Nosotros, los buenos. Segunda parte: una forma de pensar

Mas allá de tomar una decisión entre rambo y Aquiles, es un asunto de mayor complejidad como seguro habrán visto en la anterior entrega y es que en realidad, este conflicto que vive en lo más profundo del espíritu de la espacie humana y que seguramente lo hará per sécula seculorum, tiene implicaciones más trascendentales y relevantes.

Habíamos dejado la historia del dualismo en su apogeo y posterior consolidación en el antiguo levante; pero aquí veremos por qué se convirtió en la base de todas las modernas religiones monoteísta, y no conforme con eso, posteriormente conquistó occidente llegando hasta los tiempos actuales persistiendo como base de los sistemas políticos y sociales modernos.

RUPTURA

¿En qué punto de la historia se diferencian el boy scout con esteroides y Aquiles, hércules, Edipo y la demás infinidad de héroes clásicos? remontémonos a épocas anteriores a la aparición del estado, es más, antes de la aparición de los asentamientos permanentes, cuando el ser humano todavía vagaba sin descanso por los terrenos todavía indómitos. Nos encontramos con dos necesidades de estas sociedades: por un lado, la necesidad de preservar el orden y el conocimiento adquirido por una sociedad específica y por el otro la necesidad de expandirse para colonizar nuevos espacios, adquirir nuevos y valiosos conocimientos, mermar las presiones demográficas en las poblaciones de origen y fomentar la exogamia para mejorar la diversidad genética y por ende la salud de las poblaciones. No es que racionalmente el homo sapiens haya tomado esa decisión, ya la evolución había tomado esa decisión por ellos.

Estas dos visiones siempre han convivido en la psique humana como respuesta al ambiente y a los retos que tiene el homo sapiens como animal sociable y aunque no dejan de ser contradictorios, dependiendo de la situación que se presente puede llegar a ser más fuerte una que el otra e incluso cambiar con el tiempo o hasta presentarse al mismo tiempo.

Como vimos, el héroe clásico era colocado por el designio del destino ante una situación retadora, un enigma por resolver, rompiendo con lo ya establecido en el camino. Muchas veces he descrito ya el periplo del héroe como para describirlo a profundidad de nuevo, pero resumiendo una vez más, el periplo de una u otra habla de las vidas de todos: crecemos en el seno de un hogar o sociedad y que cuando aparece ese llamado, que se llama adolescencia generalmente, sentimos el impulso de la búsqueda y ruptura con el antiguo orden con consecuencias claras pues no se puede simplemente romper con este así como así; Sin embargo, hay una reconciliación con el mundo anterior reestableciendo, un nuevo equilibrio; pero con un mundo diferente, con una frontera ampliada. Por otro lado, la visión del héroe como preservador de la tradición puede ser vista en los profetas y jueces de la cultura hebraica y cristiana como moisés, Daniel y similares o si se quiere, Superman o Batman.

Ambas fuerzas estaban y están presentes en la psique humana, pero ¿que hizo que estuvieran tan remarcadas en la cultura? Debemos aclarar que lo que llamamos clásico en occidente se refiere a los pueblos indoeuropeos del mediterráneo, sean cretenses, griegos en todas sus versiones, romanos entre alguno más, que venían de las estepas del sur de rusia, Ucrania y sitios cercanos al mar negro, pero nos referiremos a esta idea de héroe como clásico pues es la más cercana a occidente, aunque está presente en muchas otras culturas a lo largo y ancho del mundo. Retomando nuevamente el hilo de la historia, sabemos que los panteones de dioses parecidos a los seres humanos de griegos y latinos fueron reemplazados por los dos simples principios del bien y el mal, el mundo dualista; pero ¿se debe esto a un accidente simple de la historia? Yo personalmente no lo creo y ya les contare por qué.

LA SICOLOGIA DEL DUALISMO

Según el famoso psicoanalista Carl Jung, existen doce modelos de la personalidad en los que cada persona puede ser incluido, representando estos figuras con perfiles y rasgos específicos a los que llamó arquetipos. El origen de muchos de estos rasgos puede estar en las respuestas de los seres vivos a los temores atávicos, mecanismos que obran de una forma muy similar ya sea en las comunidades de nuestros familiares los primates o en las primeras comunidades humanas. La visión simple del maniqueísmo evita equivocaciones fatales para estas comunidades relativamente pequeñas debido a la nula o precaria capacidad material con muy poca tolerancia al error que las acechaba, sea este la subestimación de un riesgo o un comportamiento que pueda alterar el orden, algo que seguro también puede ser visto en otros animales gregarios y  que seguramente  ha moldeado la psique humana y la cultura al tender a esta división del mundo en dos extremos, dos colores, dos naturalezas, lo que consideramos seguro que se denominará bueno y lo inseguro o amenazante que se llamará malo.

Ahora, no solo el miedo gobierna el cerebro humano. Otros sentimientos muy fuertes son la indignación y la frustración, estos se deben no tanto al instinto de conservación del individuo como el miedo sino al instinto reproductivo y su intención de replicación de los genes como impulso primordial de la evolución y de la biología. Como ya vimos podemos observar dos patrones: por un lado, el miedo de perder la vida, el estatus conseguido o los bienes que garantizan cierto bienestar mientras por el otro está el deseo de conseguir ese mismo estatus en la comunidad, reproducirse, alcanzar bienes materiales que permitan los dos anteriores o también la seguridad. En este lado la frustración y la indignación son los motores que impulsan esta versión si se quiere ascendente o progresista.

