Difícilmente en la historia de Colombia se repita una situación como la que estamos próximos a presenciar. El presidente de la república con mayor popularidad en la historia reciente de nuestra patria, organiza a un grupo de excelentes personas, seguidoras de sus ideas y comprometidos con su causa, para lanzarse de nuevo a la arena política, esta vez como cabeza de lista al senado.
Privilego es la palabra que mejor expresa mi sentir frente a esta situación, pues creo que un fenómeno de este tipo y con la magnitud, que imagino sucederá, no lo podrán presenciar de nuevo en muchas generaciones.
Un viento de esperanza se siente en Colombia, pues es suficiente dar una mirada a la lista de honorables “desconocidos”, que componen el movimiento Centro Democrático, para darse cuenta que la gran mayoría de estos ciudadanos no vienen de grandes familias burguesas y tampoco están respaldados por maquinarias políticas y burocráticas que aseguren su elección, por el contrario, estos “desconocidos” han ocupado cargos públicos o privados, dónde han podido demostrar sus capacidades con resultados.
Ahora bien, nada es perfecto en el mundo y es absolutamente normal que usted y yo tengamos discrepancias con algunos de los candidatos que componen esta lista, pero con seguridad esas personas las podemos contar con los dedos de una sola mano. A lo que quiero llegar con este punto es que usted y yo como electores estamos ante la posibilidad, con un solo voto (el nuestro), de meter al congreso de la república, como mínimo a 25 excelentes senadores, lo cual sería una verdadera renovación política.
Esto es un llamado tanto para los Uribistas como para los no Uribistas, en esta ocasión debemos sugerirle a las personas que den una revisada a quienes componen la lista al senado encabezada por Álvaro Uribe Vélez, estudien su pasado, den una mirada a sus hojas de vida, sus estudios, de dónde vienen, y se sorprenderán con la calidad de cada una de esas personas.
Mirándolo en perspectiva usted podría votar por 1 candidato al Senado que no esté dentro de los candidatos del Centro Democrático, con seguridad habrá grandes personas que se lancen por otros partidos. Es una excelente persona, honesto, trabajador, comprometido por el país, etc. Eso sería una excelente opción, sin embargo, una golondrina no hace verano, y por más bueno que sea un senador, si está solo en el parlamento, poco podrá hacer.
Ahora, si los colombianos salen a votar masivamente por el Centro Democrático, tendrán la certeza de estar votando por varias personas al mismo tiempo, sabiendo que en su gran mayoría son excelentes candidatos y así con esos votos lograremos llevar un equipo significativo de personas que renovarán la clase política de nuestro país.
Ojalá la falta de conocimiento de las personas no permita que se dilapide una oportunidad de oro como la que tenemos frente a nosotros.
Amigos, está en nuestras manos educar a los electores para que en las próximas elecciones democráticas depositen su confianza en la lista cerrada del Centro Democrático y nos acompañen con su voto para que podamos lograr cosas grandes.
Les sugiero solamente, como abrebocas, dar una mirada a los siguientes candidatos. Los mencionaré en el orden que aparecen en la lista:
Paloma Valencia, Ana Mercedes Gómez, Alfredo Rangel, Alfredo Ramos, Thania Vega, Paola Holguín, Honorio Enriquez, Gabriel Arango Bacci, entre muchos otros. Esto por citar sólo algunos ejemplos.
¿Los conoce? Si no los conoce ya es una buena señal porque el común denominador es que no son politiqueros, si los conoce muy seguramente será por sus logros.
Puntilla: Mi apuesta es por un mínimo de 28 Senadores.
[author] [author_image timthumb=’on’]https://alponiente.com/wp-content/uploads/2013/07/IMG_8757.jpg[/author_image] [author_info]Juan Manuel Jaramillo Ingeniero Mecánico e Ingeniero de Producción por profesión, político por afición. Apasionado por la movilidad y el espacio público. Columnista ocasional de Minuto30, Periódico Debate y ahora Al Poniente. @Jumajara Leer sus columnas.[/author_info] [/author]
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