“No es que queramos vivir así, es que queremos vivir aquí”
Rene Pérez, Calle13”- Vamo a portarnos mal
Es la primera pregunta que me surge cuando le doy un vistazo a la coyuntura y a los últimos acontecimientos públicos en materia de las decisiones políticas que en Medellín se toman para construir y mantener el “Desarrollo” que hoy padecemos.
En los últimos días el POT Medellín se convirtió un tema que está marcando tendencia no solo en las redes virtuales si no en las agendas de discusión y “preocupación” de algunos sectores de la ciudad y la sociedad e incluso que está movilizando opiniones públicas de la comunidad y la prensa internacional. El día 27 de octubre del presente año, en la “Meca” del control y decisión política de la ciudad de Medellín, el Concejo, se dio nuevamente un “show” mediático y político con relación a las dinámicas de la decisión y lo que hasta hoy quienes ostentan el poder, llaman “Democracia”. Claramente expresado en el proceso de la aprobación del nuevo POT de la ciudad y en donde en ultimas quedan consagrados los inamovibles proyectos de desarrollo y proyección de los territorios en su organización, ordenamiento geoespacial y en las dimensiones de la Participación Ciudadana. Con respecto a este último aspecto, hay que mencionar que en la máxima expresión paisa… ¡desde el desayuno se sabe que será el almuerzo! quedo demostrado en la forma criminalizadora como se dio la deliberación en ese escenario, muestra que así es como será tratada la organización social, comunitaria, las comunidades y quienes construyen liderazgo comunitario en los diferentes territorios con relación a la implementación ejecución del POT, entre muchas otras políticas de estado.
¡Es vergonzoso ver como Medellín se atreve a posar de innovadora, incluyente, solidaria y sostenible mientras la dignidad de su niñez la trasviste de miseria! y no solo a su niñez, sino también a las mujeres y hombres, a los y las jóvenes que la habitan, es claro que las dinámicas decisión de esta ciudad están sujetas a generar garantías de sostenibilidad y hegemonía de la concentración y la especulación de las tierras y la vivienda por los grandes grupos económicos y constructores de la ciudad. Cuando Medellín se ha trazado como fin, sembrar cemento y mantener fortalecida así la economía de unos pocos, no se puede pretender obviar y quienes están en las esferas del poder administrativo y económico de esta “tasita de plata” no pueden seguir negando que obedecen a intereses que no propenden por la dignificación de la vida en Medellín, sino por la perpetuación de la pobreza, la miseria y la concentración de la riqueza y el poder por parte de unos cuantos.
¡Vuelve y juega! La administración municipal y quienes aquí toman las decisiones siendo elegidos por una pequeña masa y una ausencia total de CULTURA POLITICA TRANFORMADORA, hacen burla de la organización social, comunitaria y delas comunidades en general donde con el enganche y la premisa del refrigerio, la gorra y el almuerzo marca “Alcaldía” se mantiene la idea de aquí me permito dar unas cuantas píldoras para la memoria de esta ciudad y el autocuestionamiento de esta sociedad. Para el año 2012, nos enfrentamos nuevamente a los romanticismos de la “Participación Democrática-Viciada” en la plaza de la revisión, modificación y aprobación de lo que sería el Plan de Desarrollo Municipal de la administración del señor Aníbal Gaviria, el cual primeramente no logra recoger y pragmatizar en sus dimensiones los medios para que dicho plan pudiera ser una realidad, seguido a esto se caracterizó por ser un escenario donde la palabra primo pero la DECISIÓN careció de poder y de incidencia comunitaria y popular, la segunda píldora esta diagnosticada para las “Jornadas de Vida” o más bien ¡Subastas de Vida y Dignidad!, donde al mejor postor se vendían y se tranzaban entre los liderazgos gamonales que han imperado en las comunas y que han hecho de las necesidades de las mismas un fortín para acaparar recursos. Y la última, pero no menos importante es la que a la juventud le atañe, hago referencia puntual a todo lo que ha sido el proceso de la revisión y modificación de la Política Publica de Juventud, vergonzoso por demás para algunos y algunas que en esta ciudad con tranquilidad y convicción nos reconocemos como DETRACTORES y DETRACTORAS de la política con aires de mafia que hoy por hoy se pasea por esta ciudad y donde una vez más queda consagrada la voluntad política de los terratenientes y “Señores” de la política paisa.
