Luego de observar los aspirantes para el Congreso de la República encontramos algo similar a las anteriores campañas: los mismos caciques de siempre, con las mismas maquinarias, estrategias, y propuestas. El 80% son aquellos que durante 15 años o más, se han apoderado de los asientos legislativos, impidiendo que nuevas personas, idóneas por demás, lleguen a renovar una corporación que padece un total desprestigio institucional.
A decir verdad, el panorama es desastroso ya que en las principales ciudades los clanes han perpetrado su poder oscuro para asignar de manera indecorosa a quienes placen sus oscuros intereses. Algunos condenados por parapolítica o escándalos de corrupción relacionados con Odebrecht y el Cartel de la Toga, no tienen reparo ni vergüenza para manifestar desde prisión, la turbia voluntad de elegir a sus reemplazos legislativos en sus arrodillados territorios, bajo la colaboración de intermediarios funestos que fungen de palomas mensajeras. Ya conocimos como algunos candidatos Cordobeses y Santandereanos se presentan como herederos del electorado de potenciales corruptos que, no han hecho algo diferente que saquear los recursos de la patria. En efecto, Musa Besaile, Ñoño Elías y Hugo Aguilar por mencionar algunos, pretenden materializar sus intenciones a través de las precarias necesidades de la población. La corruptela de las campañas de sus herederos se constituye como una gran bazofia para satisfacer voluntades particulares.
Lo indignante es que la población ignora la gravedad del asunto a sabiendas de que se trata de ‘herederos’ electorales auspiciados por bandidos que pretenden continuar en la política por interpuesta persona. Muchos electores han manifestado la voluntad maligna de concederle el voto a aquellos bribones, seguramente a cambio de alguna prebenda irrisoria y, ello es lo que produce asombro.
Los ciudadanos en calidad de constituyente primario son los responsables directos de elegir a sus representantes en el legislativo. Por tanto, si los electores optan por elegir al continuador de un criminal es porque ellos son más corruptos y más criminales que aquel que están eligiendo. He ahí el conflicto.
El detrimento ético es degradante, porque directamente se está patrocinando al clientelismo. ¿Cómo es posible que tengan la inconsciencia de premiar a los aspirantes de la inmundicia?
Mientras no reflexionemos sobre la importancia de hacer un buen uso de aquel sagrado mecanismo de participación que es el voto libre y espontáneo, la podredumbre y la miseria continuarán invadiendo esta tierra fértil. Finalmente, el único responsable de ello será el conglomerado social. Luego, será demasiado tarde para retomar el rumbo de la estabilidad.
ADENDA # 1: Es un golpe en contra del Estado de Derecho que pretendan coaccionar al Congreso a través de un pronunciamiento del Tribunal Administrativo de Cundinamarca. Los tribunales de la jurisdicción contenciosa administrativa no pueden comportarse como partidos políticos a favor del Gobierno Nacional. ¿Dónde queda el principio de separación de poderes? ¿Cómo pretenden derogar la voluntad del legislativo?
Santos se robó las elecciones de 2014, el plebiscito de 2016 y ahora organizó un entramado para ir por las curules que son para las Farc, no para las víctimas. Así, gira el comportamiento característico de un sinvergüenza.