“Lo que al parecer ocultaban consiste en que desde la llegada de la nueva administración se han suscrito documentos que suman sesenta y dos millones ochocientos cincuenta y seis mil pesos (62.856.000) con el fin de pagar contratos[1] otorgados a dedo a personas que hicieron campaña al señor Felipe Restrepo a la Alcaldía…”
En Colombia la labor de denuncia en medios cuando se tiene al frente bloques políticos poderosos se ha convertido tanto en un acto de fe en la posibilidad transformadora de la opinión informada de la ciudadanía, como en un riesgo a la integridad de quienes se animan a denunciar. El ataque a periodistas, comunicadores y veedores cuando los poderosos de turno ven sus intereses amenazados toma varias aristas, desde la persecución armada, pasando por los intentos intimidatorios y la guerra legal (lawfare).
En el municipio de Bello Antioquia la historia no es diferente, quienes hemos alzado la voz frente a la consolidación de un discurso único estamos siendo perseguidos con el fin de acallar múltiples denuncias contra lo que sucede en la política local, denuncia como la que leerán a continuación. En el municipio de Bello existe un rumor que retumba fuertemente en los oídos de los locales, se dice que la secretaria de Cultura fue usada como moneda de cambio para que los partidos alternativos guardaran silencio y se plegaran a la voz de mando del centro democrático. Buscando la verdad sobre el tema envié dos peticiones a la Alcaldía de dicha ciudad con el fin que aclarara las modificaciones realizadas en la planta de personal de la secretaría desde la sospechosa declaratoria en independencia del concejal petrista Daniel Quintero y de un sector del Partido Verde.
La respuesta a la primera petición desembocó un pleito judicial, en tanto la Alcaldía envió una información ilegible como respuesta a la pregunta por los contratos suscritos, el Juez Civil primero municipal de Bello en proceso 2024-00984 con sentencia del 13 de junio de 2024 consideró que la respuesta no era clara, falló a mi favor y le ordenó a la Secretaría de Cultura compartirme la información de los contratos suscritos por la entidad.
Lo que al parecer ocultaban consiste en que desde la llegada de la nueva administración se han suscrito documentos que suman sesenta y dos millones ochocientos cincuenta y seis mil pesos (62.856.000) con el fin de pagar contratos[2] otorgados a dedo a personas que hicieron campaña al señor Felipe Restrepo a la Alcaldía, apoyaron la candidatura verde al concejo del señor Stiven Marin, que acompañaron el escrutinio en favor de la concejala electa Laura Herón y/o que hicieron campaña por candidatos minoritarios de listas alternativas, así como la contratación[3] a una corporación que tiene como fundador a un integrante[4] del equipo del concejal Daniel Quintero adscrito a la Unión Patriótica.
Es menester aclarar que el monto total de los recursos públicos usados para pagarle a personas que hicieron campaña o apoyaron a candidatos cercanos a los partidos independientes puede ser incluso más alta, esto en tanto que la Secretaría de cultura no contestó una segunda petición sobre la materia y personas que conocen la entidad han mencionado bajo reserva la participación de gestores culturales que estuvieron activos en las campañas mencionadas, cuyos contratos aún no he podido obtener[5].
La respuesta del sector independiente al conocer la investigación no se hizo esperar, el equipo que tiene como líder al concejal Daniel Quintero optó por denunciarme al comité de ética justo 15 días después de conocer la orden del juez, argumentando que la postura cercana al uribismo era una decisión tomada y cerrada, manifestando que les incomodaba mi papel de veeduría. Ante un proceso que puede implicar la afectación de mis derechos políticos, les dedico las palabras del Scte Marcos “Hemos escuchado esta misma frase en voz de campesinos, de estudiantes, de mujeres, de jóvenes, de maestros, de ancianos…. Vivos o muertos, presos o en libertad, desaparecidos o en la calle, en el río o en el mar; les repetimos lo mismo a los grandes políticos, a los grandes ricos” NO NOS CALLARAN.
[1] Ver los contratos de la Alcaldía con referencias: CTO-0353-2024, CTO-0438-2024 ID CO1.PCCNTR.6113461, CTO-0457-2024 ID CO1.PCCNTR.6159277, CTO-0544-2024 ID CO1.PCCNTR.6243517, CTO-0554-2024 ID CO1.PCCNTR.6159857, CTO-0813.2024 ID
CO1.PCCNTR.6296039
[2] Ver los contratos de la Alcaldía con referencias: CTO-0353-2024, CTO-0438-2024 ID CO1.PCCNTR.6113461, CTO-0457-2024 ID CO1.PCCNTR.6159277, CTO-0544-2024 ID CO1.PCCNTR.6243517, CTO-0554-2024 ID CO1.PCCNTR.6159857, CTO-0813.2024 ID
CO1.PCCNTR.6296039
[3] Ver el contrato con identificación CTO-0273-2024
[4] Su característica como integrante es reconocida por miembros de la Unión Patriótica en redes sociales.
[5] CTO-023-2024
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