En esta lógica la situación se torna más vergonzosa cuando en la palestra de la deliberación algunos que posan de “Decentes Concejales” pelaron el cobre y sacaron a relucir el concepto que realmente tienen de las comunidades que son sistemáticamente empobrecidos, unos retando a líderes de las comunidades a “salir a arreglar las cosas como los hombres”, otros como el concejal que a su apellido honores hace, Bernardo Alejandro Guerra tacha y señala a las organizaciones sociales y comunitarias que durante más de 25 años en zonas como la Nororiental vienen llevando a cabo procesos de organización y movilización de cara a la transformación y superación de las actuales realidades y condiciones de miseria a las que se nos ha condenado desde la democracia, de ser “poderes oscuros, de ser seudo comunistas” sumado a esta aseveración vulgar y desproporcionada del concejal se suman comentarios que resonaron en el recinto del concejo el día de la aprobación del plan, los señalaban a las comunidades allí presentes de ser guerrillera. Cuando veo la imagen del ESMAD “protegiendo” la “meca del control y la decisión administrativa y política” de la ciudad de las expresiones y las voces que desde las realidades que se movilizaron ese día a este espacio para sentar un precedente con relación a nuestra negativa e inconformidad con este “PeOTe”, me pregunto ¿Quién nos gobierna realmente? ¿Para quién sirve el actual alcalde? ¿En manos de quien está el concejo de Medellín? ¿Cuáles son realmente los rostros que hoy imponen en Medellín un modelo de ciudad que no hace más que perpetuar la pobreza, la guerra y la miseria? ¿Para quién se está construyendo esta “pequeña de Detroit”?.
Vale la pena resaltar lo que el Columnista del periódico El Espectador, Aldo Cívico, en su columna del pasado 4 de noviembre titulada “POT y estilos de gobierno” plantea en paralelo de las democracias y las formas de gobernanza sustentado en la imagen de la deliberación y validación del POT en la ciudad de Palermo, conocida por ser epicentro de lo que hoy conocemos y padecemos como mafia, es necesario separar a los poderes y las mafias de la política de la construcción de liderazgos asertivos que permitan una gobernabilidad que posibilite otras condiciones para la ciudad en vías de dignificarse a sí misma en sus demagogias de innovación y calidad de vida.
Repudio rotundamente el discurso del desarrollo que nos borró la memoria, que desplazo la vida, expropio la dignidad y vulnera de manera sistemática los Derechos Humanos para alzar sus pilares y muestras explicitas de concentración y acumulación de capital y poder político sobre las realidades de las comunidades e identidades territoriales. No queda más que decir que el POT, como instrumento de planeación del suelo y el territorio es un arma que atenta contra nuestras experiencias y apuestas por una vida y una sociedad digna.
Doy lugar, y felicito la gran movilización que alrededor de esta coyuntura lograron generar organizaciones comunitarias y de base, las comunidades, los colectivos, los procesos y las personas que en un ejercicio legítimo de DISIDENCIA, posicionar en esta ciudad sus nociones objetivas y subjetivas de cara a lo que es realmente el proyecto expropiación de la vida y la dignidad, consigo de la identidad y de nuestros territorios. Esta a su vez abre una puerta que apunta a la consolidación y configuración de un movimiento social que posibilite la transformación de las actuales condiciones de miseria que hoy perpetúan la guerra.
Que sea pues esta la oportunidad de desacomodar a esta ciudad y a sus poderes, de sus tradiciones, a los delfines de la perversa política tradicionalista que este sea el momento DeConstruir esta POLITICA, que esto nos volqué a estorbar en las calles y que final mente nos convoque a un compromiso pleno de las instituciones, las organizaciones, los diferentes sectores sociales y nosotros y nosotras habitantes de esta “Tasita de plata, llenita de miseria”.
“La tierra no se vende”, Calle13 – Latinoamérica
[author] [author_image timthumb=’on’]https://alponiente.com/wp-content/uploads/2013/07/kanabico.jpg[/author_image] [author_info]Yerson González Líder y Actor Juvenil Zona Nororiental Integrante del Movimiento Social Juvenil y Comunitario Objetor Por Consciencia y Antimilitarista “Kanabico Objetor Insumiso[/author_info] [/author]
Comentar