“el feminismo no se trata solo de celebrar absolutamente todo lo que las mujeres hacen, se trata de buscar equidad, construir un mundo en el que todes tengamos oportunidad para poder desarrollarnos plenamente y tener una vida digna”
La compañía “Blue Origin” lanzó su onceava misión al espacio el pasado 14 de abril, Las mujeres que hicieron parte de la tripulación eran: la reconocida cantante de pop Katty Perry, la periodista Lauren Sánchez, quien además es prometida del multimillonario y dueño de Blue Origin Jeff Bezos, la presentadora Gayle King, la científica y activista Amanda Nguyen, la productora de cine Kerianne Flynn y la ingeniera espacial Aisha Bowe. Esta misión fue promocionada como todo un hito feminista, pues la tripulación estuvo conformada por solo mujeres, cosa que no se veía en viajes espaciales desde 1963, cuando la astronauta rusa Valentina Tereshkova fue enviada en una misión de la Unión Soviética.
La compañía y tripulación catalogaron este viaje como “una celebración de la inclusión y el empoderamiento femenino en el espacio”, sin embargo, este viaje y la tripulación han recibido duras críticas. Algunas personas en redes sociales han expresado que este viaje no representa el movimiento feminista, argumentando que muestra las crecientes desigualdades y grandes brechas socioeconómicas que existen y son cada vez más notorias, además de justificar un capricho pintoresco bajo el nombre del progreso, el feminismo y un supuesto bien común que beneficiara al planeta y la humanidad.
Blue Origin se creó bajo la premisa de democratizar el espacio para que sea accesible para todos aquellos que lo deseen, además de llevar a cabo investigaciones con materiales espaciales para acelerar el desarrollo tecnológico y la producción de energías renovables. “Estamos construyendo una carretera hacia el espacio para el beneficio de la Tierra” esta es la frase que aparece como la misión en el sitio web oficial de la compañía, sin embargo, no podemos dejar de preguntarnos ¿esto es verdad? Aunque suene muy bonito eso de tener las estrellas cerca de una forma accesible y ayudar a la tierra, lo más probable es que no sea así de fácil y lindo como lo pintan. Este es el undécimo vuelo que realiza la compañía, y como varios de los anteriores, se hizo con el único propósito de ser una experiencia divertida y extravagante que solo los multimillonarios, o los amigos de estos, pueden darse el lujo de realizar.
Las 5 mujeres que hicieron parte de la tripulación no fueron escogidas al azar, todas ellas ya tenían algún tipo de relación con Jeff Bezos o con su prometida Lauren Sánchez, quien también hizo parte de la misión. Si bien no todas son millonarias, o al menos no lo suficiente para poder costearse un tiquete espacial, está claro que todas ellas poseen un capital importante, no solo económico sino también social. Esto es algo que hemos visto también en los viajes de Blue Origin anteriores a este, la mayoría de las personas que han tenido la oportunidad de hacer este viaje de turismo espacial son parte de ese 1% de los más ricos del planeta, amigos de Bezos, o trabajadores de la compañía con puestos privilegiados. Por lo que podríamos cuestionar las intenciones de Blue Origin de democratizar el espacio y volverlo accesible para todos, ya que ahora solo están demostrando ser la nueva tendencia de entretenimiento lujoso para aquellos que pueden costearlo.
¿Pero entonces, si todos los viajes han sido en esencia similares porque este ha sido más criticado y ha tenido más difusión que los anteriores realizados por la compañía?
Pues primero por el mensaje supuestamente feminista con el que promocionaron este viaje, Blue Origins y la tripulación declararon que el propósito de este viaje era impulsar e inspirar a las mujeres que están interesadas en carreras de ciencias, tecnologías, ingenierías y matemáticas (STEM por sus siglas en inglés). No obstante, muchos han cuestionado que tienen que ver una estrella de pop, una presentadora y una periodista con carreras STEM, personas por medio de redes sociales incluso han asegurado que las únicas que tenían derecho de realizar ese viaje eran Bowe y Nguyen, pues son las únicas de la tripulación con experiencia y una carrera en STEM, siendo ambas extrabajadoras de la NASA. Aunque si es verdad que ambas han trabajado llevando a cabo investigaciones que han contribuido a la ciencia aeroespacial, en esta ocasión el viaje no se hizo con fines investigativos, esto se puede inferir fácilmente con la duración del viaje, que fue solo de 10 minutos, además de que la tripulación no tuvo mayor participación en los aspectos técnicos ni de planeación del viaje, por lo que inclusive si solo hubieran enviado a Bowe y Nguyen el mensaje “feminista” y de empoderamiento de las mujeres en la ciencia seguiría siendo vacío.
Tampoco podemos dejar de mencionar a Katy Perry, pues fue quien se convirtió en la cara pública de esta misión y quien se ha llevado la mayoría de los titulares y las críticas. Si Perry no hubiera estado en la tripulación lo más probable es que este viaje, Blue Origins, y la propia marca personal de la cantante no tendrían mayor relevancia en los medios como la han tenido estos días, ha pasado una semana desde que despegaron, y esta noticia sigue dándonos de qué hablar. También es importante mencionar que la cantante pronto realizará su tour mundial, por lo que no es casualidad que este viaje se haya realizado en estas fechas, tan cerca del inicio de la gira, lo anterior nos lleva a pensar que es solo una forma de promoción comercial de la cantante y de la empresa.
Blue Origin y la tripulación del onceavo vuelo al espacio no representan ni inspiran al feminismo, solo están haciendo ‘pinkwashing’ que es la estrategia comercial en la que marcas, empresas, personalidades, instituciones e incluso gobiernos usan la lucha de los derechos de las mujeres y/o de la comunidad LGBT para poder llegar a más público, autoproclamándose feministas, pro-derecho, pro-lgbt pero no estando realmente comprometidos con esa causa.
No olvidemos que en 2021 Blue Origin fue acusada de tener una cultura laboral sexista mediante una carta abierta firmada por 21 trabajador@s de la empresa en ese momento. Tampoco olvidemos la denuncia que hizo Mercedes Weena, ex trabajadora doméstica del magnate hace algunos años, acusándolo de racismo y de explotación laboral.
Por eso este viaje no es un logro ni representa al movimiento, el feminismo no se trata solo de celebrar absolutamente todo lo que las mujeres hacen, se trata de buscar equidad, construir un mundo en el que todes tengamos oportunidad para poder desarrollarnos plenamente y tener una vida digna, además de poder convivir armoniosamente con la naturaleza. El feminismo no es un espectáculo ni un entretenimiento ni un adjetivo calificativo que se le da a cosas o acciones, el feminismo es una lucha que se construye por y para todas, no solo para las más privilegiadas. Que un grupo selecto de celebridades femeninas haya podido realizar un viaje de 10 minutos al espacio sin ningún propósito más que divertirse y promocionarse, no es feminismo, no representa al movimiento.
Maravilloso