Investigaciones recientes acerca del desarrollo del cerebro nos dicen muchas cosas interesantes acerca de esto. Los investigadores en neurociencia han observado que hasta los veinticinco años más o menos, la zona más activa del cerebro es la amígdala, que es una región que está mas orientada hacia las emociones y por que no, hacia la creatividad mientras que después de esa edad la corteza prefrontal empieza a tomar la preponderancia y esta es la que se encarga de las funciones cognitivas complejas. Es por esto que podemos ver un cambio, que, si bien no es general, si es evidente.

Sin embargo, esto varia para cada individuo ya que si bien algunos son preponderantemente emotivos toda la vida otros se inclinan a una visión más racional y objetiva; sin embargo, las tendencias son a la larga lo que termina pesando, más en un proceso acumulativo como es el desarrollo de la cultura. Sobre el porqué esto ocurre, los mismos especialistas han explicado que esas mismas diferencias se deben a que el cerebro propicia la toma de riesgos y la separación de la comunidad establecida para preponderar la expansión de la especie en cierta forma a costa del individuo en etapas cercanas a la adolescencia. Luego, el cerebro comienza a cambiar para que el individuo pueda, con base a observaciones mas objetivas, entregarle mas seguridad al nuevo o viejo y transformado grupo social.

Como vemos se puede encontrar una relación entre el desarrollo de una sociedad, el simbolismo mitológico (y claramente la estética y el arte porque no) y la actividad neuro química del cerebro, que no es una relación tan espúrea como muchos podrían llegar a pensar es y de hecho Noha Yubal Harari nos habla de los enfoques o planos desde los que se puede generar un pensamiento o idea. En Homo Deus, Harari nos propone una teoría de que la existen diferentes planos de pensamiento:  un plano subjetivo o el de la emoción y un plano objetivo que es el de la razón, pero adicionalmente existe el plano intersubjetivo, que es como los sentimientos y emociones de los individuos particulares se combinan y matizan en la cultura y esta es básicamente la diferencia según Harari entre el homo sapiens y los demás animales: la existencia de una cultura compleja. Si volvemos a Carl Jung encontramos el inconsciente colectivo que básicamente sería el plano intersubjetivo de Harari, el establecimiento del mundo mítico y como vemos fundamentado sobre los mecanismos de liberación del cerebro humano.

El dualismo maniqueo se impuso fácil, más que por las armas, por su utilidad para las comunidades y organizaciones políticas para galvanizar los deseos de los individuos. gracias a que los juicios morales son fáciles; existen solo dos tipos de personas, de actos y de instituciones: las buenas y las malas y claro está que nadie se iba a identificar como malo. Cuando el líder en cuestión es la facción gobernante va a tratar de explotar el sentimiento de miedo haciendo ver como los seres malvados amenazan el sano y correcto establecimiento mientras cuando el líder es aspirante al gobierno tratará de explotar los sentimientos de frustración e indignación hacer ver como seres malvados impiden el cambio de las cosas.

Si bien para las primeras sociedades así como para los políticos de turno era y es más rentable la simpleza extrema del dualismo maniqueo, el evadir la incierta razón y castigar el plano objetivo genera costos para sociedades cada vez mas complejas como lo es la moderna donde se deben sopesar una cantidad de factores y matices para tomar las decisiones más acertadas no solo para el individuo, sino para la sociedad en general; pero precisamente la visión objetiva implica varias cosas que son repelentes al individuo: la primera es que requiere gran cantidad de información, a veces muchas mas de la que es capaz de almacenar o procesar el cerebro humano y es que si antes el problema era la falta de información, hoy de cierta forma lo es el exceso (para una persona) de información disponible. Lo segundo es que la razón no siempre es complaciente y los resultados del análisis objetivo no siempre son los deseados o está de acuerdo con nuestros sesgos cognitivos y sentimientos, lo cual es retador y causa cierta incomodidad o porque no decirlo, dolor y por último el largo tiempo que puede tomar llegar a una conclusión o consenso. Ante eso es más fácil y satisfactorio en todo sentido aceptar la tesis maniquea, aunque en el fondo dudemos de ella.

Hasta aquí ya hablamos de la historia de las ideas dualistas y también de su posible origen en la psique humana, pero, esto ¿para qué nos sirve hoy? Pues mucho con veremos en la próxima entrega. Tenía el propósito de escribir solo un artículo, pero como cosa rara serán tres pues era imposible e injusto simplificar todo al máximo y evadir la complejidad, algo de lo que precisamente estamos hablando aquí. Seguro muchas cosas quedaron sin decir, otras son controvertibles, más como también podrán deducir es imposible abordar algún tema de forma completa y cierta y seguramente si eso pasa, debes desconfiar de los resultados y precisamente veremos en la próxima y ya última entrega, las consecuencias de tan ciertas mentiras.

Luis Guillermo Arboleda

Aunque soy ingeniero de profesión y nunca arrepentido de ello, graduado de la universidad de Antioquia y fanático del rugby, la inquietud por la literatura, el arte y la historia y muchas de las más variadas formas de hablar del mundo siempre estuvieron y están hoy presentes en mí. En un mundo donde lo ecléctico se desecha, aunque hace más falta que nunca. se hace un intento en recomponer la conexión entre los saberes, las conexiones con lo que somos.

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