realizaba un trabajo «excelente» o «bueno», mientras que 64% lo calificaron de «malo» o «pésimo», de acuerdo con un sondeo de la prestigiosa encuestadora Ibope. La encuesta, realizada entre el 21 y el 25 de marzo, abarcó a 2.002 personas y tuvo un margen de error de 2 puntos porcentuales. La popularidad de Rousseff ha sufrido los embates de un enorme caso de corrupción en la petrolera estatal Petrobras, así como por la caída de la economía. El índice de popularidad de la mandataria brasileña sufrió una caída de 28 puntos desde diciembre de 2014, poco después de su reelección.
Mientras tanto en Chile, el índice de aprobación de la presidenta Michelle Bachelet cayó a su nivel más bajo debido a un escándalo de corrupción en el que estuvo involucrado su hijo. El hijo y la nuera de Bachelet están acusados de utilizar su influencia para obtener un préstamo de 10 millones de dólares, aprobado al día siguiente de que ella ganó la elección presidencial en diciembre de 2013. Según la encuesta del miércoles, el índice de aprobación de Bachelet cayó 8 puntos a 31% en marzo comparado con febrero, el nivel más bajo tanto en su actual presidencia como en la de 2006-2010. La encuesta fue realizada por Gfk Adimark del 5 al 27 de marzo, con 1.258 entrevistados. El margen de error es de 2,8 puntos. Bachelet inició su actual período con un índice del 54%. Era del 84% cuando finalizó su presidencia anterior.
También en Argentina, los constantes escándalos de corrupción y el mal manejo de la economía ha llevado a una crisis en el respaldo popular a Cristina Fernández de Kirchner, en vísperas de unas elecciones presidenciales en las que los opositores Mauricio Macri y Sergio Massa podrían superar al candidato del oficialismo kirchnerista, Daniel Scioli.
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