Estamos en una semana decisiva para el país: por un lado, vigilar desde los medios de comunicación y desde la ciudadanía que el reemplazo de la cuestionada ministra saliente de Comunicaciones o TICs Karen Abudinen (y que este reemplazo no sea una cuota política de x o y partido o clan regional) por alguien que represente los intereses del periodismo comunitario e independiente, de la reactivación tecnológica y la vida del pueblo colombiano; y por otro lado la renovación de los gobiernos locales en elecciones atípicas en municipios estratégicos del país, en especial de la capital industrial de Boyacá: Duitama. Lo anterior en medio de la unión indirecta entre los provocadores de paros y terrorismo con los actores políticos locales para distraer la atención de la realidad.
AL RESCATE DEL MINTIC (Y DE LA TECNOLOGÍA COLOMBIANA)
En este artículo no vamos a llover sobre mojado sobre los sucesos ocurridos recientemente en la renuncia de la ex ministra de las TICs Karen Abudinen por pedido explicito del Presidente de la República y por presión del control político del Congreso, hallazgos del periodismo investigativo y la protesta ciudadana. Dada la impopularidad y pese a que por ocupación muchos militantes y simpatizantes del partido de Gobierno y el uribismo que confunden lealtad con defender lo indefendible en la única forma que saben: a través de la saturación de las redes sociales con contenidos basados en las matrices de odio artificiales.
No obstante, y más allá de las ideologías y la libertad de expresión existente dentro de los comunicadores y los medios comunitarios, alternativos e independientes (y también los medios masivos) del país, debemos ser como lo debe ser nuestra tarea diaria, la voz de la realidad y la razón en ser coherentes y apoyar de manera unánime la llegada de una persona que pertenece a nuestro gremio, que conozca los detalles técnicos y administrativos del funcionamiento de las comunicaciones, y que provenga del oficio y lo conozca de forma vivencial.
Y entre las dos opciones dichas en los circuitos políticos y entre los medios especializados la que coincide con lo anterior es Lorena Angarita, periodista, directora gremial, empresaria y estudiante de derecho bogotana que ha trabajado por más de veinte años por el equilibrio de cancha en el sector de las comunicaciones del país.
¿Será que los políticos y los ciudadanos por primera vez iremos positivamente para el mismo lado?
Centro Administrativo Municipal de Duitama, sede de la Alcaldía. Cortesía Boyacá 7 Días
DUITAMA: UN COMPROMISO DE TODOS
Este próximo domingo 12 de septiembre se realizan tres procesos de elecciones atípicas en Colombia para alcaldías municipales: en la región Caribe en Margarita (Bolívar) y San Onofre (Sucre y en la región Central Andina la ciudad de Duitama en Boyacá que necesita cuanto antes un gobierno gerencial que reactive de manera innovadora, sostenible e inclusiva el empleo a gran escala y la institucionalidad en la capital industrial del oriente del país.
Estos últimos comicios son de vital importancia debido a que hablamos de una región estratégica en el desarrollo industrial, agroindustrial, comercial, ecológico y logístico de la región central del país. El fin de la crisis política que no solamente fue ocasionada con la destitución de la ex alcaldesa Constanza Ramírez Acevedo en abril de este año por decisión del Consejo de Estado de declarar nula su elección debido a inconsistencias en su aval de candidatura, sino por las presiones de grupos políticos que aunque militan en diferentes partidos y movimientos, son afines en las malas prácticas, las relaciones con grupos al margen de la Ley (nuevos y viejos) que desestimulan la academia, el conocimiento y el progreso porque la dignidad humana interrumpe su poder.
De los nueve candidatos a la alcaldía (cinco más que para la alcaldía de Bogotá en las elecciones de 2019 en un municipio con censo electoral con apenas más de noventa mil ciudadanos) el único que ha cumplido su palabra con sus potenciales electores, con los medios y la comunidad es el abogado de la Universidad Libre y empresario agrario José Luis Bohorquez, quien aspira con el aval del movimiento de la Colombia Humana y el partido Unión Patriótica.
Aquí muchos dirán: ¿este tipo respaldando a un candidato de izquierda? Sí y no. El candidato puede tener su aval y pensamiento, pero las realidades y contextos regionales nunca se pueden analizar ni solucionar con puntos de vista sectarios, sino con el sentido común, coherencia y unidad con las comunidades de los territorios y regiones.
Boyacá necesita seriedad. Duitama necesita un gobierno de verdad.
Comentar