¿Por qué el Paro Camionero ajusta 41 días sin lograr conciliar con los representantes del gobierno nacional? La situación es compleja y tiene demasiadas aristas para abordar. Según los promotores del paro, el 92% del parque automotor está inmovilizado; es decir, 275mil transportadores no se encuentran laborando. Sin embargo algo es claro, detrás del paro hay intereses que no representan los de los pequeños camioneros; los cuales, han dificultado las negociaciones..
Los datos y consecuencias del paro son alarmantes, un joven murió en Duitama en enfrentamientos con el Esmad; el Palacio Municipal de ese municipio fue apedreado, al igual que los camioneros que decidan trabajar; el gobernador de Boyacá tuvo un accidente de tránsito a raíz de los bloqueos; decenas de policías heridos; distintos municipios y vías nacionales se encuentran militarizadas y; la industria termina fuertemente golpeada. Los camioneros y el gobierno se han levantado de la mesa de negociación y este último ha decidido implementar fuertes medidas de contención al paro. Pero, ¿qué hay detrás del Paro Camionero?
Pedro Aguilar es el presidente de la Asociación Colombiana de Camioneros (ACC), a quien Andrés Villegas Ramírez, vicepresidente de la misma y condenado por el cartel de la chatarrización, acusa de liderar una campaña de corrupción. Contra Aguilar, Jorge Perdomo -Fiscal General de la Nación (E)- ha expuesto que hay investigaciones por delitos de concierto para delinquir, bloqueo de vías, lesiones personales, daño en bien ajeno y tentativa de homicidio. En otras palabras, el líder del Paro Camionero es señalado de estafar el Estado y es investigado por incentivar a la violencia en distintas marchas y protestas.
La chatarrización de los vehículos consta de un proceso mediante el cual, valga la redundancia, se chatarriza un camión cuando su vida útil termina y el gobierno, como indemnización, paga alrededor de 70 millones por cada uno. Sin embargo, el hermano de Aguilar ha sido condenado por comprar camiones viejos a precios bajos,presentarlos al proceso y obtener el subsidio del gobierno. Lo anterior, lógicamente suscita una red de corrupción entre camioneros y funcionarios.
Que el líder de los camioneros esté acusado de corrupción en los procesos de chatarrización y que sobre estos giren gran parte de las peticiones del gremio deja mucho que desear. ¿En realidad estamos ante la protesta consciente de un gremio? o ¿en realidad nos encontramos ante miles de camioneros manipulados por el señor Aguilar?
La protesta y el Paro Camionero, fomentados por Aguilar, se han desbordado y están afectando a millones de colombianos. El desabastecimiento en las ciudades y regiones es culpa del paro mismo y de sus líderes, quienes están condenando a los más pobres a tener que gastar más para comprar los productos de la canasta básica o, sencillamente, no adquirirlos. Aguilar, incluso, ordenó que a “Bogotá no le entre comida para que sepan que somos los camioneros”.
Por un lado, el cierre de vías a lo largo del país ha subido temporalmente los precios de los alimentos en el país, llegando en algunos lugares el 200%. Además, ha impactado la inflación, que para el primer trimestre será del 5.1% y respecto al alza de precios de alimentos llegó a 8,36%. Pero, por el otro lado, y es donde radica el problema, los precios de los alimentos podrían subir permanentemente. De ser subsidiada la labor de los camioneros (la cual es una actividad privada más), se incidiría en sobrecostos que aumentarían la canasta familiar en un 10%, según ha explicado el gobierno.
Queremos invitar al gobierno y a los camioneros a seguir trabajando y aportarle al progreso del país. Hay un esfuerzo conjunto de muchas instituciones por llevar a Colombia la calma. Se han logrado históricas cifras, 2000 caravanas y 31.000 camioneros aproximadamente, realizando viajes por el país. Los camioneros tienen que entender que es posible negociar sin detener a todo un país y generar pérdidas por 1 billón de pesos. La actitud que estos han tomado en vez de legitimar su causa la ha minado y deslegitimado.
Al Poniente pregunta, ¿es la violencia una manera de peticiones ante el gobierno? ¿Existen otras, menos violentas, que le permitan a los camioneros exponer sus inconformidades? ¿Debe ser subsidiado un negocio particular como el de los camioneros a costa del interés general? ¿Hasta dónde llega el poder de un hombre como Aguilar, con presuntos vínculos de corrupción y fomento a la violencia?
[…] han dicho, incluyendo la editorial de este medio, que el paro camionero es algo así como una empresa criminal, que sus promotores han hecho de la […]