Los ciudadanos que vivimos en la capital del país recibimos con asombro la nueva propuesta del alcalde de limitar aún más el uso de vehículos particulares. La política de quitarle los vehículos a los ciudadanos por varias horas al día esconde en el fondo, la falta de ideas del alcalde en relación con el tema. La prohibición en cualquiera de sus formas es simplemente la salida fácil que tienen los políticos para huirle a los problemas que no quieren solucionar.
Empezaré resaltando que la Alcaldía ha hecho una buena gestión tapando los huecos en las principales vías de la capital, desde la autopista norte, la séptima, la NQS… en general los huecos en estas vías han sido efectivamente tapados y aunque el estado de las mismas no es el mejor, al menos, se siente mayor tranquilidad a la hora de conducir. Sin embargo, es una política que lo único que hace es “tapar huecos”, no soluciona el problema estructural de las vías de la capital: la perversa contratación de la malla vial que hace que los contratistas entreguen estéticamente en buen estado las vías, pero con deficiencias estructurales que sale a la luz pocos meses después de finalizadas.
La excusa política -dirá el alcalde- será la falta de recursos, sin embargo, Colombia hoy cuenta con un marco legal que permite a privados invertir sus recursos en todo tipo de obras. APP es uno de los canales necesarios para mejorar la malla vial de la capital, haciéndola sostenible en el tiempo y sin poner un solo peso de los recursos de los capitalinos. Además, no es un secreto para nadie la cantidad de recursos que ingresan a la secretaría de movilidad vía comparendos, que al parecer se van a otros rubros. Por buena gestión que haga el alcalde al tapar sus huecos, todos sabemos que son paños de agua tibia.
Superado el tema de infraestructura, al Alcalde le faltan ideas a la hora de coordinar la movilidad en Bogotá. Tal vez, en su primera alcaldía no se contaba con herramientas tecnológicas con las que hoy cuenta la ciudad. Probablemente el único que no se dé cuenta donde están los trancones usando waze o Google maps es el Alcalde y la policía de tránsito. Estos trancones, no necesariamente se deben al exceso de vehículos en la capital, los trancones están en horas pico y en hora valle, en los mismos puntos todos los días. La coordinación de los semáforos de la ciudad es simplemente desastrosa, los semáforos en Bogotá están descoordinados y desde luego una mínima gestión del Alcalde nos ayudaría a todos.
Finalmente, la gestión de los choques o accidentes es terrible. La policía de tránsito llega muy tarde a solucionar los accidentes en la capital. No hay forma de medir la gestión de la policía en Bogotá, no parece haber un sistema adecuado de coordinación de la policía de tránsito en la ciudad. El monitoreo en la ciudad es mediocre.
Hacemos un llamado al Alcalde a la gestión inteligente (no sólo a tapar huecos) que nos permitan a todos los que vivimos en la capital, tener una movilidad adecuada y acorde a la capital de Colombia. Use la tecnología Alcalde, hay herramientas que nos pueden mejorar la vida a todos los habitantes de la capital.
PD: El Secretario de Movilidad obligó a la policía de tránsito a imponer en un corto periodo de tiempo 120.000 comparendos a los ciudadanos. Ésa no es la forma Secretario. Cumpla primero con su labor de mejorar su movilidad y luego, una vez su gestión tenga algún fruto, tendrá toda la legitimidad para castigar severamente a los infractores. Escapa a toda justicia, que el Secretario castigue a la ciudadanía, si cada día la ciudadanía es castigada con su mala gestión (mala gestión desde hace décadas en la ciudad).
PD2: El peor enemigo de la vías de la capital es la empresa de acueducto y alcantarillado. Podría asegurar que el 70% de los huecos en la ciudad proviene de intervenciones de esta entidad. Abren un hueco, amplían el alcantarillado y luego hacen una perversa labor a la hora de reestablecer la vía a su estado original. Póngale atención a las vías, al lado de cada alcantarilla hay generalmente un levantamiento de pavimento.
