El sábado 4 de junio en Puntas de Ocaido, en la zona rural del municipio de Urrao se presentó un enfrentamiento entre un grupo ilegal de la zona y la fuerza pública. Se estima que alrededor de 106 familias habitan en este sector las cuales temen por un desplazamiento forzado, según las denuncias de los habitantes las amenazas por parte del grupo ilegal se habrían hecho desde el jueves de la misma semana, por lo que la comunidad se encontraba atemorizada; en la zona no se presentaba un enfrentamiento de tal magnitud desde el año 2008, año en el cual la guerrilla de las FARC reclutaba niños para hacerlos parte de sus frentes. En el hecho fue herido un miembro de la fuerza pública que se trasladado de inmediato a la ciudad de Medellín y al menos dos muertos pertenecientes al grupo ilegal que habita en la zona rural.
Los cadáveres fueron exhibidos el domingo 5 de junio afuera de las instalaciones del comando de policía del municipio de Urrao, acontecimiento que presenció la mayoría de la comunidad por el largo lapso que los dejaron allí y por tratarse además de un lugar bastante concurrido. La comunidad no tardó en hacer sus comentarios frente a lo ocurrido debido a que en el pasado fueron bastante golpeados por la guerra y quedan heridas que no sanan, y con toda razón, es increíble que nuestros hombres de honor sean capaces de exhibir como trofeos unos cadáveres que sin importar el bando al cual pertenezcan le duelen a sus familiares y no solo es guardar respeto por los fallecidos sino también por el dolor de sus familiares, los muertos no se clasifican entre buenos y malos, todos los muertos en Colombia duelen.
Comentar